Obliviate

parte 35

Harry, Draco y Theodore se encuentran en el centro de la cancha de quidditch, quién los hubiera visto tres años atrás creían que están discutiendo pero no es el caso.

Harry lleva su escoba al igual que Draco quiénes tienen ahora el turno de entrenamiento, el cuál sigue pensando lo ilógico que es lo que hacen en el castillo de seguir con las materias sabiendo que la guerra está en la puerta, pero se adecúa a la situación por más absurda qué le parezca.

—¿Qué harás en Navidad?— Pregunta.

Draco rueda los ojos ante el cambio brusco de conversación del morocho.

—¿A que se debe tu pregunta, Potter?— suelta una carcajada.

—Creo que es obvio.— Se ríe subiendo sus manos.

—Este año lamento informarte que no harán baile de fin de año, por lo cual no podrás invitarme como acompañante si esa era tu pregunta... Una pena.— Mira a su amigo y sonríe de costado.

Harry suelta una carcajada junto a Theodore, quien también lo hubiera visto hace unos años atrás jamás se creerían esa escena.

—Malfoy.— Rueda los ojos y lo mira con seriedad en su rostro.

—¿Que sucede?— Traga saliva.

—No tenemos dónde ir, viendo cómo está la situación con el refugio de la órden, y no es bueno que estemos separados.— Aprieta sus labios preocupado...

—Eso lo sé...— Exclama frustrado.

—Pense que tendrías una coartada en mente, algún lugar en donde podríamos estar todos, ya que no va a ser seguro tampoco que estemos acá, hable con Minerva y me puso en conocimiento de qué prefería que no estuvieramos en esa noche...— Mueve sus labios a un costado.

—Se que la directora hará de la sala de menesteres un gran salón para que todos puedan festejar, el mismo incluirá las habitaciones de las casas por un posible ataque de voldemort.— Explica theodore.

—¿Y con eso...?— Suspira.

—Pero es raro que te haya dicho que no vayamos...- arrasca su ceja pensativo...

—La guerra no será en navidad. Escupe Draco con asco.

—Es lo que esperamos que no suceda.— Infla su pecho.

—Pero el castillo dejo de ser el lugar más seguro del mundo desde que Dumbledore murió, es lógico que ella tenga miedo...— Suelta un leve suspiro y arrasca su barbilla mirando a Harry.

—Por eso vine a hablar directamente con vos.— Admite.

—Tengo una idea en mente.— Su sonrisa se ensancha.

Harry achina sus cejas y lo mira con algo de temor en preguntar de qué se trata.

—Espero estar incluido.— Palmea su espalda con una mueca.

Draco asiente subiendo sus hombros.

—Lo estarás.— Le guiña un ojo y se dirige a su posición para esperar a su equipo.

Harry se va a los vestuarios negando divertido con la cabeza.

—Pero no esperes un regalo de mi parte, Potter.— Lo mira con asco.

Harry le regala otra sonrisa divertida desde la distancia.

—¡A jugar!— Theo da un leve golpe al suelo y se eleva cuando ve a sus compañeros llegar a las corridas bajo la mirada de desaprobación del rubio, él cuál se une al juego rápidamente luego de perder de vista a Harry potter.