El Deber de los Herederos.(BakuTodo)[Omegaverse]

IV.(corregido)

***

Al día siguiente, tras su traumática experiencia, Shoto inició su entrenamiento como esposo omega. Se suponía que sería instruido por una omega experta en matrimonios llamada Nemuri.

La mujer estaría esperándole en una sala que no era utilizada para ningún fin específico, Enji le dio permiso para ello.

El bicolor caminaba con desgana hacia la habitación pues él realmente no quería esforzarse en ser un esposo. No tenía ningún interés en ello pero no había opción, era su deber y punto.

"Odio mi vida, yo no quería esto."—Pensó mientras deslizaba la puerta para entrar.

—Buenos días, Nemuri-sama.

—Buenos días, Todoroki-sama. Siéntese, por favor.

El omega agarró un cojín y se sentó sobre sus rodillas.  

—Muy bien, comencemos. Lo primero que debes saber para ser un buen esposo omega, es ser obediente y complaciente con tu alfa. Debes velar por su placer y bienestar.

Todoroki no pudo evitar hacer una mueca de desagrado por las palabras de la mujer. No le gustaba un pelo el hecho de ser relegado a ser alguien complaciente y sumiso, él no se consideraba así.

—¿Y cómo se supone que debo lograr eso?

—Averiguando sus gustos, lo que puede provocarle placer, lo que no, evitar todo aquello que pueda desagradarle. ¿Comprende lo que le quiero decir, Todoroki-sama?

—Sí, lo comprendo.

—Perfecto. Lo primero que te enseñaré a hacer será a servir el té adecuadamente. Así que observa cómo lo hago yo.

La azabache se levantó para coger la tetera y un par de vasos de cerámica, dejándolos en el suelo entre Shoto y ella. 

Una vez que estuvo todo colocado, agarró con su mano derecha  la tetera del asa con sumo cuidado, tocando levemente con su mano izquierda la base de la tetera, valiéndose con su Kimono morado para protegerse los dedos procedió a verter el té en el vaso que sería para el joven omega. 

—Ha visto cómo se hace, ¿cierto?

El joven asintió.

—Vale, ahora hágalo.

Shoto imitó los movimientos anteriormente realizados por la omega. 

"Esto no puede ser tan difícil, ¿verdad?"—Pensó mientras vertía el té en el otro vaso.

Durante el proceso, Todoroki derramó un poco de té en el suelo.

—Oh, lo siento.

—No se preocupe, Todoroki-sama. Tenemos mucho tiempo para aprender.—Le dijo Nemuri sonriendo tiernamente para calmarle.

Shoto sonrió con timidez, sintiéndose aliviado al notar que la omega estaba siendo amable comprensiva con él.

Y aunque el bicolor prefería el entrenamiento de pelea, sabía que era inútil tratar de negarse. Nadie permitiría nunca que un omega participase en una guerra. Ellos sólo debían cuidar la casa y a su descendencia mientras los alfas y los betas peleaban.

***

Para Bakugou, tras ser revelado como alfa, le esperaba el inicio de un entrenamiento más duro como guerrero. Éste no se basaría únicamente en la fuerza física sino también en estrategia.

El rubio cenizo llevaba puesta su ropa para pelea pues obviamente cualquier atuendo no serviría. Su vestimenta consistía en una larga yukata azul marino, con adornos plateados y una larga y gruesa cinta que estaba atada a su cintura, haciendo así que se ajustase su ropa y unos zancos de madera. Lo cierto era que aquella ropa no era la que realmente usaría en futuras guerras pero, por ahora, ya tendría suficiente con lo puesto. Al menos para el inicio de su entrenamiento.

Bakugou salió al amplio jardín de su palacio, lugar al que su padre le había mandado que fuese.

"Me pregunto que me tendrá preparado este viejo."—Pensó mientras caminaba buscando a su padre.

Tras un rato, vio a su padre junto a un hombre muy alto, corpulento y de cabello rubio.

—Buenos días, Joven Bakugou. Tiempo sin verte.—Le saludó Toshinori con su amplia y característica sonrisa.

—¿Ah? ¿Qué haces aquí, viejo?

—¡Katsuki! ¡No seas grosero! ¡Discúlpate con Toshinori-sama!

—No, no he dicho nada malo.

—Katsuki.—Dijo su padre a modo de advertencia.

Bakugou, lejos de recular y disculparse, miró a su padre con desafío.

Toshinori miraba intranquilo a ambos.

"Debo hacer algo, esto se está tornando tenso."

—Masaru-sama, no se lo tenga en cuenta. El joven Bakugou es apenas un niño, es normal que sea algo rebelde.

—Lo sé, pero debe aprender disciplina.

—Así será, Masaru-sama. Yo me encargaré de ello.

—¿Qué? ¿Acaso él me entrenará?

—Así es, hijo. Toshinori-sama se hará cargo de ti.

El joven alfa, al escuchar a su padre decir eso, sonrió con arrogancia y orgullo pues él admiraba mucho a Toshinori, el mejor guerrero alfa que había existido hasta la actualidad.

—¿Qué le parece, joven Bakugou? ¿Comenzamos?

—Por supuesto.

—Bien, comencemos. Muéstrame de qué eres capaz.

Bakugou activó su quirk y, aunque sabía que no podría ganarle, quiso probar su fuerza con él.

—Nada mal, joven Bakugou. Sin duda tiene un gran potencial.

Masaru observó como ambos alfas peleaban y se llenó de orgullo al observar la fuerza y perseverancia de su hijo.

"Sin duda Katsuki será un gran sucesor."

—Yo debo irme, os dejo solos.

El alfa se fue y los dejó solos, peleando entre ellos.

Bakugou se movía con gran agilidad y flexibilidad, se podía notar su fuerza y su determinación. No había la menor duda de que sería un gran alfa.

Y así, Shoto y Katsuki iniciarían sus formaciones hasta el día de su boda. Hasta entonces se verían en fechas especiales y se escribirían cartas, obligados por sus padres, para no perder el contacto.

***

Notas finales: ¡Hasta aquí por hoy!

¡Espero que os haya gustado!