Pecado Eterno (taylorlautner)

Captulo 40

"Lo que hace que los amantes no se aburran nunca de estar juntos es que se pasan el tiempo hablando siempre de sí mismos"
François de la Rochefoucauld

Estoy completamente muda, las Maldivas ¿en serio? Creí que iríamos a Miami o México pero las Maldivas eso es otra cosa, jamás me imaginé que mi luna de miel sería en las playas más hermosas del mundo casi estoy salivando por llegar allí.

-jamás había salido de Estados Unidos-el único lugar al que había llegado a parte de jersey fue la vez que Taylor me llevó a Nueva York en nuestra salida.

El toma mi mano sobre el asiento y la coloca en su regazo.

-ahora que eres mi esposa quiero mostrarte el mundo-

-no quiero que gastes dinero en mi, no necesito ver el mundo, solo quiero verte a ti cada día-me gusta estar con Taylor el me hace feliz de una forma que nadie más lo ha hecho, no importa el lugar no se trata de eso, podría estar en la calle pero si el está a mi lado sería un palacio para mí.
-lo sé Brooklyn, pero he estado mucho tiempo viajando por trabajo, follando con mujeres por las que no sentía nada y dedicándome a mi hijo en cuerpo y alma. Luego llegaste tú, y supe lo que era el amor algo totalmente desconocido para mí, de repente viajar a New York contigo era totalmente diferente a todas las veces que había viajado por trabajo, cuando estaba contigo no era sólo sexo había algo más y era amor y de un momento a otro supe que sería el egoísta más grande del mundo porque lo quería solo para mí-mi corazón late como lo loco porque realmente soy igual de egoísta que el. También quiero tenerlo para mí sola.

Mi mirada se dirige a mi mano izquierda donde ahora mi dedo anular no está solo, porque Taylor colocó un anillo en el. Un anillo que me recuerda que soy suya y él es mío, un anillo que jamás creí que tendría pero está aquí y vaya que me hace muy feliz.

Tay sigue mi mirada y sonríe también.

-lamento haberte ocultado todo pero no podía arriesgarme a que dijeras que no-

-no lo habría hecho-el se encoge de hombros.

-uno nunca sabe, las mentes son volubles y soy un hombre que va a lo seguro-me río.

-eres un hombre que no acepta un no como respuesta, lo hiciste con el auto y ahora con nuestra boda-

-y lo voy a hacer con muchas cosas más así que acostúmbrate-levanto una ceja.

-señor Lautner no eres mi jefe bueno literalmente hablando-eso provoca una carcajada en el.
-no discutas conmigo esposa-sus labios van a los míos y así de fácil saca una sonrisa en mi, mientras me deleito con sus carnosos labios. Cuando nos separamos veo como la aeromoza se acerca con otra persona, un chico uniformado con el típico atuendo de las personas que trabajan en el aeropuerto.

-señor Lautner el chequeara sus pasaportes-el busca e suyo en su saco y toma mi cartera sacando el mío de ahí. Menos mal Alex la arreglo porque... Esperen un momento, yo no saque mi pasaporte cuando me fui de casa ¿como es que está aquí? Mordiéndome la lengua veo cómo el chico realiza su trabajo antes de entregárnoslos de vuelta.

 
Con una sonrisa amable se aleja y solo cuando la aeromoza y el chico se van miro a Taylor levantando una ceja.

-¿de dónde salió mi pasaporte?-

-de donde salen todos los pasaportes-le resta importancia.

-¡Taylor!-reprochó y el me mira.

-digamos que cierto escalador entro a tu casa y lo busco-

-Taylor si mi madre te hubiera visto..