POV NARRADOR
-Patán ¿es enserio?- se quejó Astrid con los ojos en blanco
-¿Queeee? No voy a dejar mi "S" aquí-
-Muy bien, ¿es todo su equipaje?- preguntaba Brutacio a un pequeño dragón blanco
-Ah Brutacio no puedes llevarte a Smidvarg con nosotros...- lo interrumpió Patapez
-¿A Smidvarg?... jah... nos llevamos a todos los dragones con nosotros-
-Adelante, tú el gronckle verde, no hagas que no te veo, en fila campeón- instruía a un grupo de dragones Tilda
-Eh... ¿Hipo sabe esto?-
-¿Saber?... él fue el que nos lo ordenó- continuó Brutacio con su trabajo
-¿Crees que Estoico se vuelva a casi morir con esto?- se burló Patán
-Bueno... no es que en un futuro llenemos Berk de dragones, creo que podremos con unos cuantos más- Astrid asintió a las palabras de Patapez
-Esperen... ¿en dónde está Hipo?- sin respuesta evidente la ojiazul salió de la casa club en busca del chico, si alguien debía estar afectado por aquel regreso, era él.
-Pio Uno, Pio Dos y Huevardo, más les vale estar en las filas en este momento-
***
Astrid lo miró, sentado en la costa, perdido en la inmensidad de una luna llena frente a él y sonrió de lado. En silencio caminó hacia él, se sentó en la arena envolviéndose por los brazos y piernas del ojiverde que en calma la recibió.
Se acurrucó en su pecho y miró a la luna en silencio también.
-¿Estas bien con todo esto?- murmuró la chica jugando con las venas de la mano del chico
-Lo estoy-
-Yo se considerabas a la Orilla tu hogar...- el castaño sonrió de lado y besó su cabello.
-Un hogar no es un lugar pequeña, aunque no te voy a mentir voy a extrañar estas vistas, y quizá a los gemelos despertándonos con su programa matutino... pero estoy bastante tranquilo con la idea de regresar- Astrid resopló
-No es que no vayamos a volver nunca ¿cierto?... es decir podemos venir aquí de vez en cuando-
-Claro, en algún momento tendré que huir de mi papá, y esta será mi primera línea de escape- Astrid negó divertida, entrelazó su mano con la de él y se acomodó en su pecho -¿Sabes que es lo más me gustó de toda esta experiencia?-
-¿Qué pudiste explotar tus dos mayores talentos?... ya sabes, conocer sobre dragones y retar a la muerte en múltiples ocasiones- se burló la chica
-También... - admitió ofendido el chico –pero en realidad me refería a que llegaste aquí siendo mi amor imposible de hacía años... y me voy de aquí contigo como prometida... no lo sé Hofferson, yo solo veo victorias-
-Ja ja... eres un idiota... mi idiota- Hipo negó encantado, ella tenía completa razón en eso, siempre había sido suyo, incluso cuando ninguno de los dos eran capaces de verlo -¿Puedo preguntarte algo?- murmuró la chica, el castaño asintió en aprobación –ambos sabemos que no quisiste ir por el Rey, Hipo lo teníamos, estaba en la Isla Berserker, pudimos explorar la cueva buscándolo todos juntos, nuestros dragones por alguna razón al final ya pudieron aterrizar en la isla... Hipo... ¿Por qué no lo quisiste así?-
-Si no me equivoco Astrid, el Rey de los Dragones tiene una forma reproductiva igual que el Gran Protector, cuando su tiempo acaba en este mundo, se encargan de dejar a un sucesor, por eso estaba el huevo ahí-
-¿Quieres decir que el Rey murió?-
-El rey acabó su guardia en esta tierra pequeña, y la nuestra con su partida y el huevo seguro... también, es hora de volver a casa-
Astrid asintió y se levantó junto al castaño dispuestos a volver, hasta que un golpe en el hombro detuvo al castaño.
-¡Oye!-
-Eso fue por hacerme volar a lo desconocido, mudarme a una isla lejana con Patán y los gemelos como compañeros, hacer que casi muriera en múltiples ocasiones, y ya sabes la diversión y esas cosas- murmuró la chica acercándose lentamente a él.
-Me falta mi otra mitad...- se quejó el chico envolviendo su cintura
-Creí que te gustaba finalizar mi frase- susurró la chica sobre los labios del castaño entrelazando sus manos sobre su cuello
-Me gusta más cuando tú la dices- Astrid sonrió sobre sus labios casi negándose a ser ella la primera en besarlo, Hipo negó tomó su nuca y comenzó con aquel esperado beso, un beso tan largo y despreocupado como agradecido y encantado que solo finalizó cuando Hipo lo decidió –esto fue por hacerme vivir la aventura de mi vida-
-Ah no amigo, a mí no me culpes, el de la idea de seguir un artilugio desconocido al mas allá fuiste tu- se quejó Astrid, Hipo negó, soltó agarre y comenzó a caminar de regreso a la casa club, solo un par de pasos se detuvo y se volvió hacia ella.
-Hablaba de enamorarme de ti...- le respondió haciendo a la ojiazul morder su labio sonrojada, nuevamente Hipo la había dejado sin palabras –Oye Astrid...- la llamó caminando hacia atrás seguido por la ojiazul –Brutilda tenía razón aquella noche...- la ojiazul lo miró curiosa -siempre te elegiría a ti-
POV HIPO
Esta, es la orilla del dragón, es remota, es peligrosa, y hasta hace poco había sido nuestro refugio, pero a veces... volver a nuestro origen puede ser satisfactorio, mi papá... bueno, se recuperó y volvió a ser el mismo de siempre, resultó que no estaba listo para dejar de ser el jefe, aún tengo la sensación de que eso no le impedirá intentar pasarme las riendas en muy poco tiempo, pero hoy, por primera vez en mi vida... no le tengo miedo al futuro.
Sobre los ojos de dragón, son herramientas maravillosas para el conocimiento sobre dragones pero, en las manos equivocadas son demasiado peligrosas, y algunos secretos son mejor guardados con fuego y una pequeña explosión, seguiremos descubriendo todo lo que el mundo de los dragones nos permita saber... a nuestra manera
Si, la Orilla ha sido buena para nosotros, somos más grandes, fuertes, valientes y en algunos casos, más sabios... pero nuestro tiempo ha llegado, regresaremos a Berk, listos para lo que sea, listos para luchar por nuestros dragones, y ellos, están listos para pelar por nosotros... justo como debió ser.
-Buenas noches Orilla del Dragón-
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Hiccstrid: One Shots
FanfictionEste libro compila algunos momentos Hiccstrid que me hubieran gustado enormemente ver en RTTE, porque aunque amo la serie admito que dejo muchos vacíos emocionales hiccstrid en mí. Cómo verán más adelante los capítulos llevan un orden cronológico...