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Jimin llegó algo tarde al trabajo debido al tráfico. Porque un taxi había tenido un accidente con un camión, pero eso no era una excusa para Taehyung, porque si se hubiera levantado más temprano hubiera llegado antes de que ocurriera el accidente.

Llegó casi corriendo a la oficina, se encontró con Seokjin sirviendo un café y este le sonrió.

—¿Cómo te fue anoche? —preguntó Seokjin, de forma amistosa—. El jefe está muy contento así que supongo que hicieron algo —levantó ambas cejas repetidas veces.

Jimin lo miró apenado y después miró hacia donde estaba la oficina de Taehyung, las paredes eran vidrios esmerilados por lo que sólo podía ver la silueta de Taehyung moverse de un lado a otro. Y volvió a fijar su vista a Seokjin con ceño.

—¿Cómo supiste que salimos? —preguntó Jimin.

—Me quedé hasta tarde —volvió a alzar las cejas—. No sabía que al señor Kim le gustaran los hombres —rio y sacudió a Jimin—, ¿y bien?, ¿es cierto que coge como si estuvieras en el cielo?

Jimin miró asustado a Seokjin y lo alejó.

—¡Dios no! Sólo fuimos por un café —dijo—, y fue un asunto de negocios, nada personal —mintió.

—Ay que aburrido —respondió haciendo un puchero.

—¿Quién te dijo que Kim coge así? —preguntó Jimin.

—Yo —Jimin rodó los ojos—, estoy seguro porque se lo he visto a través de los pantalones y parece que ahí abajo le va a explotar.

—Dime que no estás ebrio —dijo Jimin. Jimin tocó la frente de Seokjin y después se acercó a su cara para oler su aliento y sí, olía un poco a alcohol con pasta dental—, ¿por qué? Es demasiado temprano.

—Al fin llega señor Park —Taehyung se acercó hasta ellos y Jimin se alejó de Seokjin, casi empujándolo. Taehyung miró a Jin y después a Jimin— ¿Ya miró la hora?

—Lo sé, no volverá a pasar —respondió con la cabeza agachada.

—Bien, lo necesito en mi oficina de inmediato —Taehyung se alejó de ellos.

—Parece que ya se enojó —dijo Seokjin—. El masoquismo no es sano, no dejes que te golpeé.

—Cierra la boca —murmuró Jimin—, me va a reclamar y a amenazar, además que al señor Kim le gustan las mujeres —dijo y se fue hasta la oficina de Taehyung.

Tocó la puerta, Taehyung le permitió la entrada, le pidió a Jimin que se sentara y comenzó a hablar.

—Me acaba de llamar Jieun —Jimin, prestó atención y comprendió que su enojo no fue por su culpa—. Primero me dijo que debía convivir más con mi hijo, luego comenzó a hacer comparaciones de maridos y ahora quiere que Jungkook se vaya a su casa y quiere que Jungkook esté más tiempo con ella porque extraña a su bebé. Al único que esa mujer puede extrañar es al inútil de su pareja que se quiere robar a mi hijo.

Jimin se movió incómodo, ¿cuántas veces a la semana escuchaba a Taehyung quejarse de su exesposa y de la pareja de ella? A través de ello podía ver lo solicitaria que era la vida de Taehyung. Porque él manejaba su vida y nunca miraba un "visitar a mi familia", "ir con mis amigos al bar" en las tareas pendientes de él. Una vez le cambió la lista para que pudiera estar con su familia y en vez de eso se puso a realizar otros trabajos.

—Quiere que Jungkook se quede a dormir con ella y no puedo porque Jungkook me pidió que no lo llevara con ella. Me dijo que lo golpeó.

Jimin suspiró pesado y Taehyung dejó de hablar para escuchar lo que Jimin tenía que decir.

Stubborn; VMinDonde viven las historias. Descúbrelo ahora