Problema en pañales

XXXIX

Sook había ido de compras con su querido tío Dae a una nueva tienda temática de dinosaurios en el centro, al pequeño le encantaban esas figuritas miniatura, sentía que si podía dominar a esos mini dinosaurios, podría con el mundo entero.

Además haría que su amado tío Dae gastara todo el sueldo del mes en un traje de dinosaurio que había visto por internet, quería asustar a la gente como lo hacían en los vídeos que había visto en el móvil de su padre.

—Yeol, ¿me puedes pasar la sal? Está muy alta, ¿por qué la dejas tan arriba? —incluso de puntitas, el pequeño Baekhyun, que a penas alcanzaba el metro setenta, no pudo conseguir el salero con forma de gato tres repisas por sobre su cabeza.

—Perdóname, amor, es para que Sook no mate caracoles en el jardín —Chanyeol rodeó la cintura de su novio con sus grandes brazos después de entregarle la sal. Baekhyun disfrutaba de los pequeños besos sobre su cuello mientras cocinaba para los dos.

—¿Por qué no puedo ser alto como tú? Todo en esta casa es gigante para mí, no quiero pedirte las cosas siempre que las necesite.

—Remodelaré todo en un chasquido de dedos si tu quieres que lo haga, puedo comprar una nueva casa, lo que sea para hacerte feliz.

—¿Qué tal un beso? —mencionó el menor, dando la vuelta y rodeando el cuello de su amado para atraerlo más, lo suficiente para que sus narices se tocaran, pero no tanto como para que sus labios se rozaran.

—Lo que tu pidas, bebé.

El beso duró pocos segundos, ya que Baekhyun tuvo que volver a sus labores de cocinero.

—¿Quieres ir a ver a los gemelos este fin de semana? —preguntó llevando una gran cucharada de arroz y carne a su boca.

—Sook se pondrá muy feliz y también podemos pasar un rato con los niños, nos vendrá bien a todos —Chanyeol cogió con los palillos algo de kimchi y lo tragó con mucho gusto observando con una sonrisa viendo como su novio comía como si no hubiera un mañana—. Bebé, el arroz saldrá por tu nariz si sigues comiendo de esa manera.

Le regaló una sonrisa cálida al ver las mejillas rojas por la vergüenza, bajó los palillos a la mesa y limpió con su pulgar los labios de su novio antes de darle un trago a su vaso de agua.

—Es solo que extrañaba la comida hecha en casa, últimamente lo único que hacemos es llamar a restaurantes o comer algo fuera —Baekhyun hizo un puchero y recibió unas cuantas caricias por lo adorable que lucía.

—No te preocupes amor, ahora que viene el verano podemos pedir unas vacaciones y disfrutar un rato los dos —Chanyeol levantó ambas cejas sugiriendo lo obvio con una sonrisa coqueta sobre esos labios manchados de kimchi—. Además, mi jefe es un amor, de seguro lo aprueba.

—Dios... ¡yo soy tu jefe! No me subestimes porque te quedarás sin vacaciones.

—Pero, amor...

—Nada de nada, ahora termina tu comida, lava los trastes y después llévame a la cama para acostarnos un rato y nada de toqueteos sucios, Park Chanyeol.

—De acuerdo, amorcito, como tú lo desees.

Chanyeol hizo cada una de las cosas que su amado novio le pidió que hiciera. Por el momento ambos se encontraban sobre la cama matrimonial mirándose a los ojos mientras compartían unas cuantas caricias por sobre la ropa.

—Yeol... ¿recuerdas cuando me pediste ser tu novio?

—Ni me lo digas, tú seguías reclamando por los calcetines y Jongin llegó después arruinando el ambiente romántico que había generado para nuestra primera vez juntos. Dios, estaba tan enojado que por poco se la corto.

Baekhyun soltó una adorable carcajada—. Todo pasa por algo, ¿no? Al final seguimos juntos después del sabotaje por parte de Jongin —Baekhyun sonrió al recordar lo felices que se veían ambos ese día—. Estoy orgulloso de que los meses pasaran y ellos hayan tenido dos niños hermosos y saludables, y que nosotros estemos a punto de cumplir un aniversario de noviazgo.

—Eres un amor —Chanyeol besó la frente de su novio, acariciando la cintura del menor con sumo cuidado, Baekhyun era una preciada obra de arte que no debía arruinarse de ninguna manera.

—Son mis maneras de conquistarte —murmuró él levandando los hombros y sonriendo de manera chistosa—, soy muy encantador.

—Encantador, inteligente, hermoso, perfecto, todo lo bueno eres tú, bebé.

—No te llego ni a los talones, Yeol —sonrió Baekhyun tocando la nariz del mayor—. Eres esforzado, dedicado, valiente, una persona amable, alguien que acepta a todos sin importar qué. Tú sí que eres perfecto, Yeol, y espero que nuestro bebé tenga tu personalidad brillante que la mía.

—¿Nuestro bebé? ¿quieres que tengamos un bebé? Puedo desnudarme justo ahora si lo pides, Baek, puedo hacerte un bebé con todo el amor que tenga, besarte, acariciarte, hacerte sentir lo que quieras menos dolor, no me va eso del sadomasoquismo. Tú solo dime y te haré ver las estrellas.

—Creo que ya me arrepentí —rio y besó los labios de su enamorado al ver el puchero en estos.

—Ya sabes donde vivo, por si se te ocurre tener un bebé nuevamente, estoy dispuesto a contribuir en su creación —Chanyeol levantó las cejas tratando de ser seductor, aunque no resultaba mucho que digamos. Baekhyun solo soltó una risita y le dio un beso corto, para luego detenerse en su mirada por unos minutos más, siempre le había gustado detenerse a mirar a Chanyeol.

—No necesitas hacerlo, Yeol —le sonrió una vez más, dichoso como nunca, mientras que el mayor le acariciaba las mejillas y suspiraba a ratos pensando en lo bello que es su novio—. Estoy embarazado.

—¡No mientas! No juegues con mi pobre corazoncito, sabes que soy muy débil y si esto es una mentira no podré perdonártelo, estoy realmente decidido a tener un hijo contigo, Baek, te juro que si estás mintiendo yo... —Chanyeol estaba llorando a mares, pero ni siquiera se había dado cuenta de eso hasta que Baekhyun le secó las lágrimas y dejó un beso en su barbilla.

—Estoy a punto de cumplir cuatro semanas, Yeol, el bebé va muy en serio.

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Apuesto a que la mitad de las personas no se esperaban esto y la otra mitad se lo esperaba😂

Esta es una de mis partes favoritas de esta historia, nos leemos pronto.

Bai bai