Cuando llegamos a uno de los mejores risores del país cinco estrellas y en el cual hice una reservación con anticipación para pasarlo con Bruno por su cumpleaños. Suspiro encantada al darme cuenta que es mucho más hermoso de como se ve en revistas y en las redes sociales.
Una de las cosas que más me encataron es que la playa es preciosa y todo en el la verdad. Sin contar el hecho que el trayecto fueron muchas horas que mejor ni las pienso por que lo importante es que llegamos dos horas antes de que sean las 12 am.
Ahora que entramos a la suite que reserve veo a Bruno salir al barcon que ofrece y da vista a la playa. Todo está iluminado en el resort por lo que se pueden ver un poco las olas de la playa siendo llamativas y el cielo está muy estrellado.
Me acerco a el y lo abrazo por su espalda pasando mis brazos hasta llevar mis manos a su pecho y recostar mi mejilla sobre su espalda. Sus manos cubren las mías y lo escucho suspirar, el clima está frío, pero no tanto como para quejarse.
-No sabes lo guapo que te ves en este balcón, pero tu novia quiere que hagas algo-le digo sonriendo sin apartarme.
- ¿Cómo que otra cosa quiere la mujer más hermosa?- dice con voz ronca, apuesto que está sonriendo.
Está vez si me aparto y pongo mis manos en el borde del barcon mientras se que Bruno no deja de mirarme. Le apunto hasta donde se muestra una luz roja por la playa un poco apartada de donde pueda transitar los turistas a estas horas.
-Ves esa luz roja que se muestra hacia allá- le digo apuntando con mi dedo índice.
Lo veo mirar.
- ¿Qué es?- me pregunta cuando miro la hora en mi pequeño reloj de muñeca que me costó hace dos años una gran cantidad de dinero.
-Necesito que me esperes ahí- le informo al levantar la cabeza y darle mi mejor sonrisa.
Me levanta una de sus cejas haciendo que me sienta caliente por unas parte en particular.
-Keyli me vas a matar de la curiosida mujer, ten piedad- me dice y rio al acercarme y pasar mis brazos alrededor de su cuello.
Sus manos bajan a mi trasero y las aprieta todo travieso sin dejar de mirarme sonriendo. Se inclina y me besa haciendome sentir papilla, me quejo cuando se aparta.
- ¿Me vas a decir que hay en ese punto rojo?- me pregunta, niego con mi cabeza.
- ¡Eres demasiado impaciente Bruno!- le digo.-Te vas a enterar si ahora mismo vas y me esperas como todo un chico bueno- le digo al separarme.
-Que mandona- habla burlón, luego asiente- Está bien Ness, te voy a esperar- me guiña un ojo antes de robarme un beso y verlo salir casi como una bala.
Tengo que reírme porque no pensé que Bruno sería tan impaciente con algo que quiere saber.
Entonces este es el momento en el que me pongo en marcha a darme una ducha. Una vez termino mi ducha me peino mejor las hondas de mi cabello y luego de ponerme mi vestido playero que oculta todo lo que tengo guardado decido que debo salir de la suite antes que Bruno se desespere.
Desde el ascensor hasta la salida que da a la playa solo me he topado con turistas y no infantes, en unas de las cosas que me percate antes de reservar es que este hotel es para adultos especialmente. Siento la brisa mientras camino golpear mi cabello y haciendo que los vellos de mi cuerpo se ericen.
No tardo mucho en caminar y vislumbrar la luz roja que es un pequeño bombillo en una de las Palmas como lo pedí en el hotel que hicieran, porque quise que estuviera como punto de encuentro. Este lugar se encuentra un poco apartado del resort por lo que es solitario y no transcursa nadie.

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Amor Decidido
عاطفيةKeyli Ness: Fuerte de caracter, amorosa, fastidiosa, trabaja muy duro, grandiosa arquitecta y espontánea, su vida cambiara aun giro sorprendente cuando conoce al atractivo Bruno Collins. Bruno Collins: Decidido por lo que le intriga, atractivo, curi...