Capítulo 22

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Narra Tom.

-¡Tommy!- alguien sacude mi hombro- ¡arriba!- grita la voz de una chica haciendo que me despierte.

-Daya, es muy temprano- protesto como un niño pequeño y vuelvo a cubrir mi cuerpo con las cobijas.

Cierro mis ojos nuevamente y siento como los pasos de Zendaya se alejan de la cama, seguramente salió de la habitación. De pronto siento como un cuerpo se lanza sobre el mío aplastandome.

-Creo que me acabo de quedar sin columna- Z se levanta dejándome libre para poder levantarme.

-Al fín despiertas Bella Durmiente- dice mi amiga riendo.

-¿Por qué insistes tanto para que me despierte?- estiro mis piernas y brazos. Quiero seguir durmiendo.

-Tenemos una entrevista dentro de dos horas y tenemos que pasar a buscar a tu mejor amigo al hotel- dice Z mientras revisa su celular- Harrison ya está llamando para que vayamos a buscarlo.

Maldigo internamente a mi mejor amigo mientras me levanto y tomo mi ropa del día anterior para ir al baño a darme una ducha antes de salir.
Una vez que termino de ducharme me visto y salgo de la habitación de Z para ir a desayunar, pero antes tomo mi celular para llamar a Liv, la extraño, extraño escuchar su voz... todo. ¡Maldita sea!, tengo sólo el seis por ciento de batería y yo olvidé cargarlo durante la noche.

-¡Zendaya!- grito mientras bajo las escaleras.

Llego a la sala y me encuentro a Zendaya hablando por teléfono con alguien muy animadamente.

-Aguarda un segundo ma- dice ella girándose hacia mi- ¿qué quieres Tom?.

-Necesito un cargador, mi celular está muriendo y necesito hacer una llamada importante.

-En la cocina debe haber alguno, fíjate- mi amiga dice esto último antes de seguir la conversación que tenía hace unos minutos.

Voy corriendo a la cocina a buscar lo que necesito, busco en la cajonera que hay bajo la mesada y no hay nada, busco en otros muebles pero no lo encuentro. ¿Por qué mi amiga tiene que ser tan desordenada?

O mejor dicho, ¿por qué tú eres tan despistado que olvidaste cargar tu teléfono anoche?. Buen punto querida consciencia.

-¡Z!, no lo encuentro- me siento frustrado, de verdad necesito llamar a Liv.

-Tommy, ya no hay tiempo, vamos hacia el hotel a buscar lo que te vas a poner y a buscar a tu mejor amigo- Daya no me deja protestar ya que me saca a empujones de su casa.

Apenas piso la puerta de entrada varios flashes impactan sobre nosotros, rápidamente me coloco mis lentes oscuros, Zendaya hace lo mismo y subimos al auto.

-¿Cuándo entenderán que no somos novios?- Daya ya está de mal humor, sé cuanto le molestan este tipo de cosas.

-Pronto, si las cosas se dan con Liv, pronto podré decir que ella es mi novia, así no te molestarán- le dedico una sonrisa tranquilizadora.

Z sigue pendiente de su celular, mientras yo miro por la ventanilla, hacerlo me recuerda a Liv, ella siempre lo hacia. Hay demasiado tráfico y por eso nos demoramos más, pero por suerte llegamos temprano al hotel, con Zendaya nos bajamos del auto y nuevamente nos encontramos con al menos cincuenta fotógrafos, yo paso mi brazo sobre sus hombros y ella esconde su rostro en mi pecho, de esta manera logramos entrar al hotel, una vez que ingresamos vamos directo al asensor.

-Ya deberíamos dejar de hacernos problema con los paparazzis- dice Z apoyando su espalda contra la pared del asensor.

-Lo sé y lo siento, sé que te molesta que nos estén siguiendo todo el tiempo- realmente estoy apenado porque sé lo que esto significa para Daya.

La Chica De Intercambio// Tom HollandDonde viven las historias. Descúbrelo ahora