– Nathalia Romero Paz, baja de inmediato– dijo mi mamá al entrar a casa.
¿Ahora que hice? ¿Me regañan por hacer tarea? Porque si es así está bien, no me gusta hacer tarea.
Recordé todo lo que había hecho mal en días pasados mientras bajaba las escaleras.
Si manchar el mantel de mamá con un poco de salsa era para que me regañara así, creo que ella está un poco loca.
–Hola mamá, yo también te extrañe– dije en tono burlón.
Algunos pensarían que le estoy hechando leña al fuego, pero mis papás son el doble de bromistas.
–¿Que significan estas calificaciones?– dijo en un tono serio, lo cual no era propio de ella.
–¿Un ocho en la mayoría de las materias y diez cerrado en la clase de artes?– pregunté inocente– creí que eran las calificaciones que tú me pedías mamá.
No respondió, comencé a preocuparme, y es que en verdad me había esforzado mucho para poder entrar a la escuela de artes.
–A mi parecer son muy buenas calificaciones mamá– dije.
–¿Crees que ocho y diez son buenas?– siguió con una cara de pocos amigos.
–Si– ¿Que le pasa a esta mujer? Esas calificaciones son buenísimas.
–Estas equivocada– dijo– son perfectas Nath, estoy muy orgullosa de ti mi niña, sé que te esforzaste muchísimo– dijo mientras me daba un fuerte abrazo, de esos que sólo mi mamá sabía dar– Espera a que las vea tu papá.
–¿No estás molesta?– pregunté confundida.
–¿Molesta? No mi niña, sólo quería averiguar si tú estabas conforme con tus calificaciones, y pude ver tu esfuerzo, ahora papi y yo haremos un esfuerzo extra para cumplir nuestra promesa– dijo mostrando su linda sonrisa.
Al ver la sonrisa de mamá pude comprobar que ella estaba orgullosa de mi, mi mamá, la mejor mujer del mundo entero, en verdad amo a mis padres.
–Vamos a preparar la cena Nathi, papá no tarda en llegar, tenemos que darle una sorpresa.
Fui con mamá a la cocina y preparamos un poco de ramen, aunque prefería la comida Mexicana, sabía que era un poco más tardada que los ramen instantáneos.
–Iré a darme un baño, no quiero oler a mariscos– dijo mamá mientras subía piso arriba.
Si, aquella mujer podía trabajar en lo que fuera pero impresión que daba siempre era buena gracia al cuidado personal que tenía. En especial ella siempre quería verse linda para papá, y viceversa.
–¡Llegue!– dijo papá quitándose las botas de hule que utilizaba en el trabajo.
–Papá– salte sobre el para abrazarlo.
–Hola linda– beso mi cabeza– olerás a pescado nena.
–No me importa papi, así crece mi hambre– dije y el soltó una carcajada.
–Eso es cierto, ¿Donde esta mamá?
–Fue a bañarse– dije mientras volvía a la sala de estar para ver televisión.
–Ya veo, voy a acompañarla, ya sabes que hacer nena– dijo con una gran sonrisa.
–Si papá, subir al volumen de la televisión, no subir y esperar hasta que ustedes bajen– dije.
–Esa es mi niña, no tardo, mamá dijo que tenían una sorpresa para mi.
–Si, te contaré en la cena– dije mirando la televisión. En específico mi programa favorito Los Simpson.
Papá subió sin hacer mucho ruido, la verdad no entendía porque al menos cuatro días a la semana me pedían que viera la televisión a un volumen alto y no subiera, en fin ya estaba acostumbrada a esa rutina.
Mis tripas tronaban, había pasado una hora desde que mi papá subió.
–¡Ya tengo hambre!– grite desde las escaleras.
Y como arte de magia ellos salieron de su habitación tomados de la mano con una sonrisa en sus rostros, como si hubieran ganado la lotería.
–Tranquila linda, ya estamos aquí, vamos a poner la mesa en lo que mami calienta la comida– dijo papá.
Ambos arreglamos el pequeño comedor y esperamos a que mamá sirviera los platos para pasarlos a la mesa.
Como todos los días agradecíamos por los alimentos y comenzábamos a comer, al principio había silencio, hasta que mamá lo rompió.
–Sabes amor, Nath saco muy buenas calificaciones– dijo llamando la atención de papá– creo que tenemos una promesa que cumplir– dijo tomándole la mano por encima de la mesa.
–¿Eso es cierto Nath?– me preguntó papá.
–Si, bueno, me esforcé mucho para sacar buenas calificaciones y ganarme una beca, la calificación mínima es ocho– dije un poco nerviosa.
–Ya veo– dijo y guardó silencio para después comenzar a hablar de nuevo– Pues como sabía que te esforzarías, mañana mismo iremos a Seúl para inscribirte.
–¿En serio papá?– pregunté emocionada.
–Si linda, hicimos una promesa y tenemos que cumplirla– dijo.
–Wow papá, esto es increíble ¡Gracias! No los voy a decepcionar.
–Tu nunca lo haces– me regalo una sonrisa.
La cena siguió entre risas, bromas y chistes por parte de los tres, al igual que la hora de limpiar la cocina, papá lavaba los traste, mamá limpiaba la cocina, y yo arreglaba el comedor.
Llegó mi parte favorita del día, la hora de dormir, ¿Porque era mi parte favorita? Pues era el momento en donde mis padres me demostraban en mayor cantidad el amor que me tenían.
Siempre cantaban la misma canción, que sin duda nunca me aburriría de ella.
Los tres la cantábamos, y en verdad me sentía segura cuando estaba con ellos.
ESTÁS LEYENDO
Utopia JJK. (LOVE BOOK III) [EN EDICIÓN]
Фанфикшн-Y si me preguntas, luego de todo lo que hemos pasado. "¿Aún crees en la magia?", pues si... yo creo. EN EDICIÓN :) Sin copias ni adaptaciones. Historia 100% mía. ✨ 02~04~2020 30~05~2021
![Utopia JJK. (LOVE BOOK III) [EN EDICIÓN]](https://img.wattpad.com/cover/193936751-64-k872485.jpg)