^ treinta y seis

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–¿Me explican por qué debo recoger su desastre?– pregunté plantándome frente a la televisión.

–Nath, eres nuestra amiga– dijo Hobi mientras dejaba un beso en mi frente. Lo limpie de inmediato, no me molestaba en absoluto sus muestras de cariño, pero en este momento me hervía la sangre.

–¿Y eso que?– cuestione– No soy su sirvienta.

–Déjame ver la televisión– dijo YoonGi mientras me lanzaba una papa frita.

–Está bien, está bien– di un gran suspiro– Pero escúchenme bien cuarteto de flojonazos– dije a los cuatro chicos que estaba tirados en el sofá– Ustedes no se irán de mi casa hasta que esté tan limpia como cuando llegaron.

–Uy, ya los regañaron– dijo JungKook desde el sillón individual.

–También va para ti Jeon– lo mire con los ojos entre cerrados y no dijo nada más.

–Amor, amor, amorcito, no te enojes– JungKook se levantó tan rápido como pudo y me siguió hasta la puerta.

–Solo quiero la casa ordenada cuando llegue ¿Esta bien?– deje un corto beso en sus labios– Y si pueden la comida hecha.

–¡Nathalia!– chillo Tae desde el sofá y desvíe mi mirada hacia el– ¡Traes un bote de helado!

–¿Que no deberías de estar con Alex?– cuestione.

–Está enojada conmigo– hizo un puchero que derritió mi corazón– Para eso es el helado, aunque también puedes traer unas botellas de Soju y...

–Alcohol no– dijimos Jin y yo al mismo tiempo.

–Que aburridos– dijo mientras se levantaba y subía las escaleras– Todo por eso me iré a llorar a su habitación– amenazo– No que asco, no dormiré en el mismo lugar donde tienen sexo– se regreso hasta el sofá.

–Que bueno que lo recuerdas, porque no he cambiado las sábanas de lo que hicimos hoy– hablo Kook.

–¡JungKook!– lo reprendí golpeando su brazo– Eso... eso es mentira.

–Claro que es mentira Nath– dijo Hobi– ¿Debo recordarte que llevamos tres días en su casa?

–Y sigo preguntándome qué hacen aquí– les di una ultima mirada– Tengo que irme a la academia amor– deje un beso en los labios de JungKook.

–No, no vayas– dijo envolviendo mi cintura en sus brazos y escondiendo su cabeza en mi cuello, dejó pequeños besos en este– No me dejes.

–JungKook, se me hará tarde– reí por las cosquillas que provocaba– Regreso en la noche– me separé antes de que pudiera agarrarme de nuevo.

El día era bastante agradable, la brisa era cálida, y me encantaba el movimiento que hacía mi vestido con el viento. Me sorprendía que tan rápido pasaba el tiempo, ya era primavera y los días de verano ya se acercaban, eso quería decir que llevaba ocho maravillosos meses casada con JungKook, cuando la señora Cho decía que el tiempo pasaba volando no mentía.

Hablando de la señora Cho, necesitaba hacer una consulta con el cardiólogo lo más pronto posible, su salud no era la mejor en estos días.

–No, no, no, permiso, permiso– dije a las personas que estaban frente a mi.

Y así era como mi mente se distraía hasta porque pasara una mariposa. Recuerdo que mamá decía que había un lugar mágico en Mexico que estaba lleno de mariposas.

¡Nathalia! ¡Pon atención!

Era distraída y no había ninguna duda de eso, eso provocó que ahora tenga que esquivar a las personas, ya que por poco me pasó de estación.

Utopia JJK. (LOVE BOOK III) [EN EDICIÓN]Donde viven las historias. Descúbrelo ahora