Capítulo 32

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Se está acercando la navidad y mi hija se encuentra muy entusiasmada. Todos los años festejamos de la misma manera, en la casa de mi hermano todos juntos. En estas fechas me es inevitable no pensar en mi madre, ella siempre intentó hacer de estos días una celebración especial.

La extraño demasiado, todavía me cuesta creer cómo es que la vida se la llevó tan pronto. Me hubiese encantado poder disfrutar más de ella, más tiempos vividos, más anécdotas para contar, pero bueno hay que aceptar el ciclo de la vida y seguir para adelante.

Volviendo un poco a la realidad...

En la empresa nos está yendo muy bien por suerte, pudimos abrir varias franquicias y estamos muy felices con los resultados.

Mi vida amorosa sigue en el mismo estado, nulo. Con Emanuel finalmente aceptamos que somos más compañeros que novios, seguimos viviendo en la misma casa y todo; igual Ema viaja tanto que apenas pasa un fin de semana.

Por otro lado estoy preocupada, Serena últimamente me pregunta mucho por su padre y ya no tiene 4 años, debo decirle algo, lo que sea, y no sé qué hacer. No me gustaría tener que mentirle, pero tampoco le puedo contar la verdad, no lo entendería. En estos momentos desearía que mi madre esté conmigo para ayudarme.

Pero bueno, por el momento puedo pilotear la situación, pero sé que me queda poco tiempo. Además mi hija no es ninguna sonsa, comprende y entiende todo. Es muy inteligente, mismo tiene un vocabulario que me sorprende para su edad.

En estos momentos estamos yendo a la casa de Brando, nos invitó a almorzar. Volvió de Argentina hace unos días y recién ahora lo pudimos ver.

Mi pequeña florcita se encuentra muy emocionada por ver a su "tito" Brando. Debo admitir que también lo estoy, se hace extrañar el gruñón.

Sere se encuentra bañada, cambiada y perfumada para ver a sus "titos" y "titas". Por mi parte sigo en pijama, asi que sin mucho más que decir voy directo al baño. Dejo a Sere viendo unos dibus y jugando con sus peluches.

Voy volando al baño y me doy una ducha rápida. Luego como siempre mi rutina, me maquillo suavemente, mi pelo lo dejo que se seque de forma natural.

Voy a mi vestidor y en el día de hoy decido ponerme unos jeans con una camisa y una zapas, como siempre mi campera de cuero, ella me acompaña a todos lados.

-Hija vamos.

-Sí mami.

Cada vez que esucho su voz, mi corazón palpita de la ternura. Tiene un tono tan suave, tan dulce. Aún no puedo creer que estuvo durante nueve meses en mi vientre.

Nos subimos al auto, cada una en su asiento correspondiente y con nuestros cinturones abrochados. Ponemos música y comenzamos nuestro viaje.

Tenemos la suerte que la ruta se encuentra despejada, por lo tanto no es un problema ir. Llegaremos más que a tiempo.

Cuando observo las rejas de la casa de mi hermanito, mi hija se pone muy emocionada y comienza a mover sus manitos.

Los muchachos de seguridad ya me conocen y no tengo ningún problema en ingresar. Como siempre los muchachos andan por todos lados, Brando nunca me quiso explicar bien el por qué. Según él es por seguridad, pero para mi ya es un exceso, además me extraña que un tipo como Brando tenga tanta seguridad. Siempre estuvo solo y se cuido solo, pero bueno ahora está rodeado de los hombres de negro.

Mi hija ama a su mano derecha, Carlos, siempre que venimos Charly le regala alguna golosina y juega con ella.

Estaciono la camioneta en mi lugar y veo como Carlos se acerca a la puerta de Serena y la ayuda a bajarse.

-Caloss.

-Hola princesita.

-Traje muchos muñecos para jugar.

-Yo tengo un regalo especial para vos.

-A ver.

-Primero vamos a saludar a todos y luego te lo doy.

Con mi cartera en mano, me acerco a Charly y nos damos nuestro beso y abrazo de siempre.

-Verita, ¿cómo estás?

-Muy bien.

-Me alegro, las están esperando.

-¿Vos Charly, estás bien?

-Excelente señorita.

Nos dirigimos a la casa, mi hija corriendo como siempre. En la sala de estar se encuentran Franco con Sofi, muy melosos como siempre. Por otro lado está Brando con su sonrisa, verlo sonreír me llena el alma. Mi hermano siempre fue un tipo duro, o mejor dicho aparenta serlo. Pero no es así, yo sé que mi hermano pasó por muchas cosas y con el pasar de los años se construyó esa coraza. Pero me alegra saber que hay alguien que puede llegar a romper ese muro y transformar a mi hermanito en un caramelito.

Nos saludamos todos con todos, repartiendo muchos besos y abrazos. Las chicas que ayudan a mi hermano son unos amores, mejor dicho señoras. Siempre hacen el plato favorito de cada uno, por ejemplo cuando viene Sere ya saben que hay que hacer pasta, ella tiene una debilidad por los sorrentinos. Aunque come de todo por suerte, pero tiene sus preferencias.

Pasamos una tarde maravillosa, pudimos hablar con mis hermanos como lo haciamos antes. Sere jugó con todo el personal de la casa, luego le agarró un poco de noni y se acostó en el cuarto de Brando.

-Debo decirles algo -escuchamos la voz de Brando y rápido giramos nuestras cabezas para su dirección. Seguramente es algo de la empresa.

-Te escuchamos hermanito -comenta Franco.

-Encontré a la mujer de mi vida.

Bueno...estoy un poco sorprendida.

-¿Estás saliendo con una chica? -Franco pregunta anonadado. La realidad es que Brando jamás estuvo de novio, simplemente se acuesta con chicas y listo, como él dice; yo nunca estuve de acuerdo.

-Sí, hace ya un par de meses. Me tiene completamente enamorado, no paro de pensar en ella.

Escuchar a Brando hablar de esa forma me emociona, mi madre se hubiese puesto muy contenta.

-Qué hermosa noticia Brando -comento yo.

-Vamos a vivir juntos y es probable que pasemos las fiestas juntos. Tengo ganas de darle la sorpresa e invitar a su familia.

-Pero Brando...¿Hace cuánto que están saliendo? -pregunta Sofi.

-Hace ya unos meses, pero no sé qué sucede con ella. Todo es más intenso, siento que estoy con ella desde hace años, pero la realidad es que nos conocemos hace menos de un año; pero simplemente me tiene cegado.

-Qué hermoso hermanito, me llena el alma escucharte decir estas palabras. Estoy seguro que mamá hubiese estado muy orgullosa de ti.

-Ella me lo dijo y yo no le creí, hasta hace poco que Olivia apareció en mi vida.

-Brindemos por eso hermanito.

Todos brindamos y festejamos que Brando al fin encontró al amor de su vida. Y le creo completamente, además nunca lo ví a Brando tan feliz, jamás lo esuché hablar así de una mujer.

Por suerte no falta mucho para la navidad, no veo la hora de que ese día llegue, la pienso abrazar por el simple hecho que hace a mi hermanito feliz.

♡ ♡ ♡

Holiss ❤❤

Capítulo nuevo, espero que les guste y voy a intentar subir otros más esta semana.

Ya falta poquito para el gran encuentro ❤

Muchas gracias por sus votos y comentarios, me encanta verlos y leerlos❤

Muchos besos 😙😙












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