Lo que pasa en las Vegas se queda en las Vegas...
Yuuri soñó toda su vida con la clásica historia de Omega x Alfa. Desde pequeño se dio cuenta que sentía atracción por los hombres, y después se dio cuenta que le gustaba ser el uke. Ahí fue cuando co...
Los siguientes dos días volaron para Yuuri. Fue increíble como cambió su relación con Viktor. En el día, parecían los mejores amigos. Compartían anécdotas de sus vidas, sin darse cuenta hicieron partícipe al otro en su vida. Yuuri aprendió mucho de Viktor, aprendió como Viktor es una persona muy lamentable al que no le gusta estar solo. Es por eso que siempre busca compañía en mujeres, para tratar de llenar el hueco que dejó su mujer. Yuuri no sabe mucho de la ex-mujer de Viktor pues no le gustaba hablar mucho sobre ella, solo sabe que fueron novios, ella quedó embarazada y al tener a Yarine se fue abandonando a su recién nacida y a Viktor. Viktor eligió el nombre de la pequeña, Yarine, que quiere decir calma, pues según el ruso Yarine trajo calma y felicidad a su vida.
Viktor le comentó a Yuuri que sabe que la madre de Yarine ahora está casada y tiene su propia familia. Ella no quiere saber nada de ellos. Al saber esto Yuuri siente más pena por Viktor ya que ahora comprende el comportamiento tan mierda que Viktor tiene, claro, lo comprende más no lo justifica.
Viktor le encanta alardear sobre su hija, y ahora Yuuri ya sabe todo de ella. Ya sabe su color favorito, la talla de zapato que calza y la que viste. Viktor ama hablar sobre ella y Yuuri cree que es algo encantador. Yuuri ríe al ver la cara tan infantil qué Viktor pone cuando habla sobre su hija.
Por la noche su relación era llevada a otro nivel. Por la noche, tanto Yuuri como Viktor dan rienda suelta a sus pasiones tocando y probando cada centímetro del cuerpo del otro. Por las mañanas el sol los encuentra abrazados, Yuuri siempre busca por el calor del mayor y este último se deja atrapar por el menor para después pegarlo a su cuerpo. Al abrir los ojos y tomar distancia del cuerpo del otro, su relación regresaba a una de amigos. Hablaban como si nada hubiera pasado la noche anterior entre ellos.
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Ya era jueves, un día hermoso en Las Vegas, ya pasaba de las dos de la tarde y Yuuri en compañía de Viktor, Pitchit y Chris irían a caminar para hacer algo de ejercicio y bajar toda la comida que comieron en el buffet, antes de llegar a la piscina. Habían conversado sobre ir a la piscina, está vez no había ningún evento, así que podrían nadar y disfrutar del agua sin tanta gente, por lo cual todos llevaban traje de baño puesto. Yuuri y Pitchit llevaban sus trajes de baño debajo de la ropa. Pitchit y Yuuri caminan detrás de Chris y Viktor.
—Oye Viktor, llevo rato viendo a los chicos mirar hacia acá, la mayoría alfas. Acaso parezco omega?—Preguntó Chris.
—No quería decirte esto, pero... Si, hueles y te miras como un omega—Chris le dio un codazo a Viktor—Auch, es verdad—se río burlón el peli plateado.—Ahora qué lo mencionas, yo también me di cuenta de eso.—Viktor y Chris se miran entre sí. Se detienen y miran a los chicos que veían a su dirección. Ahora veían un poco atrás. Por curiosidad voltearon a ver a esa dirección, querían saber qué es lo qué tanto miraban.
Miraron a corta distancia a Yuuri y a Pitchit parados mirando la ropa qué estaba en un aparador. Yuuri y Pitchit estaban ajenos a las miradas de los Alfas.
