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Los rayos del sol se colaban por los orificios del ventanal de la habitación de Yoongi.

El sonido de una alarma llegando a sus oídos. Lo hizo despertar.

Su brazo dolía haciendo una mueca debido a esto abrió sus ojos notando como una cabellera castaña posaba en ese lugar.

Yoongi sonrió al saber que se trataba de Jungkook, su pequeño chico siempre durmió entre sus brazos y su corazón se agitó al verlo dormir tan plácidamente abrazando su torso.

Los ojos de Yoongi fueron recorriendo las facciones del rostro de Jungkook hasta su pecho que subía y bajaba lentamente, a él le pareció a ver visto un ángel dormir. Sentía felicidad al saber que ahora él podría protegerlo de todo lo que pudo haber vivido.

Salió de sus pensamientos al ver los ojos brillantes y hermosos de Jungkook verlo espectante.

-Buenos días, Jungkook.

El mencionado soltó inmediatamente a Yoongi y sus mejillas tornándose de un rojo carmesí al sentirse avergonzado y Yoongi solo sonrió al notarlo.

-Buenos días, Yoongi-hyung.

-Te ves muy lindo al dormir, al parecer roncas.

Jungkook abrió su boca en forma de "O" y Yoongi se echó a reír

-...

-No te preocupes. Es una broma, solo quería molestarte.

Jungkook sonrió y Yoongi se sentía victorioso pues sabía que hacer reír al más joven era su objetivo.

-...

- ¿Tienes hambre? bajemos a desayunar ¿Qué te parece?

Jungkook solo asintió y ambos bajaron a la cocina.

Al llegar a ésta, Yoongi puso agua a calentar en un recipiente para preparar un poco de café.

Buscó en el refrigerador mermelada para preparar un par de tostadas para ambos.

Jungkook solo le observaba.

- Vamos. Siéntate y espera.

- Creo que debería ayudarle, hyung -dijo Jungkook de manera suave.

- ¿Estás seguro? No tienes que hacerlo porque sientas una obligación ¿Sabes?

- Sí, hyung. Me siento feliz de serle útil.

Yoongi sintió que estaba avanzando un poco a comparación del día de ayer que Jungkook solo decía dos o tres palabras.

- Está bien. Puedes poner mantequilla a las tostadas. - dijo ofreciendo ésta a Jungkook que la tomó muy amablemente.

El mayor empezó a preparar el café mientras el más joven las tostadas.

Ya en el desayuno, Yoongi no sabía si era demasiado anticipado preguntar algo a Jungkook. Tenía muchas interrogantes. Sentía que había avanzado un poco con Jungkook pero le daba miedo dar un paso en falso y que después el menor terminara por encerrarse, ya tenía mucho con que dejara de llorar.

- Para mañana podemos preparar panqueques si quieres y podrías ayudarme. - dijo el pelinegro mientras metía un poco de tostada a su boca.

Jungkook dibujó una sonrisa en su rostro después de tomar un sorbo de café.

- Claro, me encantaría hyung. ¿Pero podemos hacerlos con miel?

- Sí. No te preocupes, aunque esta tarde podemos ir al súper mercado a comprar los materiales ¿Qué dices?

Besos del alma •  [Yoonkook]Donde viven las historias. Descúbrelo ahora