Capítulo 7 Que inicie todo.

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Galax fue cremada. Le hicieron un altar y fue puesta allí con un vestido blanco hermoso y se le prendió fuego justo cuando Eos empezaba a mostrar su rostro rojo y pequeño. Nunca antes se había visto un ejército de mujeres con trajes negros en pleno atardecer mientras el silencio daba sus últimas despedidas a la hija de una guerrera Darkina.

E iniciaré con el título de una canción, y si tienen donde reproducir pónganlo para que puedan imaginar lo serio que era la cólera de Neira.

"Wicked Ones" cantada por dorothy, y no, no es esa dorothy, que siempre hemos visto en televisión que llega por un tornado al mundo de Oz. No, es una banda americana que nos habla de los malos... y si quieren saber por qué malos. Bueno, tienen que ser testigos de lo que yo veo y presencio.

Los ojos de las Dark cambian de color cada vez que trabajaban para sacar aviones o barcos, estos se tornaban verdes. Evolucionaron de tal manera que podían ver en la oscuridad. Ya no sonreían, y entre tres mujeres podían sacar barcos de hasta 50000 toneladas, y ellas lo arrastraban como si solo fuera una bicicleta. Y siempre martillaban, soldaban, y desarmaban, martillaban, soldaban y desarmaban, todo esto en un ritmo muy acelerado.

El mundo se tornó áspero y duro. El fuego no les hacía daño, y la presión no era nada para ellas. El trabajo duro lo hacían como si estuviera codificado en su adn. La canción de Dorothy ambientaba con la letra lo que se hacía en esa caverna mientras, desarmaban, conectaban y destruían, despedazaban, cortaba y pegaban. Y sacaban las armas y las municiones y las inventariaban y separaban mientras, las probaban disparando a varios blancos. Entrenaban y trabajaban era una locura.

Desde ese momento no se descansa. Y todas las mañanas desde el día en que Neira declaró la guerra siempre daba un sermón desde la barra del Kirishima.

Esta vez fue Jeremías 1: 7

7 Pero el Señor me dijo:

«No digas que sólo eres un muchachito, porque harás todo lo que yo te mande hacer, y dirás todo lo que te ordene que digas. 8 No temas delante de nadie, porque yo estoy contigo y te pondré a salvo.»

— Hermanas Darkinas: No temeremos a la mano del mal, hoy todo lo que nos manden hacer será para el beneficio de nuestra raza. Ya no somos niñas asustadas, todo será diferente ahora. Estos es lo que tenemos que hacer. Ahora todos tomen sus puestos, porque esto solo acaba de comenzar.

Y las mujeres salían apuradas para hacer todo lo que dejaron de hacer, para terminar rápido. Mientras, el viejo me llevó a un lugar que él mismo preparó para mi entrenamiento y me explica lo que hará conmigo.

— Mira muchacho, tu cuerpo ha resistido duras pruebas, pruebas que ningún humano normal hubiera podido soportar. Así que presta mucha atención, ahora es el tiempo de que saques algún poder escondido.

(Y aquí es donde se inserta la canción)

Lo primero que me empezó a enseñar el viejo fue el volverme acostumbrar a los duros entrenamientos: Como flexión de pecho con una mano, abdominales inversos, endurecer cada musculo con golpes, saltar cuerda 1000 veces y repetirla en 30 series, golpear paredes hasta que me sangraran los nudillos y rompiera el bloque, aguantar la respiración a más de 10 metros de profundidad, levantar pesas en llamas, y aguantar el calor, correr y mantener la velocidad sin disminuirla, escalar paredes sin arneses ni ningún tipo de ayuda. Y lo más básico y no menos importante ensayar mi estilo de lucha, todos los días por 5 horas, variar y combinar. Tomaba mi medicamento y proseguía, hasta que dañaba los muñecos de madera cuando practicaba mi estilo wing chu, y era reparado cada vez que lo necesitaba. El viejo enviaba mujeres luchadores, a veces 2 o 3, he iba aumentado cada vez que me volvía más fuerte.

Al otro lado del lago.Donde viven las historias. Descúbrelo ahora