She's... Different?

Capítulo cuatro.

Las clases están por acabar, así que no le veo caso entrar al salón, camino hacia la salida cuando veo al acosador. Es ahora o nunca Bree, no causarás problemas. Me digo a mi misma para tranquilizarme.

--¡Oye tú! --Él se gira con una gran sonrisa triunfal. Como sí hubiera ganado algo, que idiota.

--¿Qué mierda te pasa? ¿Eh? Llevas viéndome todo el maldito día y semana y ya me tienes harta. ¿Por qué mierda me miras tanto? Y no me salgas con esa mierda de "Porque eres hermosa." Que ahora todo mundo usa. --Dije molesta, amo la película de Bajo la misma estrella, lloré como una niña sensible, pero siempre negare eso.

Él solo rió.

--Sólo quería comprobar algo. Por cierto soy Carter Hayes. Mucho gusto.

--No salgas ahora con idioteces de "hola soy Fulano, y mírame, ¡soy hermoso!" Que conmigo no funcionan. --Me miro desconcertado y con el ceño fruncido.

--Oww bebé, no llores, te aseguro que no soy la primera chica a la que no le gustas.

Él niega con la cabeza. Y sonríe.

--Me agradas. --Murmura con un gesto de sorpresa.

--Bien por ti Carter, pero no puedo decir lo mismo, acosador. --Suelta una carcajada y por más que me resisto no puedo evitarlo y lo acompaño.

--¿Acosador? ¿En serio?

-¿Qué? ¿Querías qué te dijera amigo? Me veías todo el tiempo, me sentí acosada. Por cierto, ¿sabes quién es el nuevo? --Ahoga una risa y yo lo miro con el ceño fruncido.

Se aclara la garganta antes de contestar.

--Yo

--¿Tú? bueno, me ofrecí a mostrarte la escuela. Pero será mañana, nos vemos aquí mismo mañana.

« Carter POV »

--¡Oye tú! -Gire mi cabeza para ver a esa chica rara que había estado viendo días atrás, y no pude evitarlo una sonrisa triunfal se escapó de mis labios.

Sabía que era igual que todas, no podían resistirse a que alguien las mirara por tanto tiempo, siempre caen.

--¿Qué mierda te pasa? ¿Eh? Llevas viéndome todo el maldito día y semana y ya me tienes harta. ¿Por qué mierda me miras tanto? Y no me salgas con esa mierda de "Porque eres hermosa." Que ahora todo mundo usa. --Mi ceño se frunció, ¿qué?

Sonreí, ya entiendo, es el tipo de las que se hacen la difícil.

--Sólo quería comprobar algo. Por cierto soy Carter Hayes. Mucho gusto.

--No salgas ahora con idioteces de "hola soy Fulano, y mírame, ¡soy hermoso!" Que conmigo no funcionan. --Mi ceño se frunce, no entiendo.

--Oww bebé, no llores, te aseguro que no soy la primera chica a la que no le gustas. --Niego con la cabeza, pero es mentira, sí es la primera, sin ser egocéntrico claro. Sonrío.

--Me agradas. --Digo sorprendiéndome.

--Bien por ti Carter, pero no puedo decir lo mismo, acosador. --Una carcajada de escapa de mis labios, ella no parece igual a las otras, pero en el fondo lo es. Y yo lo voy a probar.

--¿Acosador? ¿En serio?

--¿Qué? ¿Querías qué te dijera amigo? Me veías todo el tiempo, me sentí acosada. Por cierto, ¿sabes quién es el nuevo? --Ahogue una risa, esta chica si que es despistada.

Después de eso ella se fue diciendo algo parecido a que me mostraría la escuela y que nos veríamos aquí mañana.

Ella es un poco... ¿Diferente? A todas las chicas con las que me había topado. Pero no debo confiarme, en cualquier momento ella hará algo que la haga igual a todas.

El timbre que indicaba final de clases sonó, y la multitud de estudiantes salió inundando los pasillos de voces.

Todos parecían hablar de la pelea de horas atrás.

Jamás había visto a una chica ser tan ¿salvaj... Agresiva? Sí agresiva. Me confunde demasiado, toda la semana se viste con ropa que le queda demasiado grande, y luego hoy viene con un vestido floreado, luciendo muy femenina, pero arma una pelea que me hace dudar de su feminidad.

--¡Bree! ¿Alguien a visto a Bree?--Gritaron aquellos chicos que sé juntan con ella.

Así qué Bree es su nombre, interesante.

--Parker, ven aquí. --Ordeno uno de ellos, cabello castaño con destellos rubios y unos grandes ojos azules.

Un chico con lentes y delgado se acercó a ellos con la mirada baja.

--¿S-sí?-Susurro nervioso. Uno de ellos lo tomo por los hombros.

--¿Has visto a Bree?-Pregunto otro de ellos, cabello castaño, alto, y con ojos café.

--N-no realmente Austin. --El tal Austin lo soltó y siguieron buscando.

--Austin, no creo que debas buscarla. Ella estaba muy enojada con nosotros, y creo que contigo más. --Murmuro el que parecía ser el más razonable.

--Cállate Kellan. --Dijeron los otros tres.

--No, ella estaba muy enojada y realmente creo que necesita espac.. --Él más fuerte de los tres le dio un golpe detrás de su nuca haciendo que se callara.

--Bien, bien. Pero cuando ella no se quiera acercar a ustedes no digan que no les advertí.

--Si, si, lo que digas Kellan. Vamos a su casa, debe estar ahí.

--No nos va a abrir. --Canto el tal Kellan. Mientras los demás lo veían molestos.

Así qué la chica tiene carácter, comienzo a reír interiormente. Claro que lo tiene.

Cuando pasan por mi lado Austin, creo que ese es su nombre, me mira entre molesto y burlón.
Arqueo una ceja y pongo mi mejor sonrisa burlona.
Él detiene su paso y el tal Daemon choca contra él.

--¿Por qué te detienes, Austin? -- Daemon dirige su vista hacia mi y frunce el ceño también. Mi sonrisa burlona sigue presente.
Kellan, si no me equivoco, se da cuenta de nuestras miradas e interviene.

--¿Van a venir o no?
Ambos reaccionan y siguen su camino.

Bueno, parece que no seremos buenos amigos.