Temblabas de los nervios. Hoy era el gran día, tu boda, y la otra novia aún no llegaba.
- ¿Por que se demora tanto? - Preguntas entre dientes.
La ceremonia era en el Campamento Mestizo, el lugar donde se conocieron y el único lugar donde un grupo grande de semidioses pueden estar sin ser atacados, algunos campistas te miraban con pena, pensando que Thalia no se iba a presentar.
Empezabas a creer eso.
- Tranquila, ya llegará - Leo, tu hermano, te asegura.
Artemisa y Apolo serían los dioses que oficializarian la boda, Artemisa por obvias razones y Apolo porqué se metió - Ya se esta haciendo tarde - Apolo murmura, siendo golpeado después por su hermana.
- Esto es una mierda - Querías llorar, no podías creer que Thalia te estaba haciendo esto. Si estaba insegura con la boda pudo haberte dicho y lo comprenderías, hubieran hablado y lo solucionarían.
Tu hermano te abraza, reconfortandote- ¿Quieres que espante a los invitados?.
Ibas a aceptar pero una voz te corta.
- ¡Un momento! ¡Thalia ya vino! - Una agitada Annabeth aparece, su cabello era un desastre y traía su espada en sus manos.
La rubia toma su lugar como dama de honor, apoyándose en la columna para tomar aire.
El lugar queda en completo silencio, nadie sabía que pasaba, Anabeth resopla y hace una seña a la cabaña de Apolo para que iniciaran con la música.
Unos minutos después aparece Thalia, su cara estaba roja por la agitación y la falda de su vestido de novia totalmente rasgado; esta acompañada de un adulto Jason que estaba en su misma condición.
- Lo siento mucho - Susurra cuando por fin estaba frente a ti, el pecho de Thalia se aprieta cuando nota las lágrimas al borde de tu rostro - Cariño, no era mi intención llegar tarde.
- ¿Que pasó? - Susurras de vuelta. Artemisa y Apolo inician con la ceremonia pero eso quedaba en segundo plano.
Thalia suspira, quitandote sutilmente las lágrimas - Tuvimos algunos problemas al venir, unos monstruos se metieron en nuestro camino - Dice señalando con su cabeza el aspecto de Annabeth y Jason - En todo ese momento solo podía pensar en ti y en llegar a tiempo, de verdad lo siento por no cumplirlo.
Apolo se aclara su garganta, llamandoles la atención - Señoritas este es mi momento, pueden hablar después en su luna de miel.
