Los días pasaron y Otabek no perdía oportunidad para buscar a Yuuri. Viktor se enojó y habló claramente con él. Le hizo saber que no era profesional que un director general de otro departamento hablara mucho con otro trabajador que ni siquiera estaba en el mismo departamento. Viktor se quejó de que Otabek hacía que Yuuri perdiera el tiempo y desatendiera sus funciones.
Otabek se defendió diciendo que hablar con Yuuri en sus tiempos libres no violaba ningún reglamento, si es que había uno. Otabek simplemente le dijo que no se debería meter en lo que no le importa pues aunque Yuuri trabaja bajo su cargo, no le daba derecho a opinar sobre la vida de él o de otros trabajadores, especialmente alguien con la "reputación" como la de Viktor no debería de opinar. Porque si, Otabek se enteró de la reputación de Viktor el mismo día en que llegó.
Viktor se enojaba cuando veía a Otabek cerca de Yuuri, aunque fuera por casualidad. Para observar mejor el desempeño de Yuuri, porque es así como Viktor lo llamó aunque en verdad era para observar y pasar más tiempo con el azabache, Viktor tomó el lugar de Sasha para supervisar a Yuuri.
—Yuuri, ya llevaste los documentos del informe del producto que salió?—Viktor le habló a Yuuri que se disponía a ir a la cafetería trasera para tomar su descanso. Yuuri normalmente tomaba el descanso en la cafetería principal, pero desde que Otabek llegó, lo toma en la cafetería trasera con Otabek y Wang Hong.
—No, pero después del descanso lo hago.—Yuuri comenzó a caminar ignorando a Viktor
—Espera...—Yuuri ignoró a Viktor—Yuuri—dijo Viktor al jalar al azabache de la mano. De algún modo Viktor jaló a Yuuri de modo que lo pegó a su cuerpo y por instinto lo abrazó de la cintura.
Yuuri no supo reaccionar, de momento a otro se encontró en los brazos del alfa que le hizo conocer tantas nuevas sensaciones. Incómodamente le miró a los ojos. Su corazón comenzó a latir fuertemente cuando se encontró con los ojos azul cielo. Viktor solo le miró y al darse cuenta de lo que hizo y lo soltó rápidamente.
—P-Perdón—Tartamudeo el ruso con nerviosismo, Yuuri también estaba apenado y nervioso al volver a sentir los brazos de Viktor sobre él.—La costumbre—soltó Viktor sin querer y Yuuri frunció el ceño.
—Podrías no confundirme con una de tus... olvídalo.—Comenzó a caminar lejos de Viktor.—Ah, es verdad—frenó de golpe y volteó para ver al ruso—Los documentos te los doy después—giró y se marchó.
Viktor no dijo más nada. Se maldijo mentalmente por soltar lo de "costumbre". La verdad es que el nerviosismo le ganó y soltó lo primero que su lengua encontró. Claro que Yuuri se sentiría mal por eso. Viktor enojado con él mismo comenzó a caminar a la dirección opuesta de Yuuri. De pronto se detuvo un momento.
—Ahora que lo recuerdo... esta cafetería tiene una máquina de café muy buena. Claro, iré a comprar café—giró y se dirigió a la cafetería dónde estaba Yuuri.
Viktor entró y rápidamente comenzó a buscar a Yuuri con la mirada.
—Ammm... Yuuri? Ese no es Nikiforov?—Wang Hong codeo a Yuuri para que volteara hacia atrás. Estos dos estaban en una mesa hasta el final de la cafetería. Justo a un lado de la dispensadora de café.—Que está haciendo aquí? Él nunca toma el descanso aquí.
—Ignóralo, seguramente viene a buscar a su presa.
—Uhm... Será? Oh viene para acá...—Viktor comenzaba a caminar hacía la máquina de café—por cierto, sabías que ahora su nueva presa es toda una noticia famosa?—Wang Hong no dejó que Yuuri preguntara siquiera, rápidamente lanzó la respuesta—Un hombre... un hombre Omega.—Yuuri abrió los ojos de par en par. Por alguna razón eso dolió más que las aventuras pasadas. No sabía si era por el hecho de que era un hombre como él, o que era un hombre omega como el primer amor de Viktor. No tuvo tiempo de procesar toda la información pues al momento miró a Viktor parado frente a ellos.
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Love behind the Mask (Terminado)
FanfictionLo que pasa en las Vegas se queda en las Vegas... Yuuri soñó toda su vida con la clásica historia de Omega x Alfa. Desde pequeño se dio cuenta que sentía atracción por los hombres, y después se dio cuenta que le gustaba ser el uke. Ahí fue cuando co...