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Con el paso de los días, los nervios en Jin iban aumentando demasiado.

Cada noche se le hacia eterna al imaginar cómo sería ver de nuevo a su familia.

Estaba desesperado por verlos, por conocerlos una vez más.

Era nuevo todo esto para él, lo poco que recordaba, no era algo importante que le hablará sobre su vida.

Pero tenía esa esperanza a que todo se volvería mejor en el instante en que este con su nueva familia, su única y verdadera familia.

Había fecha y hora para encontrarse con uno de ellos, y ese día había llegado.

Era exactamente hoy.

Se levantó muy temprano, y levantó el pequeño desastre que tenía en su habitación.

Tomó el desayuno junto a Namjoon el cual no sabía nada sobre su reunión con Suga.

-¿Estaras todo el día aquí cierto? - preguntó intentando encontrar su mirada.

-Tu no me dejas salir de aquí, ¿Como es que quieres que salga?
No conozco a nadie y dices que es muy peligroso para mi - respondió de una manera muy seca.

-Bueno sabes que es por tu bien, solo intento cuidarte.

-Si lo se.

-Bueno entonces te veo en la noche - tomó su portafolio y salió de casa.

Jin al ver que el doctor había desaparecido de casa, corrió hacia el baño de su habitación y se dio una ducha rápida para llegar justo a tiempo con Suga.

Después de unos minutos, salió con una toalla rodeando su cintura, buscó ropa en su armario y se la colocó.

Solo faltaban diez minutos para llegar.

Tomó su celular y salió de casa, camino solo unas cuantas cuadras para encontrar de inmediato el auto de Suga.

-Hola Suga - sonrió al verlo.

-Jin ¿Estas listo? - le sonrió de vuelta.

-Me estoy muriendo de los nervios. En toda la noche no pude dormir.

-Ya lo note - soltó una risa.

-Bueno a decir verdad desde que te dije que ya quería verlos... Las noches y los días se me hacen demasiado eternos, ya no puedo esperar más.

-Lo entiendo, es muy comprensible que te pongas así.

-Si...

Observo como su respiración se hacía más acelerada.

-Entonces... ¿Nos vamos? - no pudo evitar sonreír.

-Vámonos.

Ambos subieron al coche y se pusieron en marcha a la casa de Suga.

««»»

Jimin se movía de aquí para allá dentro de la cocina, tomando, guardando, lavando, secando algún diferente plato.

—Jimin ¿Quieres que te ayude en algo? — J-Hope se acercó al umbral de la puerta.

Parecía que Jimin tenía todo bajo control, parecía, porque no pudo evitar no ver cómo la olla sacaba humo, el cómo la sartén la llama subía de golpe en ocasiones, y pequeñas manchas de algún ingrediente estaba en la mejilla del pequeño cocinero.

—No... —Intento sonar seguro, pero la desesperación y las ganas de llorar hicieron que su voz flaqueara.

—Limpia tú cara Jimin, te ayudaré.

Sólo Contigo (TAEJIN/JINTAE) #2Donde viven las historias. Descúbrelo ahora