Ha comenzado a lloviznar cuando hemos llegado al pueblo de Hogsmeade por lo que junto a Sam comenzamos a caminar más rápido. Faltan aún un par de metros para llegar a Las Tres Escobas cuando distingo el rojo cabello de un Weasley, un par de pasos más me ha hecho darme cuenta de que era mi fotocopia menos favorita. Su cuerpo se ve tenso, mucho más de lo que esta el mío. Samantha lo nota y se detiene de golpe, obligándome a detenerme a mi también.
-Espera aquí, yo iré a ver que es lo que quiere- dice luego de ponerse frente a mi, no esperando respuesta se marcha a paso decidido hasta Weasley, pero la sonrisa que brota de los labios del pelirrojo me hacen dar largas zancadas y tomar el brazo de Sam, girándola, besándola, mostrándole a Weasley que ella es mía, y que no pienso compartirla con él, bajo ningún criterio. Ninguno. Ella se separa de mi luego de devolverme el beso.
-Vete a esperar- me gruñe, yo le guiño el ojo. Camina hasta Fred y este la saluda con un beso en la mejilla. ¿Alguien le ha dicho a ese desgraciado que no se toca lo que no es suyo? Sam le dice algo y él sonríe y levanta las hombros, hablando en voz alto, muy alta, queriendo que escuche.
-¿Acaso está mal venir a ver a mi chica?- pregunta acercándose a ella, esta da un paso atrás y en mi cerebro se prende la luz de alerta.
Camino sigilosamente hasta ellos y pongo una mano en la cintura de Sam, acercándola a mi cuerpo, ella se sobresalta un poco, y la tensión entre Fred y yo se hace palpable y tangible, así como la lluvia que cae sobre nosotros. Mi cuerpo está hirviendo por las palabras que él acaba de decir, ella es mía, no de él.
-Desaparece de aquí, Weasley- gruño, acercando a Fudge un poco más cerca de mi cuerpo.
-O qué- responde de manera altanera- ¿Acaso vas a llamar a tus amigos mortífagos y decirles que me maten?
Oh no, él no ha dicho eso.
Mi cuerpo tiembla al tiempo en que saco mi varita de dentro de la túnica, Sam gime y toma mi brazo, bajándolo, sacándome la varita de la mano.-Fred- le regaña, este levanta una ceja, incrédulo.
-No puedo creer que lo defiendas. ¿Acaso no recuerdas que cuando él te dejo, tuve yo que consolarte?
El cuerpo de Samantha se sobresalta y aún que me esta dando la espalda se que sus ojos se han agrandados, la rabia me comienza a invadir mientras no se muy bien que esta pasando aquí.
-¿Qué?- preguntó entre dientes, mostrando mi descontento. Fred ladea la cabeza. Soy casi de su porte, pero estoy seguro de que lo estoy intimidando.
-¿No le has dicho que estuvimos juntos?- mi sangre se congela y mi corazón se detiene por unos segundos, ¿Qué acaba de decir?- Oh, vaya, creo que alguien aquí no lo sabía.
-Nosotros no es...- Sam intenta decir, pero es interrumpida por mi gruñido. He soltado su cintura y me encuentro caminando, más bien corriendo, por las calles del pueblo, alejándome de ellos. Escucho los gritos de Sam tras mío, sin embrago no me detengo. No puedo. Estoy muy enojado. ¿Cómo ha siquiera recriminarme de haber estado con otras chicas durante nuestra separación si ella misma se encontraba saliendo con Weasley? Era demasiado para mi, era injusto, y doloroso, ¿Por qué ella no pudo decírmelo a la cara? ¿Por qué me tuve que enterar de esto a través de alguien más? Comienzo a aminorar la marcha cuando siento que tengo que golpear algo.
Estoy cercano a la plaza del pueblo cuando soy derribado. Grito e intento desasearme del peso que me mantiene en el suelo, pero no lo logro. A pesar de la olor a lluvia que hay en el aire, siento su perfume, no quiero verla, realmente estoy molesto. Intento sacármela de encima pero no puedo, ella se aferra a mi con mucha fuerza. Estoy segura de que estamos montando una escena y que seremos la cotilla de la semana en el castillo, pero a Sam no parece importarle, ella solo esconde su cara en mi cuello y me abraza.
-Suéltame.
-No.
-No le encuentro la gracia, suéltame ahora, estoy hablando en serio.
-Nunca he dicho que lo hago en broma. No te soltaré.
-Tu te lo buscaste- murmuro.
Intento girar sobre mi propio cuerpo y nos saco de ahí. Jamás había realizado una aparición conjunta, por lo que el incómodo sentimiento se siente mil veces peor de lo que normalmente hace. Cuando llegamos al pueblo cerca de mi casa ella se suelta suavemente, quizá un poco mareada quizá confundida, pero aprovecho la instancia para volver a desaparecerme nuevamente en Hogsmeade.
(...)
Regresé al castillo, y en estos momentos me encuentro en la Sala de los Menesteres, destruyendo todo lo que la sala me ha proporcionado. Las lagrimas caen tibias por mis mejillas con impotencia, porque en mi cabeza se multiplican todas las cosas que Sam y Fred pudieron hacer juntos. ¿Cuántas veces él la habrá besado? ¿Cuántas veces habrán despertado juntos? Esto era más de lo que podía soportar. La habitación es iluminada súbitamente y se que es Sam con su fénix. Hago como si no noto su presencia y aquello me perjudica un montón. Ella me ha pillado con la guardia baja.
-¡Petrificus Totallum!-
Medio segundo después, mis mano están pegados a mi cuerpo y mis piernas juntas. Mis cuerpo está completamente inmóvil, literalmente no puedo hacer nada. Samantha sabe como jugar. Camina hasta donde mis ojos la ven y creo que una gran opresión me llena. Sus ojos están rojos de tanto llorar y su nariz está roja, al igual que sus párpados. Su ropa está completamente embarrada.
-Por las buenas o las malas, me tendrás que escuchar- dice, su voz suena rota y sarcástica- Fred y yo no estuvimos juntos.
¿Qué?
-Sólo nos besamos dos veces, y te juro que no fue nada. Puedes preguntarle a quienquieras dentro de la Orden, siempre me mantuve a raya con él.- un par de lágrimas se deslizan de sus ojos y caen en mis manos. El corazón se me hace pequeño nuevamente, pequeño y doloroso- y la ultima vez juré que eras tú. Yo realmente intenté darle una oportunidad a Fred, pero simplemente no pude. Eras tú todo este tiempo, no podía sacarte de mi cabeza, no podía mirarlo a él como lo hago contigo. Lo siento si no te lo dije, pero no quería angustiarte por cosas que carecían de importancia.
Si pudiera hacer algo ahora, sonreiría, le besaría y le diría que cuando me acostaba con las otras chicas, también intentaba borrarla de la piel, pero que jamás lo logre.
Ella se saca las lagrimas y me vuelve a apuntar con su varita , para romper el hechizo. Comienzo lentamente a recuperar la movilidad de mi cuerpo y ella cruza la habitación estando a punto de salir, cuando me pongo de pie y la alcanzo antes de que abra la puerta y me deje solo. La miro directo a los ojos y la beso. Creo que no hay nada mejor que hacer ahora que besarla. Pongo mis dos manos en sus mejillas y profundizo el beso. Ella sonríe y sé que ya, todo ha quedado olvidado.(-----)
Sólo diré omg. Hoy estaba en el área de la piscina del hotel donde me encuentro ahora cuando me puse a revisar las notificaciones que tenía, y había una que me llamo mucho la atención. Alguien me había dedicado algo. Personalmente me costo mucho dejar de mirar a la pantalla y entender lo que estaba pasando. Pinché la notificación y era una especie de ¿recomendación literaria? Sobre esta saga. Creo que jamás me había sonrojado tanto, es decir, me tomó por sorpresa, y mucho.
Por consiguiente el capítulo está dedicado a @MyFeelingsCovers porque todo lo que pusiste ahí me hizo reír y me puso muy muy feliz. -Si quieren leerlo está en su perfil, el archivo se llama Recomendaciones, y C.H.U sale en el segundo aparte.-

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Can't Hold us (DM-3T)
Fiksi Penggemar*Tercera Temporada* La muerte de Dumbledore fue un factor importante en esta Segunda Guerra Mágica. La inseguridad se cierne sobre la población. El actual Ministro de la Magia ha sido asesinado y Voldemort tiene el Ministerio a su merced, tal y cuál...