^ sesenta y uno ^

25 1 0
                                    



Este capítulo estará narrado
por Nath y JungKook









Mentiras, mentiras y más mentiras. ¿Algún día terminarían? Dudaba eso.

Nunca en mi vida había mentido tanto como ahora, desde hace más de un mes llevaba haciéndolo, con todo y por todo.

Sabía que algún día todo se descubrirían, sabia que algún día tenía que quitarme la máscara que había puesto sobre mi, pero tenía miedo, estaba asustada, no quería que llegara ese día porque me provocaba temor, pero aunque no quisiera sabía que estaba cerca, y lo sabía a la perfección, porque las fuerzas se me agotaban y las ganas cada vez eran menos, aquel día en donde tocará fondo, tal vez, pueda ser libre, libre de mi, de mis pensamientos, pero para ese entonces yo estaría rota.

Para ese día, yo podré dejarla ir.

–Nath, tu medicamento– anunció Kook dejando tres pastillas blancas junto a mi plato acompañado de un gran vaso de agua.

Los mire con detenimiento, como siempre y las lleve a mi boca, una, debajo de mi lengua, la segunda, iba para el mismo rumbo, y la tercera le hacía compañía a las demás, bebí un gran trago de agua para fingir que las había bebido, para completar la mentira. Le sonreí a JungKook.

Tome una servilleta de papel y la acerque a mi boca, mismo movimiento, saca las pastillas y empújalas hacia afuera, atrápalas con la servilleta.

–Gracias por la comida– me levante y tome mis trastes para pasar desapercibida.

–No es nada Nath, me gusta estar contigo– dijo Amber.

–Ya te veo un poco mejor– añadió Namjoon– Las... pastillas han estado funcionando.

Si supieran que en vez de ir a mi cuerpo van a la basura no pensarías lo mismo.

–Si, claro– seguí con la mentira– Ayudan bastante– aquello fue la cereza del pastel.

Ellos sonrieron gracias a mi supuesto "avance" incluso JungKook lucia más tranquilo. Nunca había pensado que el ser actriz me sería tan fácil, ya que mentir se me da muy bien, no es algo de lo que me sienta orgullosa.

Llegue a la cocina y puse los platos en el fregadero, después tiré las pastillas a la basura.

Es para no crear dependencia en ellas.

Lo repetía todo el tiempo, como una manera de convencerme de que no era bueno tomarlas, a pesar de saber que las necesitaba.







Los días pasaban, las mentiras crecían, y cada vez era menos yo. Llevaba más de 52 horas sin dormir, a pesar que las personas creyeran que estaba volviendo a ser yo, lo cierto es que cada vez me sentía más perdida y estaba muy lejos de encontrarme porque ni siquiera me estaba buscando.

Mire a YoonGi que estaba en el sillón individual, desde hace días lo había notado distraído y algo pensativo, no sé qué le pudiera estar pasando, pero el también tenía sus propios problemas, no todo giraba entorno a mi.

Alex, Taehyung y YoonGi habían venido a pasar el día, pero si era sincera mi cuerpo ya no aguantaba más ni un minuto despierta, necesitaba dormir, pero aquella pesadilla regresaría a mi.

Solo... cerraré los ojos un momento, un parpadeo.

–¡JungKook!– lo llamaba con todas mis fuerzas, pero el no respondía a pesar de estar frente a mi.

–El no te escuchará.

–¿Quien eres tú?– podía escuchar una voz, pero no sabía de donde venía ni mucho menos donde estaba yo.

Utopia JJK. (LOVE BOOK III) [EN EDICIÓN]Donde viven las historias. Descúbrelo ahora