Capítulo 15. La era de Victoria Black: El amor y otros malestares.

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Después de que se habían alejado del continente. Dangor y Equidna se adentra en la habitación para hablar.

Ella estaba un poco alterada al saber sobre la mujer Dark, que le hizo frente a su pequeño ejército de verdugos y capataces.

— ¡No puede ser!— Grita Equidna, destruyendo todo lo que tenía en su paso. —Ellos deberían estar extinguidos...— Exclama. — ¿Cómo es que ahora hay una mujer Darkiana? No puede ser ¿ahora están surgiendo los Dark nueva mente?

— Calmate, No te preocupes Equidna, esa es la única mujer Dark que se ha encontrado... se por fuentes muy confiables que estaba oculta en uno de las ciudades rojas fronteras con Char.

— ¿Enserio? Mi corazón estaba muy agitado al ver como mataba sin ninguna dificultad a mis hombres... ¿qué clase de monstruo es esa mujer? ¿Y le viste sus ojos negros y ese cabello? Me dio escalofríos.

— Ya deja de hablar de ella, mujer u hombre, que importa, ahora estás segura conmigo— Dangor se pone frente a ella y le besa. Luego siente un poco más de calma y le dice:

— Pero es que ella...— él pone su dedo en sus gruesos y rojos labios y le dice: — No te preocupes, deja de pensar en lo que pasó y descansa... o mejor, porque no nos divertimos un rato.

Ella se retira porque aún estaba alterada y no podía dejar de pensar en los ojos maquiavélicos de esa muchacha de cabello negro. Pero Dangor sigue insistiendo, la toma y la abraza para que ella sintiera su calor y su cuerpo... Equidna dejo salir un suspiro confortante y cierras sus ojos y le dice:

— Que bueno que estas aquí Dangor. Esa mujer me está dando pesadillas.

Y fue cuando Dangor al abrazarla le da un beso en su cabeza y le dice:

— Estoy aquí para protegerte...

Ella pregunta sobre el motivo que tenía al haber matado a su compañero Tifon.

El suspira y la mira, luego le explica todo:

— Los Maltuinos saben sobre la mina de Talactita.

—Ya lo sé— Responde ella. — Uno de los Maltuinos asquerosos acabo con la minas en el paso de la serpiente, solo me queda la obra negra.

— Si pero, alguien les dijo sobre el uso de este mineral.

Lo que Dangor le dijo, le hace abrir esos ojos dorados y se levanta para decirle:

— ¿Cómo?

— Tifon fue quien les dijo.

— Eso es un disparate. No fue sino hasta ayer que se enteró sobre la mina. ¿Cómo podría haber sabido sobre su uso, cuando ni siquiera sabía que tenía una mina de talactita?

— Él fingía, Tifon planeaba quitarte la mercancía. Así que envió un comunicado secreto a un hombre que trabaja para él dentro de la comunidad y se la hizo llegar a la tesorera general de los maltuino. Esta informó sobre la mina y comparó la información con el comunicado de Fedrg Zholty.

— Maldita sea, Primero fue esa malnacida Darkina que aparece para aterrorizarme, y ahora ¿un aliado traidor?, un momento ¿Cómo sabes todo esto?

— Porque yo era su hombre dentro de la comunidad. Y también fue quien le hizo llegar la carta a la tesorera Suggy.

— ¿Todo este tiempo estabas trabajando con Tifon a mis espaldas? Eres un traidor.

Equidna se enoja, pero Dangor al verla sulfurada. Se excita y también se levanta para consolarla.

Al otro lado del lago.Donde viven las historias. Descúbrelo ahora