Sálvame [Tom Holland y tú]

Capítulo 71

-¡Mira! ¡mirala! Esta comiendo mientras duerme- escuche alguien susurrar emocionado seguido de varias risas- no jodas ya lleva tres galletas y no despierta-.

Abrí los ojos lentamente, un sabor a vainilla inundo mi paladar, mastique la galleta para estirarme y ver mi alrededor, seguía recostada en el hombro de Tom que me miraba divertido con una sonrisa mañanera, a mi lado  Thomas estaba sentado de rodillas sobre la cama con una bolsa de galletas de vainilla con chocolate entre la mano sana, James que estaba al pie de la cama soltaba grandes carcajadas, su músculoso cuerpo se movía bajo su escandalosa risa.

-¡Se los dije!- dijo Fere en el suelo riendo con fuerza con sus manos sobre la cara, podría decir que hasta estaba llorando-.
-¿Qué han hecho?- estire mis músculos, me recargue  con los codos sobre la cama sin lastimar a Tom, sentía la boca seca, sentía migajas de galletas en la comisura de mis labios-.
-Fere nos dijo que  comias dormida- intento decir James entre carcajadas- no le creímos-.
-Así que te dimos una galleta- dijo Thomas partiendo una galleta a la mitad y metiendosela a la boca-.
-Te la pusimos entre los labios, abriste  la boca y la agarraste con la mano, tu sola te la comiste, pensamos que estabas despierta- James tomó un poco de aire, limpiandose unas cuantas lágrimas que empezaban a nacer en sus ojos-pero después de comerla te volvías a acurrucar y sabiamos que estabas domida-.
-No inventes, había olvidado lo genial que era- dijo Fere arrodillada con la cara completamente roja de tanto reír, el timbre sono y ella intentó pararse pero solo consiguió otro ataque de risa quedando con la cabeza en el pie de la cama, su cabello lacio cayó hacía enfrente sobre la colcha tapandole la cara-.
-Yo voy- dijo James sujetandose el abdomen, conteniendose hasta salir de la habitación, después alargo una carcajada-.
-Si serán malos- la bolsa de sangre estaba casi vacía, tenía que cambiarla, me levante con cuidado, Tom había cerrado los ojos colocando su mano en su frente , aún respiraba con dificultad, podía notar como de vez en cuando se aferraba a las sabanas a causa de los espasmos adoloridos que recibía-.
-Hola ¿Como sigue?- Harrison había entrado, se había dado un baño y llevaba consigo una maleta pequeña, la cual dejo en la entrada de la habitación- gracias- dijo cuando James entró  detrás suyo con el tuvo metálico del cual se colgarian lasbolsa de sangre y medicina de Tom, también  llevaba consigo sus muletas-.
- Esta bien...entero- ya le había cambiado la transfusión, abrí el paso y la sangre continuó bajando hasta su brazo-.
-¿Qué  paso con Samantha?- preguntó Tom mientras intentaba sentarse sobre la cama, sin mucho exito-.
-Espera, con cuidado- sentía la tensión palpable en el ambiente, amotine algunas almohadas sobre su espalda, Harrison dio vistazos a Thomas y a mi, obviamente sea lo que fuera que nos tenía que decir el niño no podía escucharlo-.
-Y-yo recuerdo una Samantha- dijo el niño lamiendo el glaceado de su galleta, su comentario hizo total silencio en la habitación, me congele en mi sitio esperando que continuará- es pelirroja y tiene una motocicleta, aveces es buena...otras es mala...- dijo más como si estuviera adivinado ¿Como era posible que solo la recordará a ella? mire a todos en la  habitación en busca de respuesta, sin embargo sus caras solo mostraban admiración y sorpresa- ¿Dónde esta ella?-.
-Thomas es hora de darte un baño- dijo Fere evadiendo la última pregunta del niño al notar mi cara palida y como me apoye del tubo metalico de Tom-.
-Pero nisiquiera se quien eres-dijo cuando Fere lo cargó  y lo llevo fuera de la habitación-.
-Calla niño, es por tu bien y por el de nuestra nariz- nos dedico una mirada sería antes de cerrar la puerta-.
-¿Cómo esque la recuerda a ella?- me había recargado sobre la mesita de noche intentando entenderlo, no encontraba ni una gota de lógica, no recordaba ni a su madre ni a sus abuelos, mucho menos a mi, pero a Samantha sí-.
-No lo sé, estoy tan sorprendido como tú, llamaré  al doctor- Harrison saco su celular del bolsillo de su pantalón  negro -.
-¿Qué paso con Samantha?- repitió Tom, Harrison jugó con su teléfono  rodandolo sobre sus dedos, miro al techo tomando aire, intentando darse aliento  el mismo, se sentó en la cama, lamiendo sus labios antes de hablar-.
-Bueno...ella...-esto no estaba bien, esto no estaba nada bien, el tono de su voz me sacaba de mi cuerpo ante el mundo de posibilidades que sus labios aún no desvelavan-.

¿Mundo de posibilidades? No realmente, solo habían dos. Estaba a viva o estaba muerta, no había nada más.

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Capítulo decicado a LHolland18

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