Capítulo 25

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Salí de mi departamento siendo chocada por el frío viento de la noche, me detuve en la acera y acomode con mis manos mi vestido, mi cabello se mueve hacia atrás por donde el mismo viento lo dirige mientras espero a que Samantha se haga presente para recogerme, me escribió un mensaje avisando que fuera saliendo del residencial que está en una cuadra, pero llevo minutos y nada de aparecer, me siento impaciente, hace frío y se supone que debería estar aquí desde que abrí la puerta del residencial para salir, bufo mirando la hora en el reloj que me regaló ella de cumpleaños.

Por alguna razón me siento extraña, no sé si será por el ambiente que es de noche y no veo personas caminando por aquí. Miro hacia la derecha y veo su auto hacerse presente, le pongo mala cara a lo que ella hace cara de disculpas. Antes de que pudiera decir algo entré en el auto y me acomodo en el asiento del copiloto.

─Lo siento mucho─ se disculpa poniendo el auto en marcha.

─Tranquila─ le sonrío, enciendo la radio y encuentro música electrónica, en el camino nos vamos riendo y moviéndonos al ritmo de la música, tenía mucho que no salía con ella y realmente me hacía falta.

─ ¡Ay te gustó!─ dice alegre cuando se detiene en el semáforo que marcó color rojo, se refiere al reloj que en serio lo amé, es de color blanco con plateado y tiene un diseño sencillo de florecitas muy pequeñas que se podría decir que es casi un guillo pero claro no lo es.

─Me encantó, muchas gracias─ le beso la mejilla y ella alegre pone el auto en marcha de nuevo.

─Me alegro que te guste.

Llegamos al lugar que por cierto se llama "Karaoke Night", fue complicado encontrar un lugar para estacionarnos pero corrimos suerte cuando un auto decidió irse y nosotras ocupamos su lugar, antes de salir nos dimos un retoque de maquillaje y le arreglé un poco sus hondas de cabello, me agradeció y salimos rápido. Es la primera vez que vengo a este sitio y por como se ve desde afuera me gusta.

─Es nuevo el negocio─ me aclara Sammie cuando entramos por un enorme pasillo de luces amarillas y la música se hace presente a nuestros oídos, el ambiente es en serio agradable, la música no es tan alta que provoca que los oídos te duelan o tengas que repetir las mismas palabras a una persona en el oído por cien veces, hay una pista de baile y hay muchas personas moviéndose al ritmo de la música, el DJ se alcanza a ver y pone una canción que Sammie y yo empezamos a bailar de camino a la barra a pedir nuestras bebidas. Le pedimos al barman un coñac y nos sentamos en las sillas mientras escuchamos como el presentador del lugar anima a las personas a que se atrevan a cantar.

─ ¡ANÍMENSE!...será como reírse con las palabras─ los presentes se ríen negando con la cabeza.-pues empezaré yo para que vean que no es nada aburrido.-todos empezamos aplaudir, dejé de hacerlo cuando el barman me ofreció mi bebida y a Sammie.

─No ha comenzado y presiento que me voy a reír mucho─ me dice Sammie riendo, tomo de mi bebida en cuanto empieza el tipo a cantar, en realidad nos mata de risas, no sé si lo hace a propósito para hacernos reír a todos, o si en realidad canta de esa manera, y yo que creía que era la que más feo cantaba, pero no es así.

Aparte que cantó nada aceptable para nuestros oídos, nos hizo reír mucho e incluso él mismo se divirtió de él mismo. Me quedé boca abierta cuando Sammie fue invitada a cantar cuando una luz desde arriba la reflejó, ella negó en risas con la cabeza y yo la saqué de la silla animando a que fuera a intentarlo, se puso roja como un tomate sintiendo las miradas de todos y él presentador e incluso el DJ que hace un sonido para que ella suba a lo que se podría decir escenario y cante la canción que quiera.

─ ¡Venga señorita!, canté muy bonito y apuesto que usted cantará mejor─ le dice y todos ríen.

─Mejor diga que voy a cantar feo para que me salga bonito─ dice ella riendo y él se ríe, la veo subir y me fulmina con la mirada y yo le lanzo un beso divertida, en la pantalla plasma queda a su lado, eligió la canción de Sebastián Yatra "No hay nadie más", empezó y su voz nos cautivó a todos, saqué mi celular y empecé a grabarla, mi mejor amiga se ve tan adorable cantando, tiene una voz preciosa, desde pequeña la escuchaba cantar, su padre siempre me dijo que ese talento lo sacó de su mamá, pero a Samantha el hecho de escucharlo decir eso le duele.

Amor DecididoDonde viven las historias. Descúbrelo ahora