Continuaba cuidando de Tom, no parecía mejorar en absoluto, al contrario estaba delirando más, de ves en cuando articulaba cosas intangibles y nombres "Padds", "Harry" , "Sam" y "Mamá " entre sueños agitandose aún más, perdida en mis pensamientos y aun sosteniendo su mano recuesto la cabeza sobre la orilla de la cama, entonces lo escucho murmurar el nombre de una persona que si le puedo traer.
-___...- dijo haciendo volcar mi corazón-.
-Aquí estoy, tranquilo- acaricie su rostro, vi como tragaba saliva con dificultad apretando sus ojos, se movio intranquilo otra vez- aquí estoy...tranquilo-.
Así fue el resto de la noche, ya estaba amaneciendo, me levanté para cambiar su suero nuevamente, cuando tocaron la puerta.
-Pase- dije quitando la bolsa de suero vacía y colgando la otra-.
-Buenos días señorita- una chica con ropa de servicio entro por la puerta con una bandeja que llevaba un plato de fruta, jugo de naranja y un sándwich- le traigo su desayuno, el doctor esta por llegar, cualquier cosa estamos a sus ordenes dijo colocando la bandeja en una pequeña mesita de vidrio y salió-.
Camine hasta la mesita de vidrio, estirando mis piernas y brazos, me sentía cansada, pero más aún preocupada, no tenía mucha hambre así que solo tome el sándwich y me dirigí otra vez a la cama de Tom, esta vez sentandome un poco abajo de sus pies, me recoste mientras le daba mordidas a mi sándwich de atún, sin darme cuenta me quedé dormida-.
-___, arriba- Harrison me movió ligeramente haciendo que despertará, por instinto mire a Tom, seguía igual...- el doctor tiene que revisar a Tom- me ayudo a pararme-.
El doctor le quito la sábana de encima a Tom y le descubrió el abdomen y el pectoral, tenía varios moretones como los de Harrison, le colocó un estetoscopio escuchando como iba su corazón, después tomo sus signos vitales y le inyectó algo en la pierna herida.
-¿Cómo pasó la noche?- pregunto el doctor apuntando algo en su libreta-.
-Estuvo muy inquieto, murmuraba cosas y su respiración era estaba muy agitada- dije vi como este descolgaba la bolsa casi vacía de sangre y colocaba una nueva-.
-Le dejaré más antibioticos y aumentare la dosis de medicina para la fiebre, su pierna aun esta roja, si se llega a poner morada llamenme de inmediato-.
-Sí, lo haremos- dijo Harrison
-¿Cuándo despertará? - pregunté -.
-Debería despertar mañana o pasado, ciertamente la medicina que le estoy dando no es muy fácil de sobrellevar, tendrá que alimentarse bien, nada de grasas o carbohidratos, probablemente vomite la mitad de lo que come- guardo sus cosas en un maletín y lo vi acomodar la camisa de Tom y ponerle la sábana de vuelta- debo admitir que me sorprende su fuerza de voluntad por aferrarse a la vida- me dirigí a la cama de Tom y me sente de nuevo cerca de sus pies, seguía palido, sus labios se veían azules, pero la fiebre estaba bajando, su respiración se regulaba lentamente-.
-Esa y otra más deberían ser la últimas transfusiónes de sangre que necesite- vi la bolsa rojo oscuro colgando del tubo metálico y mire al doctor el cual le entrego a Hazza un papel- son indicaciones, cualquier cosa llámeme-.
-Así será, gracias por venir- dijo Hazza mirando el papel en sus manos para después mirar al doctor- Gracias- le dio un abrazo y el doctor salió por la puerta-.
Me recoste un poco más cerca de Tom sin lastimarlo, me quede viendolo fijamente, parecía un ángel caído, con sus perfectas facciones y el cabello ondulado y alborotado callendole sobre la frente, por más decir de su piel palida, no quería dejar de verlo pero estaba cansada, los ojos me pesaban y se me cerraban, me acerque más a Holland sintiendo su calor, Hazz se sentó en la silla en la que antes yo había estado, mirando la escena con ternura.
-Descansa un poco ___, yo cuidaré de ambos- dijo y caí dormida, allí agazapada al lado de Tom, sin querer despegarme nisiquiera un poco, como si tuviera miedo de que al mínimo descuido me lo robaran o se fuera-.
-Hey___, es hora de ir a cenar- James movió mi pierna despertandome, seguía acostada al lado de Tom, quien lucía igual, me levante con cuidado y toque su frente, la fiebre había bajado, aún tenía pero no era lo mismo, esperen, ¿James dijo cenar?-.
-¿Cena a las 11:00 am? - le pregunté mientras estiraba mis musculos-.
-Nope, son las 10:34 pm- dijo y me apresure a mirar el reloj de Tom 10:35PM , me había dormido, mejor dicho muerto todo el día-.
-¿Donde están todos? - me frote los ojos- .
-Afuera, Miguel y Rubén llegaron desde hace rato, pero les dije que estabas muerta, digo dormida y prefirieron no molestar, te esperan, ve-.
-No lo sé- mire a Tom indecisa, no me quería separar de él, no lo quería dejar-.
-Ve, cena, saluda a Rubén y a Miguel y ya después vuelves con Tom, mientras tanto yo cuidaré de él-.
-¿Seguro?- solo saludaria a Rubén y Miguel, tomaría mis medicinas y volvería inmediatamente-.
-Claro- dijo sentandose en la silla-.
-Gracias- le sonreí ligeramente y me dirigí abajo-.
Rubén y Miguel se encontraban peleando por un pedazo de pizza en la cocina como niños pequeños.
-Tio, damelo ¿Que te cuesta? Tu tienes lo mejor siempre- Miguel se quejó-.
-Que no, yo soy más grande que tú necesito alimentarme más o me puede dar anorexia- se defendió Rubén-.
-No te va a dar anorexia por un pedazo de pizza- Miguel estaba exasperado-.
-Ru...- dije en un susurró sintiendo las lagrimas en mis ojos, ellos desviaron su atención para mirarme-.
-Pequeña- dijo y corrí abrazarlo escondiendo mi cabeza en su pecho y llorando con fuerza-.
-Esta muy mal, Rubén, Tom esta muy mal- dije como pude y el acarició mi cabeza, necesitaba desahogarme y Rubén estaba dispuesto a aguantarme- ya no tiene fiebre pero aún no despierta, sigue inconsiente-dije entre lloros levantando mi cabeza de su pecho para verlo, se veía preocupado y triste de verme así-.
-shh, tranquila- me abrazo con fuerza- estará bien- besó mi cabeza -.
Miguel se llevó el pedazo de pizza.
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Sálvame [Tom Holland y tú]
Fanfic____ West una chica que va por la vida sin suerte, sin amor, cargada de dolor pero con una pizca de libertad guardada en el zapato conoce a su delirio, peligro y martirio, uno de los mafiosos más peligrosos de Londres, Tom Holland. ¿El destino será...