Tu corazón latía acelerado al verla, su cabello rubio atrapado en una coleta alta para que no le incomodara en su pelea con Percy.
La conoces de años, fuiste la primera mestiza que trajo al campamento y fueron las mejores amigas desde entonces.
Para tu mala suerte.
No la querías de la misma manera que ella lo hacía, no solo quieres ser su amiga, quieres besar sus labios.
Ser su novia.
Pero ella ya tenía a Percy y eso te dolía.
Annabeth termina de entrenar y se dirige a las gradas al verte esperándola - Hey - Saluda casual, un poco sorprendida porque desde hace semanas parecía que la estabas evitando.
Tenías un motivo.
- Hola - Murmuras, tronando los nudillos de tu mano al estar nerviosa. Exhalas, sabiendo que si alargas el asunto no podrás hacer lo que planeas - Yo venía a despedirme, este es mi último verano en el campamento.
La expresión de Annie decae, la rubia trata de disimular su tristeza - Oh, esta bien, puedo visitarte el resto del año.
- No, no puedes - La cortas - Me voy del país.
Y ambas sabían que su amistad terminaba ahí, al ser semidiosas no podían comunicarse como cualquier mortal normal lo haría.
