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Habían pasado dos días desde que Jungkook me dejó tirado sobre el pasto sin importarle ni un poco el estado en el que me había dejado.

A decir verdad, no he ido a ver a mis hijos por lo mismo, ya que no quiero que vean los innumerables golpes que tengo en el rostro y el cuerpo, tampoco quiero que Suga y Jimin comiencen a cuestionarme el por que dejé que esto pasará o lo más importante, que supieran quien lo hizo.

Saque la excusa de que estaba un poco enfermo y no quería contagiar a los niños, era obvio que Suga no me iba a creer pero le di mi palabra que así lo era.

No sé cómo lo logré, pero al menos intente convencerlos de que estaba bien y que no me pasaba nada.

Tampoco había ido al bufete, no quiero que nadie se dé cuenta de cómo me dejó el estúpido de Jungkook.

Preferí quedarme estos días en casa para poder reposar un poco y recuperarme de todo esto.
Me duele mucho mi cuerpo, casi no puedo levantarme, la mayoría del tiempo me la pasó tirado en la cama, solo me levanto con algo de dificultad para ir a comer.

Me gustaría que este infierno a lado de Jungkook se terminará, he pagado caro mi gran error de querer ser feliz con alguien más.

Nunca creí que llegara a pasar toda esta situación.
Si lo hubiera imaginado... Ni siquiera hubiera permitido que se acercara a mí.

Deje pasar unos días más mientras que los golpes se desvanecían de mi rostro, hoy sería mi último día descansando.

Desde ese día que me golpeó Jungkook, no hemos hablado para nada, cuando se que está apunto de llegar, me encierro en mi habitación hasta el otro día.

Hay veces en las que quiere tumbar la puerta para dejarlo pasar, pero aún así le he negado el acceso al entrar.

Aún era temprano cuando baje a la cocina para prepararme algo para comer, hace horas que no pruebo algún alimento.

Invertí un poco de jugo de manzana sobre el vaso, y lo bebí de un solo trago.
Pensé en hacer unos sándwiches pero alguien tocó el timbre de la puerta y salí abrir.

Mi sorpresa fue grande al verlo ahí parado.

-Jimin... ¿Qué haces aquí? - mi corazón latió muy fuerte y a toda prisa al ver que se había dado cuenta de los golpes que tenía.

-¿Qué demonios te paso Taehyung? - se acercó a mí preocupado - ¿Quien te hizo esto?

-¡Auch! Me duele - retire su mano de mi rostro.

-Claro que te va a doler, mírate cómo estás - comenzó a examinar me de pies a cabeza - ¿Quién te hizo esto? - preguntó enojado.

-Nadie... No fue nadie.

Dejé que pasará y fui a sentarme en el sofá.

-No te creo, así que dime quién fue... ¿Fue Jungkook? - estaba asustado por la respuesta - ¿Fue él?

-N-No.

-Ahora entiendo el por qué Suga estaba preocupado por ti, él mismo iba a venir a verte, para ver si era verdad lo que nos habías dicho, nunca te creyó que estuvieras enfermo y que no quisieras ver a los niños por no querer "contagiar los" - hizo comillas con los dedos - yo mismo le dije que se tranquilizara, le dije que vendría a verte para asegurarme que todo estuviera bien contigo, pero ya veo que esto está empeorando.

-Jimin, Jungkook no fue...

-¿No? ¿Entonces quien? Cuando Suga se entere de esto, va a matar a Jungkook.

Me puse muy nervioso al imaginar que Jungkook pueda lastimar a mi hermano, tenía miedo, tenía mucho miedo.

-¡No! - grité - Suga no se debe de enterar de esto, Jimin te prometo que él no fue, no fue Jungkook - mis ojos se cristalizaron.

Sólo Contigo (TAEJIN/JINTAE) #2Donde viven las historias. Descúbrelo ahora