Lo bueno está por llegar || WARMI

Capítulo 54

(Punto de vista de Ana)

La breve conversación con Noe antes de comer me había dejado con la mosca detrás de la oreja, y sabía que a Mimi también. Y por otra parte, tenía a Amaia... Hacía un par de días que venía notando en ella pequeños comportamientos que me decían que tal vez sospechaba algo. No había querido darle demasiadas vueltas, porque tampoco era algo que me preocupase, pero me causaba curiosidad el entender hasta qué punto mi intuición no se equivocaba o si, por el contrario, me estaba montando castillos en el aire.

Esa tarde tuvimos clase con Manu y con los Javis. No había podido pasar mucho tiempo con Mimi, pero me gustaba comprobar que siempre éramos capaces de sacar nuestros pequeños momentos para estar juntas, aunque fuera a cuentagotas. Mientras merendaba pensaba en esto, a la vez que trataba de lidiar con mis miedos previos al pase de micros. Después de lo que había pasado la semana anterior, me asustaba no estar a la altura, no llegar al resultado que los profesores esperaban de mí, a lo que el jurado esperaría de mí el día de la gala... Pero sobre todo me daba miedo no estar a la altura de mis propias expectativas y defraudarme a mí misma. Al final yo siempre era mi peor enemiga, mi más dura crítica.

-¿En qué piensas, Ana? -Miriam me saco de mis pensamientos.

-Nada, es que estoy un poco nerviosa por el pase de micros. Aún no me acostumbro...

-Pues yo, que mira lo ronca que estoy...

-Lo van a hacer genial. Las veces que los he escuchado suena tan bonito. -Y era cierto, Roi y ella hacían una pareja artística genial: gallego power a tope.

-No sé yo, está muy floja la cosa...

-¿El qué está flojo? -Como si lo hubiéramos invocado, Roi apareció a nuestro lado y se sentó a la mesa también.

-Pues nuestro "Malibu". -Le dijo Miriam.

-Dímelo a mí, que le doy una de patadas al diccionario con la "pronunsiesion"... -Le contestó él, despertando carcajadas en nosotras.- Pero lo vamos a sacar.

-Pues claro, lo van a bordar. -Les reforcé yo.

-Ojalá... -Miriam no estaba demasiado convencida.

-Ojalá morirme ahora mismo. -Dijo Cepeda, dejándose caer en la silla al lado de Roi.

-Buenoooo, cuidado que llega la alegría de la huerta. -Roi le dio unas palmaditas en el hombro a su amigo y a Miriam casi se le sale la leche que se estaba tomando para fuera de la risa.

-No estoy para coñitas, que a ti te querría yo ver con el "Reggaetón lento".

-Bueno, no empieces como Ana y Mimi la semana pasada, eh... Habría que verme, dice, pues cuando quieras. Este juego de cadera puede con todo, amigo.

-¿Qué os pasa? ¿Ya estáis en modo matrimonio vosotros dos? -Dijo Ricky, que se sumó también a la merienda.

-Aquí el señor, que no se para de quejar por su canción. -Le dijo Roi.

-A ver, es que es jodidilla, la verdad... -Intervine yo.

-Gracias, Ana. -Cepeda enfatizó el tono de voz, como queriendo mostrar su gratitud por que alguien le entendiera en lugar de meterse con él.

-Pues con lo contento que estabas el martes cuando te tocó... -Le dijo Ricky.

-Eso es porque no era consciente de lo que implicaba. Ya cuando lo pensé un momento no me hizo tanta gracia...

-Bueno, pero después te va a ayudar Mimi con la coreo, ¿no? -Le dije yo tratando de animarle.

-Ahhh, bueno, entonces que tiemble Beyoncé. -Saltó Roi.