Capítulo 26

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Es mi segundo día de clase.

Entro al salón, y la maestra ya había empezado la clase hacían algunos minutos.

- Ya empezamos mal.
Me dice la maestra

Mientras yo trataba de llegar y a mi asiento, agachada y de puntillas, para ver si lograba que nadie notara mi tardanza.

《Serás transparente... o acaso eres familia de Casper》

-Conciencia, no empiezes!

No acostumbro a llegar tarde, pero hoy se me pasó un poco el tiempo hablando con Becky...
No podía esperar para contarle lo que me pasó ayer con Daniel y Kathia.
Y además que venía necesitando un buen consejo.

Becky es de esas amigas que:
- Todos Necesitamos Tener Una -
Es un tipo de conciencia.
Sus consejos siempre me resultan maravillosos, y gracias a ellos me he librado de muchas...

Me siento en mi pupitre, mientras la maestra me dice un par de cosas, y yo solo bajo la cabeza de la vergüenza, saco mi libreta, y empiezo a hacer la tarea del día sin mirar a nadie, y sin decir ninguna palabra.
Sólo le pido al cielo, que éstas horas pasen volando...
Necesito ver a Daniel.

Toca el timbre para ir almorzar, y voy al comedor como de costumbre.
Miro para todos lados, y no veo a Daniel por ninguna parte.

- Becky, ¿no has visto a Daniel hoy?
Le digo mientras nos hechan la comida en la bandeja!

-- No, no lo he visto!
Me contesta, mientras vira la cabeza casi casi como el exorcista para ver si lo ve... y nada.

- Habrá faltado!?

-- Talvez!
...cuando salgamos de aquí, damos una vuelta por todos los rincones de esta escuela, para conocerla, y de vez chequiamos si damos con él.

- Ok...

Comí rápido, y salimos a buscarlo.

Pueden imaginarse a nosotras caminando con una lupa en la mano, y de fondo, la musiquita de la "Pantera Rosa"

Fuimos a la biblioteca, a la glorieta, y hasta al baño de varones entramos... y nada.

- Solo hay un lugar que nos falta por buscar!

-- ¿Donde?

- La cancha!

-- No se me ocurrió antes, vamos!

Habían unos chicos jugando baloncesto, y entre ellos, estaba Daniel.
-Fin de nuestra búsqueda-

Nos sentamos en las gradas, mientras lo vemos jugar, y logro que Daniel me vea...
Se acaba el juego y Becky me dice:
-Ay viene!

El se acerca y dice:
- Hola Emy, no te saludo porque estoy suda'o...

-- Te lo agradezco que no lo hagas- mientras arrugo mi nariz con cara de asco.

- Ah pero tampoco pongas esa cara! ...porque me dan ganas hasta de abrazarte.

--Ni te atrevas.
Le digo
-mientras suelto una carcajada-

-Amiga, te veo después, tengo que terminar algo en la biblioteca- Me dice Becky mientras me guiña un ojo.

- Ok
Y me despido de ella de la misma manera, devolviendole el ojo guiñao que me tiró.

--Ok al fin solos, necesito hablar contigo -le digo a Daniel-
y le cuento todo lo que había pasado, sin omitirle nada.

El se quedó con su boca abierta y sin saber que decirme por varios segundos... hasta que rompe el silencio con:

-Emy, te voy a ser sincero, tu me encantas, y por eso no te voy a mentir... Yo no soy un ángel como crees, soy un chico "malo" si así se me puede llamar...

-- Yo te acepto tal y como eres... -le dije-
sin dejar que terminará de hablar.

Ahí el busca en el bolsillo de su bulto, unos audífonos, y los conecta a su celular, y me dice:
Escucha ésta canción,
ahí te digo todo lo que no te he dicho con palabras...

🎶 Aléjate de mi amor
Yo sé que aún estás a tiempo, No soy quien en verdad parezco,
y perdón, no soy quien crees,
Yo no caí del cielo...
Si aún no me lo crees amor,
y quieres tú correr el riesgo,
verás que soy realmente bueno en engañar, y hacer sufrir, a quien más quiero 🎶

Me dió mucho sentimiento oir eso... al punto de querer soltar un par de lágrimas, pero no podía hacerlo, al menos allí no.

Después de varios segundos, donde lo único que se escuchaba era la bola en la cancha, y el chillido de los tenis...
Le dije:
No me importa que seas malo, te quiero así y punto.
Y le doy un beso en su frente, y salgo de allí lo más rapido que puedo.
El sonríe, y me grita:
-Yo también te quiero... Nos vemos a la salida!

----Rriiinnnnnggggg----

justo suena el timbre para entrar a los salones.

No me pregunten que hablaron en el restante de las clases, porque solo podía pensar en Daniel, y en todo esto que me estaba pasando con este chico malo.

Aunque realmente no creo que sea tan malo como dice... al menos eso espero.

ERES TODO LO QUE PEDÍ Donde viven las historias. Descúbrelo ahora