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-No creo en ningún demonio, porque he recorrido éste infierno.
Oh oh oh, oh oh oh
Oh oh oh, oh oh oh
Fui el último en pie, cuando todos los gigantes cayeron.
Oh oh oh, oh oh oh
Oh oh oh, oh oh oh
No temblaré, no voy a vibrar.
Estoy hecho de piedra, no me rompo.
Enciénde, abre mis ojos.
Apártate y verás porqué...
Nací, nací listo. Nací, nací listo.
Mirando la presión ahora, no dejaré de hacerlo, no retrocederé.
Nací, nací listo. Nací, nací listo...

La canción Born Ready de Zayde Wolf sonaba mientras Jungkook estacionaba la camioneta frente a la fábrica abandonada en los límites de la ciudad. El lugar del encuentro.

—¿Te había dicho que me gusta esa canción?— comentó tratando de sonar calmado, pero Irina le miraba con unos ojos llenos de preocupación—. Tiene un excelente ritmo.

—¿Por qué quiere aparentar que está tranquilo?

—No aparento nada— acomodó su capucha y quitó los seguros de las puertas—. Ya te lo dije, tengo un plan— volvió a mentir.

—¿Lleva protección bajo toda esa ropa?—preguntó ella intranquila.

—No— miró la hora en el reloj de su muñeca y volvió la vista a la mujer—. La última vez que usé un chaleco antibalas de todas formas casi muero ¿Ya se te olvidó?— Irina negó recordando la primera vez que Jungkook llegó herido a la mansión— Además esos idiotas seguramente me van a revisar.

—P-Pero... ¿Está seguro de que va a funcionar su plan?

—Huh, por supuesto que no estoy seguro.

Bajó de la camioneta siendo seguido por la mujer que alterada empezó a caminar detrás suyo a pasos rápidos.

—¡Señor!

—Recuerda lo que te dije— le interrumpió él—. En cuanto tengas a Yuan contigo, vete.

—P-Pero— corrió para estar al lado del encapuchado y cuando menos se dió cuenta, ya se encontraban frente a las grandes puertas metálicas y oxidadas que daban paso a la fábrica.

—No te preocupes por mí.

Dió un par de toques en aquella superficie y pronto las puertas se abrieron dejando ver a unos seis hombres con rifles y pistolas apuntándole.

—Bienvenido, Señor Black—lo recibieron con burla, aunque a decir verdad a él no le importaba.

Sin cuidado lo tomaron de los brazos y comenzaron a palpar sobre su ropa para asegurarse de que no trajera armas u alguna otra sorpresa. Jungkook no se quejó, ni siquiera se movió.

—Muy bien— dijo otro tipo—, que pase.

Irina fue detrás de él y a pesar de que aquellos eran sujetos realmente desagradables, no se atrevieron a tocarla, solamente la mantuvieron vigilada para que cualquier indicio de atacar fuera detectado a tiempo.

Caminaron por un extenso pasillo solamente escuchando sus pasos contra el suelo, hasta que llegaron a un área bastante amplia que tenía máquinas descompuestas y escaleras de ambos lados que llevaban a la planta alta, en donde se podía apreciar un barandal y recargado en éste, se encontraba Aleksei con el pequeño Yuan tomado de la mano.

—¡Bienvenido!—sonrió ampliamente y comenzó a caminar junto al pequeño que mantenía sus ojitos llorosos y una expresión de terror que rompió el corazón de su padre—. Veo que has cumplido las reglas, así que dejaré ir a tu hijo.

🂡♕Sᴇɴ̃ᴏʀ Black♛🂱Donde viven las historias. Descúbrelo ahora