¡Tú reflejo...nuestro reflejo! [Yaoi/gay] [Temporada1 Y 2]

Capítulo 44.

Narra Vaiolet.

Una vez qué Esteban se fue, no tome mucho tiempo y me dirijo hacia la biblioteca del castillo. Una enorme sala llena de libros, pues en esa enorme sala, solía ser la biblioteca de un colegio, ya ahí, me aproximó a las historias de terror y misterio, esa que trata de vampiros, tomo uno de ellos y abro el libro, mirando las páginas y lo que contiene, busco algo respecto a algún veneno o algo así. Cuando de repente siento un aire frío, no...no puede ser Esteban, tampoco puede ser Mika, ni Waith, ese hombre pelirrojo que pertenece a los twily, no...es.

—Dyan, que gusto verte. ¿Qué buscas? — Sigo sin apartar la mirada de libro, lo qué sea que me diga no me interesa, son sólo pláticas incoherentes respecto a Esteban.

—¿Qué hablaste con Esteban? — Pregunta acercándose a mí. Cierro el libro furiosa, ¿no entiende que no tengo tiempo?

—Eso no es de tu incumbencia, es información clasificada que solo Esteban y yo sabemos, que seas parte de los Twily no te hace alguien importante, Dyan.

—Claro que sí, yo controló a los demonios. De hecho puedo poseerte. — Me sonríe de medio lado, suelto una risa burlona ya que lo que dice es totalmente imposible.

—Estas equivocada, aunque lo trates no podrías, soy más fuerte que tú en muchos sentidos. En éste momento sé lo que estas planeando, ¿Planeas matarme a mí? Hay querida, — Tomo otro libro de un estante más alto. —Si tanto quieres a Esteban, te lo doy, no lo necesito.

—¡Esto no es nada respecto a Esteban!

—¿Entonces porque estas tan celosa? — La miro de frente, su actitud me está incomodando, me éste haciendo enfurecer.

—Por qué, es injusto que te hayan cedido un puesto tan alto como el que tienes ahora.

—Eso yo no lo elegí. Fue mi gran...— Paso aún lado de ella regalándole una mirada coqueta, una mirada de liderazgo que no mostraba hace mucho. —"Poder" ¿podría decirse?

—Tú éstas con los humanos, ¡Tú eras una humana! — Un tic en su ojos derecho se presenta, coloco una mano en mi cintura y la miro de pies a cabeza.

—Tal vez sea cierto, si...fui una humana, una humana con la capacidad de matarte si así lo hubiera deseado, ¿Pero qué crees? Esteban me eligió, así que te friegas. — Salgo carcajeándome del lugar, eso fue divertido pero aunque así fuera no tengo nada respecto al caso de Mika. No puedo irme y buscar a Kaname eso daría alarma a Esteban y le haría daño a kaiyuu o a mí rubio, ¿entonces qué hago?

De repente la alarma de alerta suena, ¿visitantes? ¿van a atacarnos? Dyan sale de la biblioteca posicionándose a mí lado.

—¿Qué está pasando? — pregunta. ¡¿Como cree que voy a saberlo si apenas me entero?!

—¡Llama a Esteban! — Le ordeno, ella asiente y se va. Por la ventana logro visualizar al ejercito de Jules. ¿Jules? Y viene con Marin, pero otra cosa llama mi atención, desde los prados que están a mí izquierda se ve el ejército de Kaname avecinarse, junto con esa niña llama Yuki, neithan, Dylan, y Felin

—¡Diablos! ¿qué hacen? ¡¿Dónde está Mika?! — Me preguntó. Antes de que pueda salir a buscarlo una mano jala de mí, al mirar es Esteban quién me sonríe ampliamente.

—Necesito que te pruebes algo. — No dice nada más y jala de mi hasta llevarme con él.

Narra Yuki.

Cada vez más nos acercamos hasta el castillo de Esteban, Kaname da la señal de ir corriendo hasta allá, hacemos caso a esto, yo por otra parte, sacó mi gran arma y me preparó para lo qué sea que venga, tal vez me encuentre con Marin qué, por lo que escuche ella regreso con Jules. Al estar ya ahí, repentina mi sorpresa al ver a Jules y a Marin juntos, como los líderes de ese grupo, mientras que el ejército está tras de ellos tratando de atacarnos si es necesario.

—¿Jules, Marin? — Doy pasos al frente. Yuno, neithan, y Dylan también lo hacen a la par. Quedando frente a frente de ellos. —¿Por qué hacen esto?

—Está solo es una venganza de lo que Esteban a hecho, y eso debe pagarlo con la muerte, ¿no te basta todo lo qué hemos soportado, Yuki? — Los ojos de la rubia ya no tiene ese lindo brillo que solían tener, tiene sed de venganza. Miro a Jules tratando de que haga entrar en razón a Marin pero al igual que ella, él está complemente perdido.

—Si pero...sabes que eso no funcionará, no de está manera, hablemos ¿si? — La tomó de la mano. —Deja esto, ven con nosotros, Jules, ¡basta! No puedes llevar tu venganza a éste punto, acabaremos con Esteban pero no de esta manera, entren en razón por el bien de todos. ¿quieren ver más gente morir?

—Si es para satisfacer mi sed de venganza. No me me importa quién muera. —Jules suelta el primer golpe, haciendo me volar hasta caer al suelo a poco centímetros de ellos.

—¡Yuki! —Grita Kaname, pero le doy una señal para qué no venga a por mí. Estoy bien.

—Y para evitar qué causen más problemas, —Marin entra entre la multitud de gente tras de ellos, y trae un cuerpo qué esta atado con cinta en la boca.

—¡Kaiyuu!—Grito y aprieto los puños incorporando me de nuevo de lo enojada qué estoy. —¡Déjalo, ya!

—No te preocupes, — Lo suelta dándole una patada en el cuello, dando una vuelta y haciéndolo caer para después, colocar su pie entre el cuello de kaiyuu. Se sienta sobre el sacando una Jeringa con una sustancia extraña dentro de ella, la abre y le apunta en un ojo, como intimidándolo.

—¡Déjalo, ya! —Kaname aparece tras de mí y saca su arma, una enorme espada.

—¿Y si no hago? ¿Qué? ¿Me vas a matar? — La rubia es callada por algo qué la hace tropezar alejándose de kaiyuu. Visualizo al vampiro rubio que esta ahí.

—¡Mika! — Toma a kaiyuu entre sus manos y lo aleja de ellos, llevándolo hasta dentro del castillo.

—¡Maldito! — Grita Marin y trata de ir tras de ellos, pero eso voy a impedirlo yo. Con mi arma la detengo de golpe.

—¿A dónde vas? — Doy unas cuantas vueltas con ella, y lanzo los demonios que está posee, eso es gracias a Kaname.

—Ah, quieres jugar, entonces. —Al igual que yo, saca su arma. —Juguemos.

Y así inicio una pelea con ella al igual que Kaname contra Jules. Y todo el ejército de Jules y el de Kaname comienzan a pelear, ¡Humanos contra humano!

¡¿Qué demonios?!