Peter corría por las frías calles de Queens con una gran paquete de libros en mano. El otoño anunciaba su llegada y el chico se ocultaba bajo uno de sus viejos hoodies. Su destino era la universidad que por suerte no estaba lejos.
No sé sentía mal por haber abandonado a Tony en aquella habitación de hotel, de hecho consideraba más cómodo el hecho de no verle la cara sobrio. Había comprendido las palabras del hombre la noche anterior, sus dudas habían sido disueltas. Pero no le borraban el dolor ni recuperaban su confianza. Además tenía obligaciones que cumplir más importantes que pasar la mañana entre sabanas de un lujoso hotel.
—¡Osborn!— gritó el joven chico al entrar al campus. Harry se giró y lo saludó con la misma efusión
—Me enteré de tu fiesta de ayer Parker, y no fui invitado.
—Tú dijiste que no te dejan ir a esas fiestas— objetó caminando hacia el aula.
—Pues ya no más, mi padre me ha dado permiso de ir a cualquier lado si es contigo, y sigue insistiendo con la invitación, dice que puedes invitar a May, en verdad quiere conocer al alumno más destacado de la generación.
—claro, el alumno destacado de la generación que tiene que ir un domingo en la mañana a recuperar clases.
—Almenos tú recuperas clases porque trabajas, yo me quedo dormido, no tengo excusa, y sobre tu trabajo, la empresa de mi padre podría financiar tu carrera, siempre otorgan "becas" que después los estudiantes pagan con un año de servicio en la compañía Osborn.
—Yo no sé nada sobre biotecnología y modificación del ADN— recordó Peter— no encajo en tu compañía familiar, además, te repito que mis prototipos y proyectos no están en venta. Están patentados a mi nombre y si un día quiero hacerlos crecer, creeme que podré hacerlo solo, tengo manos, el límite es la luna.
—Bien, le diré que no insista con la compra, pero tienes que venir a comer el lunes. Haré una cena deliciosa.
—De acuerdo, iré, tengo ganas de conocer al papá sobreprotector.
Harry fingió darle un golpe en el hombro al muchacho y se pusieron en marcha hacia el aula de clases.
Tres tortuosas horas después Peter se encontraba llamando por teléfono a una Kendall furiosa que le gritaba.
—¡No contestabas mis llamadas! ¡Me preocupé mucho! ¿Qué le iba a decir a May?
—Ya sé — murmuró culpable —Perdón, pero sabía que iban a estar bien, y tenía un asunto con Anthony, pero no volverá a pasar. Para agradecerte por ser tan buena amiga ¿Te parece si te invito a comer?
—Bien, solo porque necesito que me cuentes cómo te cogiste a Stark —la chica colgó el teléfono entre risas después de soltar la frase.
—Yo no...
El chico sonrió con diversión por su amiga, sólo ella sabía todo lo que se había imaginado.
Cuando salió de los jardines del campus, Peter alzó la vista, contuvo el aliento unos segundos, el famoso Lamborghini Veneno de Anthony se encontraba estacionado frente a él, y Stark no parecía divertido.
Peter se acercó a él, intimidado pero seguro.
—Hola Tony— saludó nervioso
—Te busqué toda la maldita mañana— respondió con voz demasiado neutra como para saber si sólo estaba soltando un dato curioso, o estaba genuinamente enfadado.
—¿Porqué?
—Desperté y ya no estabas ¿Tienes idea de todo lo que cruzó por mi cabeza?— el tono de furia comenzaba a mostrarse en su voz
—Nunca dije que me quedaría.
—Bueno, esperaba poder verte por la mañana
—Tengo clases, no voy a detener mi vida por ti Anthony
—Podía traerte a la universidad— contraatacó
—Tengo piernas y sé caminar, no te necesito para movilizarme.— respondió orgulloso
—Deja esta maldita actitud de una vez Peter
—¿Qué actitud?
—Estás intentando probar que no me necesitas.
Peter suspiró
—No es una actitud, es una realidad Anthony, la verdad es que no te necesito.
Stark tomó con rudeza al chico de la cintura y lo pegó a su cuerpo, lo besó de manera apasionada, sosténiendo su rostro con una mano.
De manera salvaje aquel Tony furioso que sólo había visto golpeando a alguien ahora lo besaba con la misma intensidad. No era el Tony tierno y cuidadoso, este era más salvaje y bárbaro, demandante en sus caricias.—Repiteme que no me necesitas— murmuró el mayor con voz ronca y profunda separándo sus labios un poco, sosténiendo al joven con la misma decisión —Repitelo— retó
—Tony— suspiró el menor. Ahora se sentía hecho de goma, derritiendose entre sus dedos, amoldandose a su cuerpo, siendo invadido por la violencia de su presencia.
El mayor le sonrió con mirada depredadora, satisfecho con su nombre anhelante que se había escapado de los labios de su niño. Con una sola mano abrio su vehículo y con agilidad acrobática posicionó al joven sobre el asiento.
El mayor subió en el área del piloto, se inclinó sobre Peter y le ató el cinturón de seguridad al momento que depositaba un corto beso sobre los labios del chico y dejaba una mordida sobre ellos provocando que el rojizo color se amotinara. Comenzó a conducir hacia el sur de la ciudad, dirección contraria a la casa del joven.
El olor a Anthony lo envolvía, lo embriagaba, lo hacia pensar sin coherencia, el sabor a menta y alcohol en su boca lo dejaba deseando más.
Anthony llevó al joven a lo que parecía una casa en un área privilegiada. Un gran muro limitaba lo que parecía un gran terreno, y la reja negra se abrió cuando Anthony presionó un botón. Descubrió que el muro resguardaba metros y metros de un jardín recién cortado con arbustos redondeados y podados. En el centro se alzaba una casa que presumía ser de tres pisos con grandes ventanales.
Parecía sacado de una revista de celebridades. El mayor se estacionó frente a la puerta y salió para después ayudar al joven.
El mayor lo tomó de la espalda y lo incitó a entrar a la propiedad. Los muebles parecían nuevos y especialmente seleccionados para que combinaran con el estilo de toda la casa.
Anthony tomó al chico de la cintura y lo cargó para sentarlo sobre la mesa. Le separó las piernas y se posicionó entre ellas.
—Necesito saber si quieres esto tanto como yo— murmuró el hombre deteniendo su actuar. Peter asintió con la cabeza con respiración agitada. —No, tienes que decirlo.
La boca del joven se le secó, el silencio se hizo presente.
—Follame Tony— pidió anhelante
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Azúcar En El Infierno (STARKER)
FanfictionPeter quiere entrar a la universidad, pero no tiene dinero suficiente para ello. Tony es millonario, y las bases de cada uno de sus centavos fueron construidas con sangre. Tony se convierte en el mentor de Peter y paga su universidad por sus propias...