Este libro compila algunos momentos Hiccstrid que me hubieran gustado enormemente ver en RTTE, porque aunque amo la serie admito que dejo muchos vacíos emocionales hiccstrid en mí.
Cómo verán más adelante los capítulos llevan un orden cronológico...
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Shot basado en RTTE cuando descubren que Heather es una jinete solitaria y que Dagur es su hermano
POV NARRADOR
-Y ustedes ¿tienen algo cierto?- la simple pregunta hizo que la siempre certera Astrid enviara su hacha hasta la punta de un lejano árbol que asustó a un terror nocturno que dormía en una rama cercana.
Heather llevaba solo un rato de regreso a en la Orilla del Dragón después de que los chicos descubrieran que ella era una jinete solitaria, tras una perturbadora reunión con los otros jinetes Astrid y Heather decidieron pasar un tiempo de chicas... traducido en entrenar y lanzar hachas.
-¿Que? no, somos amigos- respondió Astrid notablemente nerviosa ante tal cuestionamiento, en parte era cierto, solo eran amigos, le gustara o no aquel título.
-Por favor veo como son cuando están juntos- sugería Heather mientras recuperaba algunas hachas de los barriles de entrenamiento
-No, enserio... amigos- resaltaba Astrid mientras lanzaba otra hacha
-Es algo lindo- continuaba Heather sin dejar de mirar los movimientos tensos de su amiga
-Supongo, si te gustan los jinetes de dragón que no aceptan ser héroes-
-Vamos Astrid- decía Heather mientras arrebataba el hacha de su amiga y la llevaba a un barril cercano a sentarse
-Que no¡¡- dijo ya completamente sonrojada –Heather es mi amigo, muy cercano claro que sí, pero solo AMIGOS- se encargó de resaltar aquella palabra lo más que pudo
-Oye oye oye, tu y yo ¿tenemos los mismos recuerdos?- cuestionaba la pelinegra mientras se reía –desde que los conozco ya sabía que eran algo, admito que siempre creí que para cuando los volvería a ver, ustedes ya estarían... bueno, juntos-
-Nos conociste hace más de tres años-
-Exactamente querida amiga... es evidente la manera en que lo miras... y la manera en que él te mira-
-¿Casi igual que Patán te mira?- bromeaba claramente tensa Astrid tratando de cambiar la conversación –en verdad no sé si agradecerte o sentir lastima por ti-
-Puedo manejar a Patán... y creo que el tema era otro- decía Heather mientras levantaba una ceja, era demasiado lista y estaba demasiado concentrada en el otro tema. Astrid en silencio se levantó y comenzó a lanzar de nuevo, acción que fue imitada por la pelinegra.
Pero Heather era la clase de chica que era capaz de llegar a las últimas consecuencias para saber algo, no era de las que se rendía fácil
-Entonces... ¿solo amigos?- insistió
-Si AMIGOS- respondió la ojiazul mientras fingía estar por completo concentrada en el blanco
-Entonces supongo que no habrá problema si trato de seducirlo...- de repente el hacha de Astrid termino dos árboles a la izquierda de la anterior, el mismo terror nocturno salto de nuevo y comenzó a volar a las cuevas, al parecer el bosque no era un lugar seguro para dormir
-Espera... ¿Qué?... por qué... el... el ¿te gusta?- decía nerviosamente al pensar que su amiga y el chico que amaba podrían terminar juntos, después de todo, no era la primera vez que sentía celos por aquella situación
-Bueno... es guapo, el maestro de los dragones, futuro jefe de Berk, y está completamente disponible- decía Heather mientras hacia un esfuerzo sobre humano para no reírse de las expresiones faciales que le estaba generando a su amiga
-Supongo que es lo de menos, es decir, es inteligente, la persona más buena que conozco, divertido, el mejor amigo, protector, con una tendencia estúpida a ponerse en riesgo, un gusto por las situaciones que casi lo matan, valiente, terriblemente guapo...-
-En el blanco- dijo Heather mientras lanzaba una flecha perfectamente dirigida al centro, orgullosa de sus avances en su nueva misión "Hacer que Astrid se confiese" –Tranquila, Hipo es bueno, pero no es mi tipo... me gusta otra clase de tipo listo y tímido- Astrid pudo sentir que respiraba de nuevo
-¿Espera que?... - pregunto la rubia desconcertada
-Como Patapez- confesó sin problemas Heather, sus sentimientos claramente no eran ni la décima parte de profundos que los que tenía su amiga, pero estaba claro que algo estaba naciendo en ella y a diferencia de Astrid no tenía problemas con contárselo
-Hablamos de Patapez ¿cierto?... el chico con el gronckle- preguntó Astrid aun sorprendida de aquella extraña pareja
-Jajaja, basta de hablar de chicos ¿Qué más hacen para divertirse aquí?- preguntó Heather sabiendo que mucha más información ya no podría obtener... no por ahora.
La diversión duró poco cuando Heather se encontró con el mercader Johann y Astrid en ausencia de Hipo tuvo que tomar una difícil decisión, abandonar a su amiga o unirse a ella en busca de Dagur junto al equipo sin el líder.
Cuando Hipo llegó de regreso a la orilla tuvo un mal presentimiento, estaba vacía, sin señales de Astrid ni el resto de los jinetes o dragones
-Chica lista- dijo para si cuando vio en la pared de la entrada de los establos la daga de Astrid con la ubicación a la que se dirigían y el objetivo que perseguirían.
El enfrentamiento se hizo claro, y aunque Heather prometió hacer de aquella una misión de captura al final sus intenciones se hicieron evidentes, mataría a Dagur, pero Hipo intervino en el momento dejando caer una bomba que cambiaría el rumbo de la vida de muchos, Heather descubrió en ese momento que matar a Dagur era matar a su propio hermano.
Viéndose rodeados por el resto de la flota del enemigo, decidieron todos, incluidos Heather volar de regreso a la orilla, sus planes cambiaron en un 180 y decidió que la Orilla no sería su hogar, no mientras tuviera tanto que averiguar.
-Gracias Astrid, fue bonito tener una amiga- dijo Heather abrazando a Astrid mientras el atardecer prometía velar por el vuelo de la pelinegra. Un castaño se acercó a la escena mientras le entregaba de regreso el antiguo cuerno que Oswald le regaló a Heather
-Sabes que tienes un hogar con nosotros- le recordó el chico. Heather le sonrió y lo abrazo mientras susurraba a su oído
-Deja de perder tu tiempo y ve por ella de una buena vez- le decía para después separarse de él y señalar con la mirada a Astrid aclarando un poco mejor el significado de sus palabras –Gracias chicos- dijo una última vez para después salir volando sobre Cizalladura
-Ya sé que ustedes se hicieron muy amigas, lamento que la pierdas- le dijo mientras veía Astrid claramente cabizbaja por aquella partida
-Pero aún te tengo a ti- le dijo sonriente mientras lo abrazaba
-Siempre- dijo el castaño mientras correspondía a tal abrazo y se disponían a ver a la jinete solitaria desaparecer en el cielo.
