20° Twentieth

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Jimin estaba desesperado, miraba a cada cinco segundos el reloj, quería que los minutos pasarán rápido, se encontraba justo cerca de la entrada a la universidad, ¿a quién esperaba? A Min Yoongi. 

Jimin había tenido una gran idea, pedirle que saliera con él aunque sea por un café, esa era una buena idea, y era la época de frío sabía perfectamente que no se negaría.

Y entonces fue cuando su vista se puso al frente allí lo vio, venía con ese tal Jungkook.

Y por supuesto Jungkook noto la presencia de Park Jimin y eso no le agrado en lo absoluto.

- ¿A quién esperas Park? -pregunto el voz alta para que así también Yoongi pusiera atención.

- ¿Acaso debería importarte Jeon?

- Claro que me importa, y más sí esperas a mi Yoon.

Yoongi deseaba que por lo que más quisiera Jimin, no le respondiera.

- ¿Tuyo? -Jimin apretó la mandíbula.

- Desde siempre, acéptalo te he ganado.

Yoongi dio un resoplido y paso de largo de ambos chicos.

- ¡Yoongi! -le llamaron al mismo tiempo.

- ¡No soy ningún premio par de idiotas! -les grito sin siquiera detenerse.

Jungkook frunció el ceño, era obvio que a Yoongi no le gustaba que fuera posesivo, pero no le gustaba que ese Park arruinará todo de la noche a la mañana.

En cuanto a Jimin, estaba molesto con Jungkook, no podía creerlo, por su maldita culpa no había ni podido saludar al pálido.

- ¡Esto es tú culpa! -exclamo Jungkook molesto-, ¿Cómo demonios es posible que lo esperes, cuando sabes que está conmigo?

- No son nada como para que digas algo como eso.

Jungkook rodeo los ojos, le molestaban las personas como Jimin, no le gustaba que se metieran en relaciones, y aunque no tenía una oficial con Yoongi, sabía que muy pronto la tendría.

Mientras esos dos seguían discutiendo, Yoongi había llegado a su aula para por fin descansar un buen rato, Jungkook lo había pasado a recoger, cosa que era muy nueva en aquel chico, ya que no lo hacía ni siquiera cuando ambos vivían en Japón y compartían cuarto.

Parecía que Jungkook quería progresar con lo que se había propuesto, conquistarlo, y no era que no lo estaba logrando, Jungkook era competitivo e incluso diría que sí ese en verdad fuera un maldito torneo o un concurso, él hubiese ganado. Pero lamentablemente para Jungkook ese no era ni un torneo ni un concurso, era la vida real y Yoongi no era un premio al que pudiese ganar.

- Yoongi... -el mencionado miro hacía su derecha y allí estaba el pelirrubio con una sonrisa-, perdón.

- ¿Qué? No tienes porque disculparte Ji..

- Claro que debo -el peliazul presto más atención-, tienes toda la razón, no eres ningún premio al que debemos ganar, eres una persona y la mejor que conozco.

Yoongi sentía como los colores subían a su rostro, y claro Jimin lo noto, porque sonrió al ver sus mejillas pálidas teñirse de rosa.

- Espero me perdones, no estaba razonando en esos momentos, creo que Jeon me saca de quicio, en fin... ¡ah! ¿Te gustaría ir por un café después de clases conmigo? Sé que tal vez estés ocupado, pero..

- Sí, ¡sí quiero!

- ¡Genial! Entonces te espero después de clases.

Y el corazón de Yoongi no podía sentirse tan cálido.

Pero se asusto, ¿acaso estaban regresando sus viejos sentimientos?

Please, Please Fall In Love!  ||JimSu||Donde viven las historias. Descúbrelo ahora