Capitulo 40

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Sin POV

Katherine Jauregui maldecía internamente a quien haya hecho su horario poniendo sus primeros tres días de clase entrar a primera hora, caminaba por los pasillos de la universidad a lado de Elliot, el chico contaba sus planes para fin de año mientras Kate solo miraba al piso y a veces asentía de manera involuntaria.

- Será mejor irnos por aquí, me han dicho que el camino es mas corto.- El chico trato de tomar su brazo para llevarla en dirección contraria pero Kate lo detuvo.

- Elliot, el único lugar al que lleva ese pasillo es la facultad de arte, ¿Te has cambiado de clase y no me lo habías dicho?- Nego divertida mientras veía al frente y empezaba a caminar de nuevo.

- No pero...- Muy tarde, la pequeña ojiverde estaba viendo lo que su amigo quería evitarle.

- Que coño...-

Kara se encontraba frente a su casillero guardando algunas cosas y a su lado había una chica castaña muy pegada a ella sosteniendo su bolso y con una mano peinando su cabello.

- Yo... no creo que sea lo que estés pensando, a lo mejor y...-

- Claro que es lo que estoy pensando.- Con pasos seguros empezó a caminar hacia ellas.

Ambas chicas rieron por el comentario de la castaña.

- Eres tan tonta.- Cerro el casillero y tomo su bolso.

- Es verdad, si tu novia nos viera se que me comería viva.

- Katie puede ser un poco celosa pero no a esos extremos.

- ¿Segura? Te recuerdo que no la has visto, ella no sabe de mi existencia y ahora que te vea conmigo, la que se te armaría Zor-El.- La rubia lo pensó un poco y después agrando los ojos dándole la razón a su amiga.

- ¡Diablos! Debo habla con ella antes de que...-
Demasiado tarde.

– ¡Eres una maldita mentirosa! Yo rogándote todo este tiempo y tú has estado con esta zorra.– Su voz sonaba tan fuerte que muchos miraron en su dirección.

– Katie, no no esto no es...–

– A mi no me llames zorra, niña tonta.– Su amiga no le hacía las cosas fáciles.

– Sam, por favor.– Le rogó la rubia.

– Si ibas a hablar conmigo para terminarme te lo voy a ahorrar, se acabó Kara, quédate con Sam.– Le dió un empujón pasando a su lado en dirección a la salida de la universidad.

– Espera...– Elliot sujeto su brazo y negó con la cabeza para después ir en busca de su amiga.

– Joder.– Se recargo en su taquilla totalmente desanimada.

– Ya habrá tiempo para que hables con ella – La consoló su amiga.

– Termino conmigo ¿No la has escuchado?

– Estaba enojada y es normal. Se le pasará y después irás a hablar con ella, aunque no te lo va a poner fácil.

– Ni siquiera quiso escucharme.– Dijo cabizbaja haciendo que Sam rodará los ojos.

– Es que ambas son tan idiotas.– La abrazo por los hombros.– Hay que ir a clase, ya habrá tiempo para arreglarlo todo.

Por otro lado, una pelinegra llegaba a su casa con lágrimas cayendo por su rostro y el maquillaje corrido, su llanto era muy sonoro provocando la preocupación de las dos personas que se encontraban en la sala.

– ¡Katherine! ¿Qué pasó?– Lauren se levantó al instante al ver el semblante de su hija.

– Lo que me faltaba.– Chillo más y huyó de su madre hacia su habitación cuando vio que quien acompañaba a Lauren era Camila.

Que Hubiera Sido.Donde viven las historias. Descúbrelo ahora