El vuelo ha sido algo frustante, James parece no querer hablar de lo que pasó así que yo tampoco saco el tema. Veo a la aeromoza acercarse con una charola de bocadillos y galletas, observo sonriente y cuando pasa tomo varias piezas. Me giro y veo como James me observa divertido, seguramente burlándose de mi glotonería.James POV
Me da ternura ver cómo Annette toma tantos bocadillos con sus delicadas manos, se gira y nuestras miradas se cruzan provocándome una sonrisa. —Abre la boca —suelta divertida con su dulce voz mientras me acerca una galleta a los labios.—No, gracias —respondo con seriedad, pero insiste tanto que finalmente accedo y lleva la galleta hasta mi boca, sus dedos rozan con mis labios dejándome sentir su tacto.
Me pongo a revisar algunos asuntos del corporativo en la tableta, gracias a los inversionistas que aceptaron el contrato tendremos trabajo al llegar. Volteo de reojo hacia Ann, que por cierto se ve tan tierna casi durmiéndose, sus ojos se cierran y los abre rápidamente, esto le pasa un par de veces más y sonrío al recordar el vuelo anterior.
—Ven, recuestate aquí —sugiero extendiendo mi brazo para darle acceso a mi pecho.
Veo cierta confusión en sus ojos, pero finalmente se recarga sobre mi, posicionando su cabeza en mi pecho. La abrazo y parece ser que no le molesta así que me quedo tranquilo, una oleada de su loción frutal invade mis fosas nasales, no puedo creer que esta pequeña me tenga así, comportandome como un adolescente enamorado.
Siento su brazo rodear mi abdomen y una sensación recorre mi piel, acaricio su cabello enredando mis dedos en el. Jamás imaginé estar de esta manera, y mucho menos con ella, su presencia me da una tranquilidad tan placentera, y por más que intento no recuerdo haberme sentido así antes con nadie.
Simplemente deseaba no despegarme nunca de ella, aunque eso pareciera algo demente de mi parte, extrañaba sus labios y esos besos tan perfectos que probé justo esta mañana. Sonrío al recordar el primer día que la vi, bailando tan espectacular en esa presentación que patrociné, desde ese momento me dejó impresionado, pero sabía que no volvería a verla así que le dedique una sonrisa y me fui. Para mi sorpresa, ella terminó siendo la recomendación de Celina, ¡Nunca lo hubiera pensado! Me quedé impresionado cuando la vi parada justo enfrente de mi escritorio, era ella, vestida completamente diferente a como la recordaba.
Pasaron los días y el tenerla cerca, cada vez más, me hacía sentir una atracción que superaba mis límites. No lo entendía, siempre me encontraba de mal humor por culpa de Scarlett, pero con su simple presencia me alejaba de todos mis problemas. No podía dejar de observar sus carnosos labios rojos cada vez que se acercaba a consultarme algo, su aroma me penetraba muy profundamente, era una sensación muy placentera, pero intentaba esfumarla, pues sabía que eso desaparecería en cualquier momento.
El día de su cumpleaños me sorprendió una rubia ojos verdes, su rostro me parecía similar y recordé quién era cuando mencionó que era la mejor amiga de Annette, ¡claro!, era la otra rubia de la presentación. Me pidió ayuda para organizarle una comida sorpresa, pero no entendí bien, hasta que me explico que ese día era su cumpleaños, agradecí infinitamente saberlo y le ayudé a organizar todo, surgió en mi la necesidad de obsequiarle algo, pero no sabía cómo reaccionaría. Aún así, decidí pedir un arreglo de flores, esperando que fuera de su agrado.
Ese mismo día me porte como un imbécil, celando a su novia al ver a ese tipo abrazándola y mirándola de esa forma, sentía mi sangre hervir y no entendía porqué. Y lo peor de todo era que ella y yo no éramos nada, ni siquiera hubo un contacto más allá del laboral, y no podía actuar de la forma en que lo estaba haciendo. No entendía que me pasaba. Supuse que ese tipo era su pareja y me puse como un idiota, me largué de ahí mismo, pues no soportaba que él siguiera tan cerca de ella. No era posible que me pusiera celoso de la vida personal de mi asistente, eso era bastante estúpido de cualquier forma vista.
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El arte de amar
RomanceAnnette Collins es una chica que nace con el arte en su sangre, su mayor deseo siempre ha sido lograr ser una bailarina de ballet profesional y reconocida por el mundo, todo se complica cuando por azares del destino, se queda sola con su hermana men...