Sálvame [Tom Holland y tú]

Capítulo 95

¿Qué debía pensar? ¿Qué debía creer? más aún ¿Qué debía hacer?

Había recibido mucho mas información de la que podía digerir, Fere tenía razón al haber intentado ocultarlo, era irreal creer que alguien tan capaz de hacer tanto daño, de destruir ciudades enteras era la misma persona que te acunaba en sus brazos y repartía besos sobre tu frente.

-___- me llamo James, sacándome de mis pensamientos, enfrente mío el doctor guardaba su estetoscopio en el maletín sin quitar su vista de mi cuerpo-¿Estás poniendo atención?-.

-Sí- la verdad no había escuchado ni una palabra de lo que habían dicho, confiaba en que Fere que me miraba preocupada al otro lado de la habitación me lo dijera despúes- dos en la mañana y tres en la noche...- me vi obligada agregar ante la ceja enarcada de James, que se amplió aún más-.

-No te reseto nada, __- ¡Mierda! - solo te ha dicho que sí de verdad quieres mejorar debes seguir con los medicamentos y cuidarte- James me recriminó una vez más, molesto ante mi falta de interés por mi salud, después de todo mantenerme viva, mantener vivo el juguete favorito de Holland era su trabajo-.

-Es bueno saberlo- respondí a secas cuando al fin el doctor de grandes mejillas levantó su maletín, nuevamente vestía ropas de franela y zapatos cómodos, probablemente ya estaba arropado en su cama cuando lo llamaron y se vio obligado a salir-¿Usted siempre está disponible para venir en cuanto lo llamen cada vez que alguien se pinche un dedo?- solté antes de darme cuenta de la insolencia en mi pregunta-.

-____...- me llamo James entre dientes molesto, dándome una mirada matadora, la pregunta estaba hecha y el pálido galeno pensaba con cuidado su respuesta-Disculpe...la medicina la tiene afectada-.

-No no...esta bien- respondió con suavidad, antes de relamerse los labios a la par que se acomodaba los anteojos- sí, desde hace varios años...servir a la casa Holland es mi prioridad-.

Bien ahora, ______, callate.

-¿Porqué? ¿No le da miedo? ¿No prefiere trabajar en un hospital...algo estable?- ¿alguna vez la voz de la razón en mi cabeza y mi lengua se coordinarán para no joderme la existencia?-.

-Claro que tengo miedo, se me eriza la piel cada vez que cruzo la puerta principal...una mala jugada y eso será todo...- respondió con una extraordinaria sinceridad, sentándose en el borde de la cama, pellizcando con suavidad los botones de su chaqueta-sin embargo la paga es increible- soltó una risa antes de negar con la cabeza-.

-¿Todo se trata de dinero? ¿Todos venderían su alma por unos cuantos millones?- James y Fere más allá de estar molestos me miraban con una expresión entre el asombro y la decepción-.

-No, no hay que confundir, bien tengo entendido tras tantos años de servicio que nunca hay que confundir las verdaderas razones que tiene un mafioso- el hombre viejo y sabio dejó el maletín en el suelo, acomodando su saco- no hay que confundir el poder con el dinero, si bien viene en el paquete no por lo que aspiran-.

-¿Entonces qué?- ¿acaso este señor....tuvo relación con Dominic...es otro sospechoso?-.

-Ellos aspiran el honor, el respeto, después de ello viene el poder y el dinero, tienen el mundo a sus pies, todo el mundo les tiene miedo- ¿quien sospecharia del doctor de la casa? él podría pasar desapercibido-.

-Yo no les tengo miedo- repuse sin titubear, realmente a pesar de que Fere me lo advirtió antes de llegar...jamás le tuve miedo a Tom, era como si pudiera ver a través de él, ver a través de su faceta ruda y fría-.

-Lo sé, puedo verlo...si me permiten- dijo con tonalidad dudosa, dándole una mirada a James y a Fere, esperando su consentimiento a la vez que tomaba su maletín del suelo, colocándose de pié para huir al instante- me parece que él es el que te tiene miedo a ti- dijo con seriedad, antes de mirar a James- Buenas noches, cualquier cosa, llamenme-.