Capítulo 23

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Realidad

Viernes, 14 de septiembre.

Taeyong tecleaba con fuerza sobre su computador. Sicheng a su lado lo miraba, al igual que Mark y Donghyuck. Estaban en la cafetería de la empresa, en la hora de almuerzo, pero el mayor ni siquiera lo había tocado porque desde que tomó asiento no había dejado de teclear cosas en su laptop.

Sicheng no entendía que sucedía porque Taeyong había dejado de hablar con él, de hecho, eran simples saludos, ya ni siquiera se ofrecía llevarlo a casa. Yuta vagamente le había comentado algo que Yoonoh le había dicho, pero él tampoco sabía a gran profundidad que era lo que sucedía.

—Hyung —llamó Mark mirando a Taeyong con el ceño fruncido. —¿No tienes hambre? No has comido nada. Estás todo el día trabajando. Estamos a viernes y estoy comenzando a preocuparme porque lo único que haces es hacer diseños para el proyecto...

—Ese es mi trabajo, ¿no? —dijo sin apartar la mirada de la pantalla. De repente el celular de los 3 presentes sonó sobre la mesa, todos tomándolos al mismo tiempo.

—¿Qué...? —comenzó Donghyuck, pero Sicheng se volteó a su amigo con el ceño más que fruncido.

—¿Qué carajos significa este correo que nos mandaste, Taeyong?

—Ah, les llegó —dijo cerrando el laptop y tronando su cuello. —Es la invitación para mi boda. Será algo íntimo y solo estarán algunos familiares y amigos. Ustedes están invitados, es el viernes de la próxima semana —se levantó del asiento una vez guardado el aparato en su maletín. —Iré a avanzar con el diseño que John Seo me pidió que mejorara.

—¿Taeyong? —Sicheng volvió a repetir caminando detrás de él porque no entendía cómo es que de la noche a la mañana todo había cambiado.

—Estás invitado, tu pareja también está invitada —dijo caminando sin siquiera girarse. Eso hizo que el chino se sintiera cabreado, así que tomó su brazo fuertemente y lo arrinconó en una esquina.

—Explícame qué demonios está pasando —demandó con el tono de voz firme, mas Taeyong ni siquiera se inmutó, de hecho, lo miró fijamente a los ojos, como si quisiera desafiarlo.

—Es lo correcto. Dongsun es mi novio con el que me iba a casar —dijo lentamente cada palabra. —Yoonoh fue un error. Todo lo que sucedió con él fue un jodido error. Dongsun es todo lo que está bien, si hago las cosas con él todo está bien, está correcto.

—Todo está correcto, ¿pero y tus sentimientos? —alzó un poco la voz queriendo que su amigo entrara en razón. —Piensa en ti, por favor. A ti te gusta Yoonoh, joder, te enamoraste de él.

—Amo a Dongsun.

—Lo amas, pero te enamoraste de Yoonoh —dijo entrecerrando los ojos. —No cometas esta locura.

—¿Y qué debería hacer? —entonces Taeyong se rompió, luego de casi 5 días sin mostrar emociones él se rompió completamente. Las lágrimas comenzaron a caer y se aferró con los puños en la camisa de Sicheng. —¿Qué tengo que hacer? Tiene novia, tiene un hijo. ¿Crees que podré sobrellevar mi conciencia sabiendo que destruí una familia? Yo no soy así, Sicheng.

—Pero estás sufriendo tú... —Sicheng suspiró con pesar, acariciando la cabeza de su amigo.

—M-me enamoré una vez de Dongsun —tartamudeó mientras soltaba hipidos. —Puedo volver a hacerlo. Él es mi novio y si tengo que casarme, lo haré. Puedo volver a enamorarme... 

—Estás destruyéndote.

Taeyong se mantuvo en silencio con las lágrimas corriendo por sus mejillas mientras era abrazado por su amigo. No lo entendía, ¿cómo es que el corazón no se rompía? Él sentía que se le estaba cayendo a pedazos, porque, aunque no quisiera admitirlo, él estaba bastante consciente de que se había enamorado y estaba jodido, porque la vida no era como él decidiera.

Catarsis ↬ Jaeyong ; Yuwin ; Markhyuck [NCT]Donde viven las historias. Descúbrelo ahora