GIVE Me A MOMENT

Clandestino II

¿Este va a ser mí fin? ¿Hasta aquí llegue? ¿Así voy a morir? Son algunas de las preguntas que rondaban por mí mente.

Uno de los autos se aleja de mí para poder llegar bien a la curva que está frente a nosotros. Instintivamente agarro el freno de mano y giro el volante a tope para colocar el auto de costado y así no recibir el impacto de frente.

El auto choca, el golpe que recibió la pared está del lado del acompañante. Me siento aturdido, mí cabeza arde de un costado y duele terriblemente todo mí cuerpo.

Estoy vivo.

Miró los autos pasar a mí lado.

Esto no va a quedarse asi, no acepto perder.

Enciendo como puedo el auto luego de tres intentos fallidos, me pongo nuevamente en movimiento. Y veo mentalmente el camino que debo realizar. Si me dirijo por las calles correspondientes no ganaré... definitivamente voy a buscar unas calles alternativas.

Hago marcha atrás con el destrozado vehículo y tomo otra avenida a mí izquierda. Si mis cálculos no se equivocan debería de llegar al menos a alcanzar el segundo lugar rogando que no esté tan transitado a esta horas...

Joder.

Los autos se acumulan en los semáforos en rojo, las personas caminan tranquilamente por las calles y yo desesperado no puedo demorarme. Toco bocina como si no hubiera un mañana, la gente corre evitando mí auto. Se escuchan algunas ruedas quemar en el pavimento al momento de frenar para evitar una colisión.

Sigo con mí objetivo, estoy cerca.

Solo una cuadra, solo eso me falta. Veo los demás competidores acercarse a mí.

Vamos, vamos...

Pongo otro cambio y presiono el acelerador a fondo.

Casi, ya casi...

Gritos, los gritos de la multitud acercándose hacia mí me hace caer en cuenta que gané. Salgo del auto un poco mareado, mí cabeza sangra por el impacto pero ignoro el dolor por el momento.

- Valla Suga, jamás conocí alguien con tan poco interés en su propio bienestar por unos miles...
- Si, si, dame el dinero, no tengo tiempo.
- De acuerdo tranquilo... Aquí está tu dinero, disfrútalo...

Doy media vuelta y me voy.
En el camino sentía mí dolor aparecer y los mareos no se quedaban atrás...
Llegué a casa y no me molesté en guardar el auto en el garaje y me adentré en la sala. Me dirigí al baño en busca de mí botiquín.

Curé mis heridas, tomé unos calmantes para los dolores y me metí a darme un baño para relajar mí cuerpo junto a una lata de cerveza bien fría para hacerme compañía.

- Hyung...

Debo admitir que no me asusté, sino más bien me lo veía venir...

- Jungkook... ¿No es muy tarde para ti estar tan tarde fuera de casa? (Sonreí de lado mientras abría mí lata)
- Hyung que sea menor no significa que sea un niño. Sabes que no tengo a quién rendirle cuentas de lo que hago o no.
- Cierto, cierto, pero aún así ¿Qué haces en mí hogar?
- Necesito preguntarte algo... Hay una chica que conozco y...
- Sabes que no es bueno JK que nos involucremos con alguien de manera sería. Recuerda quiénes somos y qué hacemos...
- ¡Lo sé!... Lo sé solo que como te vi muy preocupado por t/n pensé que tal vez eso podría cambiar un poco las...
- Dos cosas, primero sabes muy bien que a mí nadie me levanta la voz y tu no serás la excepción, segundo no te confundas JK, a mí no me interesa nadie al menos que sea para divertirme y pasar el rato. No te ilusiones por todo lo que ves... Deberías aprender de nosotros un poco más...
- Perdón Hyung pero creo que no podemos ser toda la vida así. Mejor me voy...
- Sabes donde está la puerta.

Me molestó el comportamiento de Jungkook, ¿acaso piensa en enamorarse?. Nadie tiene ese "alguien especial", sabemos las reglas, podrían convertirse en nuestro punto débil y eso es inaceptable. Sólo son distracciones que te mantienen con la cabeza en otro lado en vez del trabajo.
Suena mí móvil.

"Desconocido"

Mañana será el día en que me deshaga de esta molestia de una buena vez. Ya está todo listo y yo estoy impaciente.

............

Despierto gracias a la luz del sol que entra por mí ventana y golpea en mí rostro. Hoy no iría a la Universidad ya que tenía cosas más importantes, aunque para mí cualquier cosa puede ser más importante que esa estupidez que solo me provoca ganas de volarme la cabeza.

Llamo a RM.
- Suga ya estamos listos. Tae va con Jimin camino a buscarte, no deben tardar.

Cuelgo la llamada, no hay necesidad de hablar cuando ya respondieron a mí pregunta.

Me levanto pesadamente de mí cama y me dirijo al baño para asearme y estar listo. Elijo unos pantalones negros rotos en las rodillas, una remera negra y por qué no una camisa blanca para la ocasión especial a la que voy a asistir, tomo mí chaqueta, mis guantes y me dirijo a sacar mí bolso debajo de mí cama.

- Hola amigo. ¿Me extrañaste?

Le pregunto a mí bolso. Al correr su cierre lentamente siento escalofríos subir por mí columna.

Amo esto.

Al abrirlo mis ojos brillan, me reciben con una cálida bienvenida mis amigas, mis armas, todas ansiosas por estar en mis manos y yo por tenerlas. Tomo dos por las dudas. Las reviso que estén cargadas, las limpio antes del show y las guardo en mí espalda debajo de mí chaqueta.

Suena un claxon. Jimin y Taehyung ya están abajo.

Guardo mí bolso en su lugar con todo el amor que tengo y me encamino hacia las escaleras para bajar hacia donde me esperan.

- Guau Hyung estás muy guapo hoy. ¿Ocasión especial?
Solo me bastó sonreír de lado para que Jimin entendiera mí respuesta.
- Vamos a divertirnos entonces.