[CapítuloCatorce]

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[ R U B É N ]

Íbamos en un camión, o de ello estaba casi seguro pues solo escuchaba un fuerte motor pero no veía nada. Por leves intermedios de luz vi que a mis lados estaban Abraham y Mangel, aun amarrados y con cinta en la boca al igual que yo y en frente de los tres estaba Jane en el suelo con las manos atadas a su espalda, en el suelo y con una gran herida que sangraba en su cabeza.

Nos habían tomado desprevenidos, no medí las consecuencias y debí imaginarme que alguna otra banda que quería a Jane nos iba a estar esperando en Suecia mas aun cuando Richard, el padre de Jane estaba ofreciendo millones por ella. Pero no seria una banda que quisiera rescatarla, podrían violarla, venderla e incluso matarla. Richard cometió muchos errores en el pasado y Jane estaba pagando por ello sin saberlo.

El viaje fue demasiado largo y cansado, no podíamos ni siquiera movernos sin sentir un cañón de pistola en la cabeza y durante todo el trayecto, Jane no despertó. Nos bajaron del camión con golpes, a mi me llevaron por aparte junto con Jane y a los muchachos no tenia ni la menor idea de donde los habían llevado.

Entramos a una habitación vacia y a ambos nos amarraron a una silla. Mientras la amarraban a ella vi que tenia sangre saca en la cien izquierda producto del golpe que le dieron con la cacha del arma, también le pusieron cinta en la boca y se largaron sin decir nada.

Salte en la silla con intención de despertarla, de quitarme la soga o hacer algo pero me sentía muy débil después de la golpiza que me habían dado al salir del auto en el que íbamos.

Pasaron aproximadamente treinta minutos y vi con alegría inexplicable que Jane comenzaba a despertar, levanto su cabeza lentamente y me miro con el ceño fruncido, giro a ambos lados viendo los nudos al rededor de la silla y entro en pánico, empezó a saltar y a gritar por debajo de la cinta.

Aquello alerto a los tipos que nos tenían aquí y uno que parecía tener bastante dinero y parecía ser el líder de los demás se acerco a Jane para acariciarla el cabello.

- Tranquila, no tienes por que asustarte, esto no durara mucho tiempo - le dijo y Jane lo miro mal. El tipo se dirigió a mi con una expresión de falsa modestia -. Que bella es ¿verdad? ¿Cuándo has visto que una hija de un presidente sea tan guapa? Lo que le hiciste en el cabello no me ha gustado para nada pero no se puede dejar pasar esa hermosa cara llena de pecas ¿eh? - lo mire mal, tal cual había hecho Jane.

Conocía a este tipo, se llamaba Matt y manejaba una casa de pique, donde desmembraba sujetos y vendía sus partes. Era un sádico total además de narco y extorsionista. Estoy casi seguro de que también tuvo negocios con Richard.

- Rubén Doblas - pronuncio mi nombre con odio, tal vez -, todo un hijo de puta pero muy bueno en lo que hace ¿sabes cuanto tarde en encontrarte? Sabia muy bien que tenias a esta chiquilla y te agradezco que seas tan imbécil como para dejar un poco tus huellas, lastima que la policía es peor que tu de idiota y no se ha dado cuenta pero venga, hay que celebrar tu audacia... - volvió a acercarse a Jane, se arrodillo ante ella y su mano se posos descaradamente en su muslo subiendo por el hasta casi llegar a su zona intima, Jane grito y se sacudió con asco y yo alegue algo para que la dejara pero ni siquiera yo me escuchaba -. Voy a preguntarte una cosa, Rubén y quiero que me respondas con toda la sinceridad posible... - sonrió y se puso en pie -. ¿A donde ibas a llevar a Jane?

El tipo que estaba a mi lado me quito la cinta con fuerza y chille de dolor.

- No pienso decirte nada, cabron - dije.

Este soltó una pequeña risita y miro de nuevo a Jane, le tomo la nariz entre el pulgar y el índice dejándola sin aire.

- ¿De verdad no vas a decirme? Asumiré que quieres a Jane muerta...

Cautiverio [✓]Donde viven las historias. Descúbrelo ahora