Al otro lado del lago.

Capítulo 25. La era de Victoria Black: El sufrimiento, causa de muerte.

Les relató todas las atrocidades que la familia Evans había realizado en las ciudades bajo su mando.

Nona se enfada al escuchar tal crueldad sobre lo que ese hombre había hecho. Tenía entendido el porqué del enojo y del decaimiento de esa muchacha. Sin embargo, Gisel no podía controlar su depresión y lloraba con más rabia.

Entonces Nona en su confusión y gran determinación le pregunta el por qué se había enamorado de un hombre que sabía tenia de padre como comendador de la ciudad, y responsable de la muerte de sus padres. Gisel le responde:

— Cuando llegué a esta ciudad, nadie nos juzgaba por ser de sangre manchada. Mi padre se posiciono rápidamente y montó su negocio poco a poco. Pero mucho antes de venir a este lugar, en una aldea cercana de ciudad Char, empezamos a tener problemas de emigración, los negocios de la familia iban decayendo al punto que quebramos. Mi hermana era la única amiga que tenía, y con quien más andaba, yo era una niña muy tímida y cobarde. Cuando los nobles y los niños nos molestaban era ella quien me defendía. Pero luego después de algunos ecos que el trato había cambiado, un hombre de casa noble me defendió de algunos comerciantes que empezaron a decir cosas malas de mi familia.

— ¿Era ese chico no es cierto? — Pregunta Nona.

— Si, fue la primera vez que alguien fuera de mi hermana me defendía. Yo no le di las gracias ni nada, ni tampoco le conté a mis padres sobre lo que me había pasado. Porque ellos estaban en otros asuntos más turbios.

— ¿Qué asuntos? — Dice una de las mujeres.

— Cuando llegó la noticia de que un Dark había llegado a este mundo. La noticia para los manchados de esas comarcas, era como un regalo caído de los cielos. En ese momento había muchos Maltuinos ocultos en la ciudad, y tenían su propia reunión secreta con los manchados para incitarles una revolución. Mis padres eran unos de esos entusiastas que esperaban noticias de esa revolución que la comunidad tenía planeado para ellos.

Nona la interrumpe y dice:

— No fue solamente en esta ciudad, los Maltuinos prácticamente tenía muchos seguidores en varias ciudades nobles. Nosotras también escuchamos sobre algo de recuperar Raimfarben de las garras de Elgor Blood. Muchos fueron los esclavos que salieron de esa ciudad de tormento, gracias a ese Dark Assas.

— Sí, ese chico fue una bendición para nosotros. Pueden decir muchas cosas de él, pero ha hecho más por nosotros los manchados que cualquier otro noble— Dice otra de las mujeres apoyando al Dark assa.

— Los nobles de cada ciudad dicen que él trae solo tormento y calamidades, pero muchos están agradecidos con él, donde quiera que esté elevamos nuestras oraciones a Eos.

Luego de eso, Gisel se centra y cuenta la historia.

— Mis padres, ocultaban Maltuinos que planeaban atacar la ciudad. Pero todo se fue al caño cuando se enteraron que los Maltuinos cancelaron el ataque. Así que envés de ser terroristas se volvieron espías para la comunidad. La ciudad andaba muy tensa por como el comendador manejaba la situación. Soldados buscaban en casa manchadas algún indicio de traición. Pero los revolucionarios taparon muy bien el hecho de que ocultaban enemigos de la patria.

Nona, recordó algo cuando Gisel contaba su historia y se lamentó en su interior lo que pasó. En parte también era culpa de los Maltuinos que no protegían a sus aliados de ser acusados de traición. Los intereses estaban por encima de los ciudadanos menos beneficiados, tanto de nobles como de Maltuinos. Quienes quedaban en la mitad de la guerra eran los mismos a quien intentaban proteger. Que ironía, las causas nobles siempre fueron un arma de doble filo para aquellos que intentaban favorecer. Aun cuando los Maltuinos ayudaban las casas manchadas de la discriminación racial, también ellos eran los que causaban que fueran maltratados y torturados.