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—Confía en mi— respondió Anthony

—No es suficiente— argumentó el menor— Tienes que decirlo, que me quieres en tu vida

—No puedo decirlo sin ganarme el infierno— admitió con vista fija en el camino, sus ojos ocultaban su dolor— Mí vida no es buena Peter, quererte en ella no me hace buena persona

—¿Entonces no me quieres?

—Te quiero, pero me gustaría tener otra piel, ser otra persona para poder ofrecerte algo. Cambiar de vida... Porque para ser sinceros el mundo no me quiere, nunca me quizo... Y quererte conmigo es condenarte a ello.

—Eres digno de ser amado en esta vida Tony, en la vida que ya tienes. No necesitas cambiar nada.

—¿Y si te dijera que soy el culpable de todas tus desgracias?— el pecho de Anthony quemó como los mil infiernos. El nombre de Richard Parker gritando en su cabeza, el disparo, la violenta manera en que dejó viuda a su esposa y sin padre a Peter.

—Diría que estás exagerando, y que soy más fuerte de lo que crees. Antes te quise porque me habías salvado de la miseria, te presentaste ante mí como un héroe y fue inevitable caer por ti... Pero ahora que mi futuro universitario no depende de ti, te quiero porque me abriste los ojos en Nueva York, expandiste mis horizontes, confíaste en mis capacidades y mi cerebro como nunca nadie lo había hecho. Te quiero por tus ideales que te llevaron a Stark Industries; hacer del mundo un lugar mejor, lo mismo que yo persigo. Te quiero porque eres una buena persona, un buen hombre, una mente brillante.

—No te merezco— susurró acercándose a la casa de Peter, estacionandose a unos metros— Hice algo horrible

—Cuéntame qué te atormenta tanto— Peter se desabrochó el cinturón de seguridad y se inclinó hacia Tony para verlo fijamente, el mayor tenía los ojos rojos, llenos de furia, impotencia y dolor — Dejame conocerte Tony

—Te lo contaré— aceptó el mayor— si aceptas quedarte conmigo este fin de semana, sin huir por la mañana.

Peter sonrió —Hecho, entonces estamos en contacto... Señor Stark.

Peter se inclinó hacia el hombre para besarlo y después se separó, saliendo del auto en dirección a su casa.

Kendall lo esperaba en su interior, apenas lo vió entrar, la joven se levantó del sofá, lo tomó del brazo y lo hizo salir.

—Maldita rata sucia, hueles a sexo y motel, tienes que contarmelo todo ahora.— exigió la fémina.

—No huelo a nada Kendall, no sé de qué hablas— la chica detuvo el paso y lo vió fijamente con ganas de matarlo— Bien, quizás huelo a sexo, pero no a motel

—¡Lo sabía!— gritó en plena calle triunfante parando un taxi para ir a comer — Cuéntamelo todo

—Yo... Creo que ahora si estamos saliendo

—Santo señor Zeus, te dejo solo doce horas después de tomarte dos margaritas y sales con nueva relación

—Él me explicó lo que pasó

El joven le contó lo ocurrido después de que Anthony golpeó al hombre, la manera en que el mayor había reconocido sus sentimientos hacia Peter y lo mucho que lo quería cuidar.

—Entraste en depresión Peter, no sé como se lo perdonaste así como así

—Para ser justos, yo realmente tampoco lo quería como tiene que ser, es decir, siento que me había enamorado de su cartera, de la estabilidad que me había ofrecido y de lo mucho que lo admiraba.

—¿Y ahora lo quieres porque es un bonito ser de buenos sentimientos?— se mofó la fémina indignada

—No— reconoció — Porque ahora que ya no tiene la gran empresa de la vida, que aquí en Queens no es una celebridad, ahora que no me paga nada ni tiene poder sobre mi futuro... Mi corazón sigue latiendo con fuerza por él. Es una buena persona, lo sé, pero aún si no lo fuera... Él siempre encuentra la forma de salvarme cuando más lo necesito, es el único camino que quiero tomar... Kendall, cuando él me toca, se siente como si fuera lo correcto, como si estuviera en casa.

La chica lo veía con amor, acarició su mejilla y le dedicó una media sonrisa.

—May se va a volver loca, pero si realmente lo quieres y te hace bien... Te apoyo, y si un día te hace daño, yo puedo apuñalarlo por la espalda mientras tú lo abrazas.

Peter sonrió con auténtica felicidad, parecía que por fin encontraba su camino, como si las piezas del rompecabezas por fin estuvieran tomando sentido.

—Es una lástima que te tengas que ir hoy Ken

—Lo sé, pero no me extrañarás mucho, con todo el asunto Stark y May vas a estar suficientemente ocupado.

—¿Crees que May me sepulte cuando se entere?

—A ti no, pero a Anthony... No lo dudes.


...

Del otro lado de la ciudad en una de las casas más ricas de la zona se encontraba Harry Osborn y su padre Norman

—¿Aceptó la cena?— preguntó el hombre viendo a su hijo entrar al despacho

—Sí, va a traer a su tía, pero no quiere saber nada sobre comprar sus prototipos, si quieres que confíe en nosotros intenta no tocar el tema

—Me parece bien, le avisaré a Jake que todo va de acuerdo al plan. ¿Peter está usando el GPS que le regalaste?

—¿El reloj? No, le recordaré que lo use cuando lo vea.

—Procura que no se lo quite, podría arruinar todo, y sabes las consecuencias.

Harry vió de reojo una fotografía de su difunta madre, suspiró.

—Lo sé, esta vez no habrá ningún error.










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Bebés, les dejé una canción en galería 🙆🏻‍♀️🧡🙆🏻‍♀️ gracias por todo el apoyo que estoy teniendo, que sepan que siempre las leo, y veo quienes votan. Ninguna pasa desapercibida, gracias por tanto bebés, llenan mi día de luz.

(y gracias a los 2 chicos que me leen también, que los vigilo y estoy eternamente agradecida también con ustedes)

Azúcar En El Infierno (STARKER)Donde viven las historias. Descúbrelo ahora