Bienvenida

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Los días esperando el regreso de Jisoo fueron una eternidad para mí y probablemente insoportables para Chaeyoung por tener que soportarme hablando del tema todo el tiempo.

Desde que me enteré que volvía había intentado comunicarme con ella sin ningún éxito, ya que al parecer el número no existía.
Necesitaba saber los detalles de su regreso y sobre todo necesitaba saber qué onda con jennie, pero todo intento fue en vano ya me había resignado a no saber nada de ella hasta su regreso.

El sonido del celular me despertó, lo agarré para ver quién se atrevía a cortar mi sueño de domingo, y el número en la pantalla me dejó desconcertada por la cantidad de números.

- Malditas tele-operadoras - dije cortando la llamada.

Dejé el teléfono dónde estaba y traté de volver a a dormir, pero que el teléfono volvió a sonar, lo tomé y alcance a ver qué igual era un número desconocido, contesté con todas las ganas de mandar a la mierda a alguien.

- ¡aló! - respondí cabreada.

- ¡Que esa manera de responder a tu hermana Lisa yah! - dijo aquella voz

Abrí mis ojos como platos, y como un resorte me senté de inmediato.

- ¿JiChu? ¡Eres tú! - respondí sin poder contener la emoción

- ¡Poong! Kim Jisoo al habla - dijo con su inigualable boludez de siempre.

- Un momento- la interrumpí viendo el reloj eran las 10:30 - ¿ya estás aquí? Se supone que llegabas en la noche, iba a esperarte al aeropuerto- dije quitándome la sábanas de golpe para alistarme a recibir a mi prima.

- No, aún no llegó a Corea tranquila- dijo - podía escucharla reír mientras hablaba - pero pronto abordaré, te llamaba justamente por eso, sé qué debes estar muy cabreada por no haber hablado de todo esto antes.

- Ah pues si lo estoy y mucho... pero ya tendré tiempo de cagarte a piñas, tenemos mucho de que hablar han pasado tantas cosas...

- Y lo hablaremos cuando llegue - interrumpió - estoy feliz de volver hermanita, cuenta las horas hasta que noche, ahora están llamando para abordar nos vemos.

- Buen viaje Chu.

Cortó la llamada, y me acosté un rato para luego arreglarme para bajar a desayunar.
Por ser domingo Nana dejaba que duerma hasta tarde, así que probablemente no me encontraría a Chaeyoung para desayunar como siempre.
Llegué a la cocina notando que estaba vacía, Astrid apareció y  se ofreció a preparar mi desayuno pero sinceramente me gustaba más los desayunos de nana, por lo que rechacé amablemente el ofrecimiento y se marchó.

Me senté pensando en que desayunar, "talvez podría desayunar fuera", pensé, pero teniendo en cuenta que mi castigo aún no había terminado, deseché la idea ya que luego tendría que excusarme y dar mil explicaciones de que no salí a hacer nada malo.

Me levanté buscar si había cereal o alguna otra cosa de comer, lamentándome por haber rechazado el desayuno de Astrid.

- ¿Qué estás haciendo?-

La voz de Chaeyoung entrando a la cocina me hizo saltar del susto.

- ¡Mierda me asustaste!- respondí

- Lo siento, no sabía que eras tan susceptible a los sustos - dijo riendo.

- Si se acercan hablándome de la nada no esperes que no me asuste - Respondí.

- Bueno y que se supone que estás haciendo - dijo sentada desde la isla en el centro de la cocina

- Busco cereal tengo hambre .

Soy Lo Prohibido //Chaelisa G!PDonde viven las historias. Descúbrelo ahora