Verano para siempre (Terminada)

Capítulo cuarenta y seis: Te lo dije*

Melanie

Las lágrimas que estaba reteniendo en mis ojos terminaron por resbalar en mis mejillas y las manos se me helaron.

Liam estaba parado ahí, viendo la escena con el ceño fruncido. Paso la mirada de Fabio a mí y de mí a Fabio un par de veces.

─Será mejor que hablen.- 

Giré el rostro hacia Fabio sin poder creerme lo que acaba de decir, tienes que estar bromeando.

Pero a pesar de mi mirada de pocos amigos él se levantó de mi lado elevando los hombros y susurrando "Estará bien". Rodé los ojos, él y Jeremy salieron por la puerta cerrándola detrás de ellos.

Con miedo volví la mirada a Liam. Seguía viéndome con el ceño fruncido, quería decir algo pero sentí la garganta seca así que solo lo observé caminar a paso lento hacia mí. Cuando estuvo de frente se inclinó, me miró con curiosidad.

Ay, seguro luzco como un desastre.

No había pensado en eso. Él apartó el cabello desarreglado que caía en mi frente y lo paso detrás de mi oreja, luego terminó de limpiar el maquillaje corrido en mis mejillas. Que tuviera el mismo gesto que Fabio me hizo sentir confundida.

Sus ojos oscuros me escanearon de pies a cabeza, buscando algo más que estuviera fuera de lugar, cuando no encontró nada más se sentó a mi lado en la cama. 

─ ¿Por qué estabas con Fabio?- de todas las preguntas que pensé que haría, él preguntó eso.

─ El me encontró.- susurré.

Lo escuché suspirar pesadamente, no quería verlo, no había necesidad de verlo para saber que estaba molesto.

─ ¿No vas a decirme "Te lo dije"?- bromeé, pero Liam no rio.

─ Melanie...- su voz sonó... ¿derrotada? No lo sé, sentí su mirada en mi perfil y de verdad no quería verlo pero me tomo de la barbilla y me obligó a enfrentarme a su rostro. A su jodido perfecto rostro.- No lo entiendes. Piensas que te digo las cosas para molestarte pero la verdad es que...-

¿Qué? ¿La verdad es que qué, Liam?

Por favor, di que te gusto. Di que casi mueres de celos por lo de Michael y esa fue la razón de tu temperamento. Di lo que quiero escuchar, por favor.

─ ¿Qué...?- pregunté casi en una súplica. Todo lo que tuviera que ver con Michael desapareció, de pronto todo se volvió a él, todo era acerca de Liam y de lo que podía decir en los siguientes segundos.

─ Dime que paso.- 

Y toda la magia se acabó.

Negué con la cabeza, me había dado demasiada pena hablarlo con Fabio, no quería volver a pasar por eso.

─ Digamos que su comportamiento no fue exactamente el de un caballero.- dije. Él apretó la mandíbula, quito su mano de mi barbilla y de pronto deseé volver a sentir su contacto. ¿Qué clase de brujería me has hecho, Liam?- Estoy bien de todas formas.-

─ No te ves bien.-

─ Bueno, gracias.- bufé.

─ Sabes a lo que me refiero.-

Suspiré. De una u otra manera iba a enterarse.

─ Él intento... ya sabes, y yo no quería y.... bueno me fui.-

─ ¿Qué?- lo mire, la confusión atravesó su rostro pero cuando entendió lo que mis palabras querían decir no hubo más que enojo en su mirada.- ¿¡Cómo mierda paso eso Melanie!?- gritó, se levantó de mi lado y comenzó a caminar de un lado a otro en la habitación.- Él te...- me miro por un instante.