🂡♕Sᴇɴ̃ᴏʀ Black♛🂱

•42•

Una hora antes de que el detective llegara a la fábrica, Jungkook permanecía de rodillas frente a ese hombre ruso que le miraba fijamente mientras caminaba de un lado a otro.

Su mejilla dolía demasiado ya que Aleksei había atinado un potente golpe en esa zona. La opción de vivir parecía demasiado lejana ahora. Su respiración entrecortada y su corazón acelerado eran lo único que lograba escuchar dentro de aquella fábrica.

El pánico se apoderó de su cuerpo por un breve instante cuando vió como la esperanza de volver a ver a su Cisne se había esfumado. Jimin, su amado Jimin. Si tan solo hubiera podido despedirse correctamente.

No era capaz de moverse ya que estaba consciente de que Irina y Yuan aún estaban cerca y Aleksei era un hijo de perra capaz de enviar a sus hombres al primer movimiento que hiciera. Además no había bajado el revólver color negro en ningún momento y eso le quitaba posibilidades de hacer algo en su contra.

El ruso caminó hacia él con una cínica sonrisa en el rostro y por supuesto que Jungkook no permitió que sus ojos se apartaran de los suyos hasta que ya tenía al sujeto justo enfrente chasqueando la lengua con fingida tristeza.

—Yo no tenía nada en tu contra—dijo con voz queda—. Ni siquiera me interesaba lo que pasara contigo... Pero tú me quitaste algo— pegó la punta del arma a su frente y ni aún así Jungkook se inmutó.

—Yo no te quité nada... Yo ni siquiera sabía de tu existencia hasta que enviaste hombres a robar mis pertenencias— respondió entre dientes.

—¡Lo hice por venganza!

—¿Venganza?— sonrió de lado— ¿Venganza de qué, idiota?

—Ahora entiendo porque eres tan famoso Black— dijo riendo cortamente—.Eres un hijo de perra con un alma negra. Muy valiente— sonrió con sorna—, pero también muy estúpido... ¿Aún no comprendes que ese chico al que tú llamas el Cisne, fue quien te trajo hasta aquí?—su expresión se puso seria y finalmente su puño fue estampado contra la otra mejilla de Jungkook— ¡De no ser por él, tú estarías en tu casa tranquilo!

—¿De qué mierda estás hablando?—finalmente murmuró con rabia mientras lo observaba desafiante.

Aleksei soltó un gruñido y Jungkook escuchó el chasquido que emitió el arma cuando hizo el percutor hacia atrás.

—¿No te das cuenta de que todo comenzó con él? ¿No eres lo suficientemente inteligente para saber que todo inició por su culpa?

—No sé qué tratas de decir...

—¡Qué yo lo quería para mí!—gritó furioso, logrando una expresión de sorpresa en Jungkook. Suspiró intentando calmarse y lo miró—. Todas las noches yo iba al club solamente para verlo. Al principio me confundí porque hacía mucho tiempo que no me llamaba la atención un hombre de tal manera... Pero cuando lo ví por primera vez, supe que él era el indicado—hizo una pausa y frunció el ceño—. Yo quería sacarlo de ese lugar, quería salvarlo para que él pudiera verme con los mismos ojos que yo lo veía... Pero una noche te ví en el club y esa misma noche te ví llevártelo— sus puños se apretaron al igual que su mandíbula—. Yo lo había visto antes que tú... ¡Él me pertenecía a mi!

Jungkook cerró los ojos despacio, intentando mantener la calma luego de escuchar aquel relato.

—Él no le pertenece a nadie— murmuró—. No es un objeto... Además no es mi culpa que esperarás más tiempo del necesario.

—Si, tienes razón, por desgracia para mí, yo no era tan temido como tú, no me era tan sencillo conseguir lo que quería. Yo te odié en ese momento y después ya no fue solamente por Jimin, te odiaba porque siempre estabas un paso adelante de mí... A mí nadie me conocía, pero de ti hablaban en todas partes. Yo conseguí una pequeña fortuna pero tú ya tenías un imperio... Y mi odio fue haciéndose más grande. Tanto que busqué la forma de acabar contigo muchas veces, hasta que por fin logré tenerte aquí, de rodillas frente a mí.