Utopia JJK. (LOVE BOOK III) [EN EDICIÓN]

cuatro ^ incorrecto

Llevo varios meses en la academia he mejorado mucho, sin duda es agotador viajar casi a diario.

Nena, papá y yo tenemos una sorpresa para ti, te amamos.

Mamá.

Fue la nota que encontré en la mesa de la cocina cuando entre a casa, fui a cambiarme de ropa y arreglar un poco mi cuarto en lo que ellos llegaban.

Después de un tiempo llegaron.

–Nath, llegamos– dijo mamá quitándose los zapatos.

Fui a la puerta a saludarlos, se veían cansados pero felices.

–¿Cual es mi sorpresa?– pregunté ladeando la cabeza.

–Ven, siéntate nena– dijo papá y los tres fuimos a la sala.

Nunca los había visto tan nerviosos y emocionados, pero si la sorpresa era para mi, ¿por qué ellos estaban nerviosos?

–¿Ya pueden decirme cuál es mi sorpresa?– dije con emoción.

–Bueno nena, con esto nuestra vida cambiará un poco, pero cambiara para bien– dijo mamá tomando la mano de papá.

–¿Ósea que no es una sorpresa para mi?– pregunté.

–Claro que si, es una sorpresa para todos princesa– dijo papá.

–Bueno mi niña, tú a veces nos dices que te sientes un poco sola y que a veces no tienes con quien jugar ¿no?

–Si– dije con varios asentimientos de cabeza.

–Entonces eso está a punto de cambiar– dijo papá.

–¿Porque?– pregunté.

–Porque... tú mami está embarazada y tú tendrás un hermanito– dijo papá.

–O hermanita– acompleto mamá.

–¡¿En serio?! ¿Voy a tener un hermanito? ¿Y yo seré su hermana mayor? ¿Y podré cantarle todas las noches como hacen conmigo? Pondré enseñarle a tocar la guitarra o a bailar– dije emocionada saltando en el sillón– ¿Donde esta? Ya quiero jugar con el.

–Tranquila pequeña– dijo mamá entre risas– aún es muy pequeño y apenas está creciendo aquí– mamá señaló su estómago.

–¡Te comiste a mi hermano!– pregunté asombrada– dice un amigo que comerse a las personas es cavinalismo.

–Canivalismo– corrigió Mamá– y no no me lo comí Nath, cuando estes más grande lo entenderás, ve a poner la mesa que ya tenemos que comer.

Los días pasaban, las semanas, los meses, mi hermano cada vez crecía más y más, y yo ya lo quería conmigo.

Al final del día resultó que tendría un hermanito, se llamaría Neithan, yo misma lo elegí.

Aunque muchas cosas comenzaron a cambiar, mis papás tenían razón, mamá cada vez estaba más cansada, casi ya no podía viajar a Seúl para ver mis presentaciones, solo iba papá.

Aún así sabía que era por el bien de mamá y de mi hermanito, puedo esperar un tiempo más para que mamá pueda volver a verme.

Dentro de muy poco habrá una presentación muy importante, dice papá que irán directores de las mejores escuelas de artes en Seúl y seleccionarán a los mejores participantes, ellos dicen que si me esfuerzo, podrán elegirme.