Capítulo 49

104 10 4
                                    

Me levanto y son las 4am
parece que me acostumbré a despertarme en la madrugada, por culpa de las enfermeras.

Me acuesto otro rato más, y cuando abro los ojos nuevamente, y miro el reloj de mi celular, ya es hora de levantarme.

Llamo a Mamá, y no contesta.
Me arrastro en la cama como un gusano, hasta que poco a poco me pongo de pies sin ayuda de nadie.

-Todavía me falta, pero estoy bastante bien para como estaba-

Llega la tarde, y todos nos preparamos para ir a la iglesia.

Llegamos a la iglesia temprano y ya había una fila de herman@s esperándome para saludarme, preguntarme por mi recuperación, y para decirme lo mucho que estuvieron orando por mí. 

Mamá me dice:
- ¿Quieres cojer una parte para que des las gracias a todos por las oraciones,
y expreses algo de tu proceso?

- si, quiero hablar, aprovechar que hay muchos jóvenes presentes.

Empieza el servicio, y después de la oración, y de los cánticos, me llaman a subir al altar para que testifique.

Mientras voy caminando, me tiembla hasta el pelo, pero me armo de valor, respiro profundo, y tomo el micrófono.

-Primero quiero darles las gracias a Dios por haberme guardado... y por no soltarme ni un segundo en medio de mi proceso.
Quiero también darle las gracias a todos los que estuvieron orando por mí, ya ven que estoy de pie, y eso se lo debo a esas oraciones.

No quiero irme sin decirle a la juventud que se encuentra hoy aquí, que sigan buscando de Dios, que estar lejos de Él no deja nada bueno.
Hagan caso a los consejos de sus padres y familiares, que aunque no los vean con buenos ojos, son por su bien.
Tome malas desiciones y miren donde terminé,  pero le servimos a un Dios de nuevas oportunidades y aquí estoy.

Eso es todo lo que quería expresar...
Mil gracias a Todos!

[Aplausos]

Siguió el servicio, y yo estaba sentada alado de mi amiga Becky como antes.
Estaba muy feliz, y se me notaba...
Cantaba más duro que todos, levantaba mis dos manos en agradecimiento, etc...

Veía que Mamá le hacía señas a Becky, y que ésta se paraba, y salía afuera.

- Que pasa Becky?
Porque sales tanto, esta todo bien?

- si amiga, es que estoy esperando a alguien que invité, y como no se atreve entrar sólo, estoy pendiente...

Le creí, y seguí gosandome el servicio.

De momento se apagan las luces, y pienso en que es un drama que van a hacer...
Y cuando se prenden las luces del altar, justo ahí aparece Bruno con una guitarra.

Que pasó aquí
-Me pregunto-

Empieza a cantarme una canción que compuso para mí, declarandome su amor, y ésta  hablaba de, como Dios nos había puesto en el camino para que cumplieramos juntos un propósito.
Estaba tan emocionada que no pude evitar las lágrimas.

Temblaba de lo nerviosa quw estaba, pero ahí estaba Becky apretandome la mano en señal de apoyo.

Cuando Bruno termina, me llama a que pase alfrente, y cuando me acerco, saca una cajita negra de su bolsillo, y pone una rodilla en el piso.

Todos aplauden, y yo me tapo la cara al empezar a llorar.
No podia aguantar tantas emociones juntas.

¿Quieres ser mi novia?

Y yo no lo pense dos veces y conteste

-Siii... Claro que quiero!

Lo abracé fuerte, y todavía no me podía creer lo que me acababa de pasar.

Todos fueron cómplices... hasta Lucas lo sabía, y nadie me había dicho nada.

Nos tiramos fotos al terminar el servicio, y nos fuimos todos a comer.

En la mesa estábamos todos, y antes de que llegara la comida, Lucas dice:

- Quiero decir unas palabras...

Ya viene este con uno de sus chistes -Pensé-

- Quiero dar gracias porque mi hermanita esta feliz, y está recuperada del accidente, y ha vuelto a ser la Emy de siempre, esa que tanto extrañaba... Te quiero hermanita!

Awww gracias hermano por tus palabras!
Yo también te quiero... pero lejos de mí... Es broma!

[risas] 

-Dejenme terminar!
Dice Lucas

- Oh, hay más?

-Sí, pero esta vez me dirijo a Becky!

- Llevamos hablando un tiempo, y te conozco desde hace mucho, y sabes que estoy enamorado de tí, aunque nunca te lo haya dicho...
y ahí te va la pregunta a ti también. 
Sé saca una flor, y dentro de ésta, hay una sortija.

¿Quieres ser mi novia?

Todos nos quedamos sorprendidos. Miramos a Becky y si yo me puse roja, ella se puso violeta!

Se tardó en contestar... pensamos que diría que no, pero sólo se hacía de esperar.

Dijo que sí y nos sorprendió espetandole un beso en los labios a Lucas.

Al parecer lo tenía bien guardado para una ocasión así, y no dudo ni un segundo en hacer su demostración de amor, allí delante de todos.

Que feliz estaba... Era un día memorable.





ERES TODO LO QUE PEDÍ Donde viven las historias. Descúbrelo ahora