El Demonio es un Ángel © ✔

88. 🎓Graduación🎓

@chica_sweet99   Gracias por los  lindos comentarios que me animaban a escribir. Solo una frase o tal vez emoticones, pero ya sean simples comentarios me animaban mucho. Mil gracias ❤😙.

Gracias por su voto. 🙇❤

— La verdad es que no tengo idea. — Decía Lili a sus amigas, mientras escogía el vestido de graduación.

— A mi me gusta el rojo. — Decía Megan, Emi e Iara asintieron.

— Se te ve ardiente. Si tuviera pene te doy. — Le decía Emi guiñándole un ojo a Lili, quien carcajeó avergonzada.

— No creo que sea mi tipo. — Decía viendo el enorme escote en su espalda, y la tela traslúcida en sus caderas.

— Es perfectamente tú tipo. — Decía Iara asintiendo. — Emi tiene toda la razón, Wyatt es un suertudo. — Decía, intentando morderse la lengua porque podría decir "Y Christoffer fue todo un idiota contigo". Porque sí, Iara sentía un poco de culpa, por lo que su hermano le había hecho a Lili.

— Usaría este vestido solo para que Wyatt lo viera. — Decía Lili avergonzada y las chicas sonrieron.

— ¿Entonces cuál? — Lili le echó un vistazo al turquesa, estaba segura que combinaría con los ojos de su novio.

— Creo que ese. — Apuntó, las chicas esperaron con paciencia.

— ¿Creen que le guste? — Preguntaba avergonzada viendo el coqueto vestido, y todas estaban de acuerdo, se vería hermosa.

— ¿Gustarle? Va a encantarle. — Decía Megan con una sonrisa.

— Más importante va a querer quitártelo. Llevas los condones contigo ¿Cierto? — Decía Emi y Lili asintió avergonzada, Iara carcajeó a todo volumen, le encantaba la relación que tenían las chicas.

— Creo que es el tuyo. Definitivamente. — Decía Iara, el vestido no tenía escote adelante aunque si un poco en la espalda, tenía un par de bordados a mano y era una perfecta mezcla de turquesa y blanco, al mismo tiempo que era apretado y favorecía su linda figura.

— Gracias. — Decía Lili, segura de que quería llevarlo con ella. Embolsaron los vestidos de las chicas, Iara llevaba un par de bolsas extras porque le gustaban las compras en un par de lugares caros.

— ¿Creen que Wyatt use un traje? — Decía Lili con cierto brillo en los ojos. Las chicas rieron al ver que observaba una corbata de color turquesa a juego con su vestido.

— ¿Igual se la quieres dar cierto? — Ella asintió, su novio se vería ardiente con un traje, e incluso sin ese traje ya lo era. Tuvo que comprar esa corbata, aunque estaba tal vez gastando de más. Era algo que recordaría por el resto de su vida, esos recuerdos valían cada centavo. Iara se despidió de todas, y las chicas irían a ver una película.

🎓

— ¿Ya están? — Decía Edward rodando los ojos mientras esperaba a Megan y Lili fuera de una de las habitaciones en casa de Edward.

— Ya casi termino con Lili. — Gritaba Emi, quien estaba haciéndoles un peinado recogido a Anderson, y Megan se maquillaba con mucho cuidado, ninguna usaba vestido aún.

— ¡Mujeres! — Se quejaba Edward fuera de la habitación, pensando en que también iría a recoger a su novia, pues sus padres le había permitido ir al baile con él con la condición de regresarla a las 10 de la noche.

— Ya vamos. — Decía Lili avergonzada.

— ¿Viste el rizador? — Preguntaba Emi a punto de entrar en pánico, Lili vio extrañada a Emi, ella ya tenía un par de rizos naturales.

— No sé. — Se quejaba Megan comenzando a maquillar a Lili.

— Chicas esto es un desastre. — Decía Lili en serio avergonzada, sus amigas carcajearon.

— Relájate Lili. Todo irá bien ya lo verás. — Decía Emi terminando su peinado, y yendo a sacar los vestidos de sus amigas. Ella tenía más tiempo, solo las acompañaría al final de la ceremonia de graduación, y también a la fiesta de graduación.

— Ya estamos. — Decía Megan emocionada, Edward les aplaudió.

— Me encanta de verás. — Dijo asintiendo. Lili alcanzó a ver una nota que Edward sostenía en la mano, sus padres no vendrían a la graduación otra vez por negocios.

— Yo puedo actuar como tu madre si quieres. — Decía Lili, y Edward carcajeó. — Tengo la mentalidad de una mujer madura aunque no lo creas. — Edward siguió carcajeando.

— Tranquila Lili. Aunque no lo creas ya estoy acostumbrado. Es hora de irnos. — Les tendió los brazos a las chicas de manera caballerosa.