Stubborn; VMin

Extra

Era en las pocas veces en las que podía escuchar solamente el sonido de su teclado. Sin murmullos, sin música, sin nada. Jimin conocía ese escenario. Todos sabían que estarían una semana fuera por su luna de miel.

¿Y por qué el silencio? Todos querían dejar una buena impresión antes de que se fueran para después hacer el verdadero desastre.

—Iremos a algún lugar con costa —Taehyung le entregó unos folletos—. Hawaii es lo que me gustaría.

Jimin miró el folleto y después a Taehyung.

—Es lindo... pero ¿quieres viajar fuera del país?

—¿No te gusta? —preguntó Taehyung observando los folletos.

—Sí, pero preferiría viajar con Jungkook. Él también tiene que conocer.

Taehyung asintió y le quitó los folletos para guardárselos en el bolsillo.

—Supongo que debo seguir buscando.

[...]

—Namjoon dice que soy la relación que más le ha gustado —Seokjin sonrió—. ¿Crees que signifique boda? —preguntó con entusiasmo.

—Posiblemente —dijo Jimin igual de entusiasmado.

—Sí me veo casado con él —suspiró—. También me agrada estar con él, es muy respetuoso, le gusta que le enseñe a hornear, nunca me aburro con él, simplemente nuestra relación funciona bastante bien.

—Me alegro mucho por ti —dijo Jimin metiendo sus papeles a sus carpetas y comenzando a ordenar su escritorio. Jin miró la hora en su celular y después lo miró.

—¿Por qué guardas todo? Aún no acaba el turno.

—Lo sé, pero Taehyung quiere arreglar nuestas maletas, mañana nos iremos temprano. Dice que es un lugar lindo, ¿tú crees?

—Los extrañaremos, lo lamento mucho por los empleados que se quedarán a mi cargo —dijo con aire de superioridad.

—Sólo no causes problemas —pidió Jimin.

—Tenlo por seguro, ¿crees que después de esto me suba de puesto? Podría ser el gerente del departamento de contabilidad.

—Nunca estás en tu puesto. Dudo que Taehyung quiera hacer algo como eso.

—No es malo soñar.

×

—A veces parecen viejas chismosas —Jimin miró con ceño a Taehyung. Era cierto, pero Jin era al único al que le contaba sus problemas y la oficina era dónde más tiempo pasaban—. La oficina no-

—No es para socializar —terminó por decir. Taehyung era un buen hombre, pero su empresa seguía siendo parte importante de él, tenía esa idea de hacer el trabajo y bien hecho. Aunque no era tan exigente ya que Jimin había intervenido mucho en lo estricto que podía llegar a ser.

—Amor, ¿te gustan los mosquitos? —Jimin lo miró seriamente.

—No. Los detesto.

—Pues espero y hayas traído el repelente —Jimin suspiró. Sí lo había llevado, para su suerte.

Observó el paisaje verde por la ventana, habían arboles inmensos, podía escuchar el sonido de un ave a la que desconocía. Ya iban cerca de cuatro horas en el auto.

—¿Dónde estamos? —preguntó Jimin.

Taehyung sonrió y no contestó. Hubo una desviación y se metió al bosque llegando a un parque acuático. Todo le recordó a Jungkook y otra vez volvió a desear haber traído a su hijo, por que sí, Jimin ya decía que Jungkook era su hijo. Jungkook no le llama papi a Jimin le llamaba Jiminie. Para Jimin es más que suficiente, Jungkook crecerá queriéndolo como un padre apesar de no ser el biológico.