64. Se lo merecía. 👊

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Gracias por su voto. 💖

— ¿Qué haces aquí? — Le preguntaba Anderson a Chris, mientras buscaba un libro en la biblioteca para su proyecto de historia.

— En realidad quería pasar tiempo contigo, ya que no te gusta que almuerce con ustedes. — Anderson se rio.

— No se trata de eso. — Admitió ella con sinceridad. — Es solo que nuestros compañeros van a pensar mal. — Admitió ella. Chris asintió, y tenía que morderse la lengua. Pero no la quería lejos y no lo soportaba.

— Yo... En realidad mis padres esperaban que fueras a cenar mañana sábado, y mi hermana vendrá así que... — Agachó la cabeza apenado, conocía a Anderson incluso se ofrecería a acompañarlo por lastima o al menos eso quería.

— No creo. — Negó Anderson suspirando. — Me agrada tú linda familia la verdad Chris, deberías apreciarlos más. — Le sonrió, a ella siempre le hubiera gustado tener un padre que la sobreprotegiera y le prohibiera tener novios, una madre que la controlara y no la dejará salir sola. Alguien que simplemente cuidará como deberían cuidarla sus padres.

— Pero ya no puedo ir, ellos entenderán. Ya te lo dije, diles que simplemente nosotros nos llevamos mejor como amigos. — Dijo ella totalmente entretenida buscando ese libro escurridizo.

— No quiero decirles. — Admitió Chris en voz alta. — Eres la primera chica que les presento, y me niego totalmente a creer que ya no eres mi novia. —

Anderson no pudo evitar reír, suponía que ahora el ego de Chris estaba gravemente herido, y sentía que se comportaba como cuando un niño pierde su juguete favorito, ella no había podido ayudar con la autoestima de Chris y una parte muy pequeña de ella la hacía sentir muy culpable.

— No es necesario que lo creas, esto ya es así. — Admitió ella.

— No yo...— Chris intentó abrazarla, pero Anderson pudo zafarse a tiempo la verdad es que sus abrazos ya no los quería, suspiró lleno de frustración.

— Creó que lo encontré. — Wyatt aparecía por otro pasillo con un libro en manos para su proyecto también de Historia, ni siquiera pudo que disimular la molestia de que Chris intentará algo con Anderson.

— ¿Qué haces aquí? — Preguntó con enojo.

— Solo quería hablar un poco conmigo sin que los demás alumnos nos interrumpieran. — Dijo Anderson sonriente al ver que había logrado encontrar el libro que buscaba.

Comenzó a caminar a paso lento a la Bibliotecaria y entregarle el libro que prestaría. La secretaría ya conocía a Anderson así que solo tuvo que sellar y firmar una pequeña tarjeta y prestarle el libro repitiendo su acción con Wyatt y ahora se sentía fastidiado porque Chris seguía ahí.

— ¿Nos vamos ya? — Le preguntó Wyatt a Anderson, esta vez él no se quedaría al entrenamiento.

— Claro. — Decía ella extrañada porque Wyatt estaba muy tenso.

— ¿A dónde van? —

— Piérdete, no te interesa Chris. — Le decía Wyatt, Anderson negó.

— No tienes por qué ser tan brusco. — Decía ella sonriente. — Solo iremos a dejar nuestras cosas al departamento, luego yo iré a mi trabajo, y Wyatt también. — Ella sonrió, a Chris se le revolvió el estomagó totalmente enojado.

— Entonces ¿En serio viven juntos? — Preguntó Chris, había escuchado aquello y creía que solo era algo de Anderson para ponerlo celoso, por eso no había creído que fuera cierto.

— Sí. — Asintió Anderson guardando sus cosas. Wyatt tenía una sonrisa triunfante y burlona en el rostro, Chris estaba cabreado y furioso.

— Dormimos juntos incluso. — Chris se puso rojo, estaba furioso. El timbre sonó y algunos alumnos comenzaron a salir.

— Está mintiendo ¿Verdad? — Anderson frunció el ceño y negó totalmente distraída. — ¿Es cierto? — Ella asintió. — ¿Como fue que dijiste que nunca habías salido con él? Y ahora es esta mierda. — Espetó brusco sujetando la muñeca de Anderson con fuerza y asustándola en el proceso.

Ella volteó a verlo alarmada, estaba llamando la atención de algunos chicos que se paseaban despacio alrededor de ella.

— Creo que te estás confundiendo. — Anderson le iba a aclarar el punto. Y Wyatt lo empujó para que la soltara y se alejará de ella.

— Lo que ella haga ahora no te concierne Chris. — Lo miró.

— Tú no te metas Cabrón te metiste entre ella y yo. ¿Eso querías cierto? — Chris estaba furioso, y Wyatt sonrió burlón.

— Yo siempre respete a tu novia. — Wyatt sabía que no le debía explicaciones a Chris, pero aún así quiso intentar no irse a los golpes. — Ella y yo nunca hicimos nada que te afectara a tus espaldas. Yo no soy tan ruin como tú. — Wyatt en serio disfrutaba de ver furioso a Christoffer.

— Te estás tirando a mi ex novia, bastardo. — Todos dejaron de respirar cuando Chris le propinó un golpe a Wyatt con fuerza haciendo sangrar su labio. Wyatt sonrió él había dado el primer golpe, él había empezado.

— No cabrón, yo no soy como tú. — Dijo Wyatt con una sonrisa, Anderson lo vio alarmada. Volteó a verla. — Creo que va a ser mejor que te alejes un poco. — Hizo que Anderson se hiciera a un lado en el pasillo porque estaba demasiado cerca y le iba a dar una lección a Chris.

— Wyatt no lo hagas. — Le alarmaba que en serio lo golpeara, y le parecía tonto que pelearan por algo sin sentido.

— No Lili. Esta vez no se va a quedar así. — Wyatt tomó el cuello de la camisa de Chris. Le propinó un derechazo, que quiso evitar sin éxito. Los alumnos alrededor sacaron sus celulares.

— Ese es por jugar con ella. — Volvió a golpear su estúpida nariz. — Esto por intentar solo cogértela. — Volvió a golpearlo, hacía que brotará sangre de sus labios y probablemente de sus encías. Chris logró propinarle un golpe a Wyatt que ni siquiera le había hecho cosquillas.

— Esto por cogerte a varias mientras estabas con ella y no darle su lugar. — Volvió a propinarle otros dos y tres golpes. Cuando se cansó con esa mano. Lo golpeo con la otra, esquivando ese ridículo intento de derechazo por parte de Chris Y doblando su brazo en el proceso.

— Por mentirle en su cara y hablar mal de ella. — Lo golpeo una vez más haciéndolo caerse hacía atrás sentado en el suelo.

Muchos alumnos estaban asustados de Wyatt y nadie se atrevía a defenderlo, porque les podría ir igual o peor que a Chris. Tenían mucho miedo de Wyatt.

Wyatt tenía el potencial de un criminal peligroso, podías notarlo desde que lo veías, sus tatuajes, sus brazos tan fuertes que podría acabar con alguien solo con sus manos, esa mirada filosa, y el que todo el tiempo estuviera serio, todo en él gritaba peligro, aléjate antes de que acabe contigo. Era de los tipos que sabías que terminarían en tres lugares un hospital, la cárcel o la morgue. Todos lo podían ver, el tipo era un completo peligro, todos menos Lilith Anderson.

— Basta Wyatt. — Pidió Anderson asustada, y Wyatt quería seguirlo golpeando, pero escuchaba la voz de Anderson llamándolo y sacándolo de ese trance violento en el que estaba metido, a diferencia de Lili que su demonio interno salía si ella se descuidaba, él tenía el perfecto control de todos Le lanzó una patada fuerte dejándolo sin aire.

— Espera. — Le pedía Wyatt intentando apartarla. Propinándole un golpe más. — Y ese fue por meterte con mi Lili. — Lo vio mal. — Te vuelves a acercar a ella Chris, en serio voy a matarte. — Suspiró con pesadez.

Entonces exhalo el aire totalmente a gusto, había querido golpearlo fuerte desde la primera vez que había visto como dejaba de lado a Anderson para irse a coquetear y buscar follarse a otras chicas.

El resto de alumnos estaban casi paralizados del miedo habían dejado de grabar casi a mitad de la pelea. No podían creerlo, pero si, le habían dado la paliza de su vida al Quarterback del equipo de Futbol Americano. Su rostro lleno de golpes, su nariz iba a hincharse y parecía que un ojo iba a moretearse e hincharse tanto como para no ver bien. Anderson le preocupaba Chris, pero más le preocupaba que expulsaran a Wyatt.

Anderson vio los nudillos de Wyatt con preocupación y él se preparaba para que lo regañara. Había querido golpear a Chris hace mucho.

También...

Había querido besarla desde hace mucho, así que lo hizo, frente a todos. Para que no les quedara dudas. Ella lo tenía a él. El beso no duro más de 7 segundos, segundos en los que Wyatt adoraba los labios de Anderson, y Lili se confundía aún más de lo que ya estaba, dejándola extrañada, asustada, sin respirar y en shock. La forma en que la había agarrado Chris había lastimado su muñeca y tenía un leve dolor.

Wyatt tuvo que arrastrarla con cuidado a su motocicleta por ella aún no reaccionaba eso habían sido demasiadas emociones en un solo momento, mientras el resto de alumnos se apartaba de ambos con mucho miedo.

— ¿Por qué hiciste eso? — Anderson suspiró asustada, estaba temblando. No por miedo de Wyatt por miedo que de verdad se metiera en un grave problema con los padres de Johnson o con Johnson, o las autoridades del instituto. O la policía porque había amenazado abiertamente a Christoffer Johnson.

— Porque quería. — Contestó poniéndose el casco. Poniéndole a Anderson el suyo, ella negó con frustración y subió yendo con él. Sabía que dentro de poco los llamarían a dirección.

💙➡💗


— Deja de quejarte. — Anderson limpiaba las heridas de Wyatt en su pómulo y ceja que tenía unas pequeñas heridas.

— Arde. — Se quejaba Wyatt con molestia.

— Ah pero tú querías ir y golpearlo. — Le miraba mal Anderson.

— Admite que se lo merecía. — Sonreía Wyatt viéndola a los ojos, ganas de robarle un pequeño beso, por esos labios fruncidos por el enojo, no le faltaban.

— Esperaba dormir un rato antes de ir al trabajo, por tú culpa tengo que ver que no se te infecten. — Le decía viéndolo mal.

— Déjame no es necesario. — Quería levantarse, pero Anderson prácticamente se sentó a horcadas en la cama sobre él para mantenerlo quieto.

— Tú sí que eres necio. — Lo miraba mal, poniendo poca crema para las pequeñas heridas.

— ¿Qué tienes? ¿Fiebre? — Preguntaba Anderson al ver la cara roja de Wyatt. Lo que él tenía estaba lejos de eso. "No te muevas" "No lo notes" Ella sonrió se veía realmente adorable.

— Ya casi termino solo quédate quieto. — Le pedía con suavidad, pero su rostro sonrojado la distraía mucho. Tragó fuerte asustada porque un pequeño pensamiento cruzó al ver los labios hinchados de Wyatt. Trago fuerte otra vez e intento terminar lo más rápido posible porque estaba mal. Eso estaba muy mal. No podía ver a su amigo así. No podía ver los lindos labios de Wyatt. No podía permitir que su corazón latiera así de rápido cuando lo veía.

— Creo que ya termine. — Se levantó a prisa para ir a guardar el botiquín. Wyatt suspiró aliviado que no notará la molestia en su pantalón. No, él no quería verla de esa manera, no quería arruinarlo, pero su cuerpo era mucho más sincero con él.

Lilith Anderson tenía el total y absoluto control de él.

🏍

— Te veo Luego. — Le decía Anderson a Wyatt, mientras entraba a su trabajo en ese bar.

— Si, yo posiblemente tenga trabajo extra, veré si llegó temprano. — Ella asintió, al menos le aliviaba que mañana era sábado y una sonrisa se dibujó en su rostro. 

El Demonio es un Ángel © ✔Donde viven las historias. Descúbrelo ahora