POV ASTRID
Bien... despertar hace unos años, era de mis momentos favoritos del día, en cuanto el sol se colaba en mis pequeñas ventanas, solía ponerme de pie, arreglarme, y salir dispuesta a enfrentarme a lo que a los dioses se les ocurriera ponerme al frente ese día...
Pero desde hace algunos años, despertar se volvió más que nada, un reto a mi arrogante voluntad.
Y es que ¿Cómo podría hacerlo?... en cuanto los primeros rayos del sol se colaron por mi ahora enorme ventanal, mis ojos se abrieron y no pude evitar sonreír cuando lo acepté, ya no es por el sol invadiendo mi rostro, mi sonrisa es por aquellos brazos que invadían por completo mi cuerpo.
Capturada en su cuerpo, armonizada por su discreta respiración, endulzada por ese olor a ámbar y maderas que se cuela por su piel, él... era una sublime y pretenciosa invitación para volver a dormir. Más cuando un solo movimiento mío era suficiente para que su abrazo se volviera más fuerte y suave a la vez, extraño, incluso totalmente dormido sabe perfectamente cómo hacerme sentir bien y a salvo, incluso si alguno de nuestros antiguos enemigos volviera a atacar este lugar, justo aquí, justo ahora, no tendría nada que temer.
Me acomodé en sus brazos un poco más, cerré mis ojos, y como una buena perdedora, acepté que el sueño me ganara esta batalla...
Y no me arrepiento de nada.
POV NARRADOR
Unas horas pasaron antes de que Berk se activara nuevamente, para cuando el jefe de Berk llegó de la Orilla 2.0 al centro del pueblo, los hornos ya estaban en funcionamiento listos para el desayuno, algunos vikingos apagaban las antorchas y faros, Smidvarg y su grupo se escondían en las cuevas a dormir, y el resto del pueblo comenzaba con sus propios deberes.
Excepto...
-Ohhhhhh Hipo-
-No-
-Pero aun no te decimos- se quejó Brutacio
-Bien, díganme...-
-Bueno...-
-No- los interrumpió enseguida el castaño mientras iba a la forja a recoger una nueva prótesis para Chimuelo
-Pero- se quejó Tilda
-Chicos, sé lo que quieren-
-Espera hermana...- la detuvo el gemelo –olvidamos que Hipo es 40% mago- el castaño solo puso los ojos en blanco mientras Brutilda asentía
-Chicos, no pueden saltarse los entrenamientos, en especial... ustedes...- les recordó
-Pero ya no estamos en guerraaaaaaa- se quejó Brutilda
-El peligro siempre está latente, y si ustedes representan una parte del equipo más experimentado, enserio estamos en problemas- intervino Astrid
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Hiccstrid: One Shots
FanfictionEste libro compila algunos momentos Hiccstrid que me hubieran gustado enormemente ver en RTTE, porque aunque amo la serie admito que dejo muchos vacíos emocionales hiccstrid en mí. Cómo verán más adelante los capítulos llevan un orden cronológico...